Adam Hayes es más que un caddie para Jon Rahm: "Nos decimos las cosas a la cara"
El campeón resalta el papel de su caddie en sus victorias.
En su mono de trabajo blanco, el apellido 'Rahm' a la espalda y un número, el 49, en la parte izquierda de su pecho. A diferencia de lo que ocurre en Europa, la costumbre americana escribe las fechas con el mes por delante del día. El 9 de abril es el 4/9, por lo que parece que la cifra referencia del caddie de Jon Rahm, Adam Hayes, también presagiaba que este domingo iba a ser un día especial. Es el último detalle de una jornada para la historia del deporte español, donde el día de nacimiento de Seve Ballesteros, su ídolo y referente, y el 40 aniversario de su último triunfo en el Masters de Augusta ya lo tenían señalado en el calendario.
Hayes, un hombre 'desconocido' para el gran público que está detrás de las victorias de Rahm, no se puso una chaqueta verde pero también se llevó a casa otro de los objetos más preciados ayer en Augusta National. El caddie del campeón se lleva a casa la bandera del hoyo 18, amarilla y serigrafiada con el escudo del torneo. También podrá solicitar por carta el mencionado mono blanco, un tradicional montaje de fotos y una carta firmada por el director del torneo. Unos detalles que serán acompañados por la suculenta parte proporcional de su contrato con Rahm, que ronda en un 10% del premio (aproximadamente, 324.000 euros).
Este estadounidense, aficionado al golf desde bien pequeño gracias a su abuelo, tuvo su primera experiencia cercana al golf precisamente en Augusta. Siendo estudiante de octavo curso, sus padres le permitieron viajar para ver una ronda de prácticas del Masters. "Aquí vi mi primer torneo de golf", confiesa Hayes. A pesar de que buscó su carrera como jugador, pronto se dio cuenta que no llegaría a ser profesional y buscó un lugar para estar cerca de su deporte. Tras 24 años como caddie, desde la LPGA femenina al PGA Tour, llegó para unirse a Jon Rahm en 2017 y ha sumado todos los grandes triunfos junto al vasco.
Un caddie... de trabajo mental
El trabajo de caddie es tan grande como la capacidad de su protagonista. En el primer nivel profesional, son pieza clave en la decisión de la elección de los palos de cada golpe y en la lectura del campo y sus greens. Pero, como contaba el descubridor y entrenador de Jon Rahm, Eduardo Celles, hace unas semanas en Relevo, estar con el de Barrika te hace tener una función muy diferente al resto del circuito. Celles destacaba que Jon no necesita que nadie le diga dónde y con qué tirar, es un prodigio en el campo. Con el número 1 del mundo entra más en juego la parte mental de su sombra en el campo. Esa voz que le guíe en los momentos de tensión, le motive en los malos ratos y saque de él su garra más voraz.
"Solo le dije en el primer hoyo que se comprometiera al 100% con cada golpe de hoy", confiesa Hayes tras la ceremonia de premios. Un toque de atención que se volvió a repetir en el último hoyo, con el triunfo sentenciado, para redondear un torneo redondo: "No quieres terminar aquí con un bogey". A lo que el golfista le respondió confirmando una afinidad que les lleva a lo más alto: "Estás leyendo mi mente".
Esa parte mental y psicológica del juego, esa calma adquirida en su relación en el campo, se ha convertido en el frasco de las esencias de la calidad de Rahm. "Eres un modelo de comportamiento para mí, con tu profesionalidad. Ganamos estos torneos juntos y quiero agradecértelo", destacó el campeón español a su fiel escudero tras enfundarse la chaqueta verde por primera vez.
"Me gusta que, si tienen algo que decirme, que me lo digan a la cara. Con él, esto es recíproco", señala Rahm, que resalta que "la honestidad y las ganas de trabajar es lo que hace que funcione tan bien y por qué hemos hecho un equipo tan bueno". A pesar de vivir a más 3.000 kilómetros de distancia [Jon en Arizona y Adam en Charlotte] cuando no están en competición, la afinidad y amistad ha conseguido crear lazos de confianza.
La conexión con el jugador va más allá de los 18 hoyos al día. Un torneo son 4 jornadas de juego, con sus horas de juego y las de descanso. Más importante si cabe ha sido en este Masters, marcado por la lluvia y por una jornada final donde tuvo que jugar 30 hoyos, doce más de lo habitual. "Le dije a Jon que el tipo que sea más atlético y adaptable ganará el torneo", dijo Hayes. "Con todo el clima y las paradas y arranques, la adaptabilidad iba a ser la clave más importante".
De la mano de Rahm, Hayes entra en la prestigiosa lista de victorias como caddie, que también tiene su propio palmarés. Willie "Pappy" Stokes, con Ben Hogan, y Willie Peterson, quien portó la bolsa de Jack Nicklaus en cinco de sus seis victorias, lideran la lista con cinco títulos y cinco banderas del 18 en casa. Nathaniel "Ironman" Avery (con Arnold Palmer) y Steve Williams (tres con Tiger Woods y uno con Adam Scott) tienen cuatro. Si nada cambia, el destino de Hayes en esta lista llevará consigo más triunfos españoles en Augusta.