OPINIÓN

Ni Vilda se atrevió con tanto: Montse Tomé firma su propia sentencia

Montse Tomé, a su llegada este martes al hotel Tryp Alameda de Osuna. /EFE
Montse Tomé, a su llegada este martes al hotel Tryp Alameda de Osuna. EFE

Confeccionó una lista con jugadoras que se habían declarado no convocadas, poniéndolas entre una sanción inasumible y la pared. Aseguró que había hablado con ellas cuando hasta el presidente del CSD le ha reprobado públicamente al contradecirle por boca de las futbolistas. Mintió al recordar que solo había aplaudido dos veces. Las cámaras recogieron hasta siete aplausos por su parte, uno de ellos después de que Rubiales hablara de falso feminismo. Montse Tomé se ha condenado a sí misma antes de empezar. Su futuro en la Selección ya no se cuenta, se descuenta.

Las mentiras de Montse Tomé.

Su ascenso, avalado no solo por quien la aupó a seleccionadora absoluta, sino también con el apoyo público de Rubiales y Vilda, ya era una herencia envenenada. Montse era parte del problema. Menor, pero parte al fin y al cabo. No se empiezan los cambios colocando al frente a quien participaba activamente de una estructura señalada por las denunciantes. No se rompe con el pasado cuando eres parte de él.

Los aplausos de la Asamblea siguen resonando semanas después. El propio Francos los recordó ayer mismo. "Va a haber unas elecciones en las que haya una renovación de la Asamblea, de los aplaudidores y aplaudidoras". Se desconoce si el presidente del CSD es consciente de que la seleccionadora fue aplaudidora, más allá de aquel comunicado posterior poniendo su cargo a disposición o de lo que haya dicho después. Cómo no recordar el tuit de Misa ("Por no comentar lo de todas esas personas que aplaudieron", con sus emoticonos de vómitos). A Misa y sus compañeras seguro que tampoco se les ha olvidado. De hecho, en el comunicado del 15 de septiembre, escribían: "Los cambios especificados a la RFEF se basan en la tolerancia cero ante esas personas que desde un cargo dentro de la RFEF han tenido, incitado, escondido o aplaudido actitudes van contra la dignidad de las mujeres".

El "más de lo mismo" con el que algunas de ellas recibieron su nombramiento se queda hoy corto para las futbolistas. Montse Tomé dio una lista de convocadas en contra de ellas mismas, dinamitando cualquier tipo de acercamiento cuando su primera decisión ha sido la de exponer a futbolistas que son campeonas del mundo a ser inhabilitadas. Porque no solo convocó a las que estuvieron en Sídney, sino que también ha expuesto a tres de las 12 que renunciaron al Mundial por mantenerse firmes (Mapi León, Patri Guijarro y Amaiur). Ni Vilda se atrevió con tanto.

El tsunami está en su apogeo, y cuando pase se podrá comprobar todo lo que ha arrasado. Es muy difícil imaginar que el banquillo quede en pie, a pesar de las palabras de Rafa del Amo ratificándola en su puesto tras la maratoniana reunión de ayer. La convocatoria de Montse ha sido un ataque a la integridad de sus jugadoras, que se han presentado en una concentración rocambolesca bajo la amenaza de perder sus fichas federativas. En la vorágine de estas jornadas es osado aventurar qué sucederá, aunque empieza a haber movimiento y ya sabemos que las jugadoras, salvo dos, han decidido continuar en la concentración. Por ahora. Pero lo que queda claro es que Montse ha firmado su propia sentencia.