US OPEN GOLF

John Shippen, el negro que derribó la barrera del racismo en el golf

El afroamericano disputó el US Open en 1896 y sus rivales pidieron la suspensión del torneo.

John Shippen, jugando en el US Open hace más de un siglo. /Reuters
John Shippen, jugando en el US Open hace más de un siglo. Reuters
Óscar Méndez

Óscar Méndez

La sociedad sigue dando pasos continuamente hacia la igualdad entre personas, aunque todavía queda mucho trabajo por hacer. Por suerte, mucho menos que hace décadas. A finales del siglo XIX y comienzos del XX, Estados Unidos era un país racista y los ciudadanos afroamericanos tenían menos derechos que los blancos. Pasaba también en el deporte, donde apenas se podía ver a negros competir en las principales competiciones. John Shippen fue uno de los deportistas que consiguió romper las primeras barreras raciales en el US Open de 1896.

Natural de Washington, era hijo de un exesclavo y ministro presbiteriano que fue enviado a trabajar a la reserva india de Shinnecock, cerca de Shinnecock Hills, uno de los primeros clubes de golf de Estados Unidos. A los nueve años Shippen encontró trabajo limpiando la maleza en las instalaciones y poco después como caddie, donde demostró un gran conocimiento del juego. Con 14 años su talento era tan visible que ya daba clases a los golfistas de la zona, y fue poco después cuando decidieron devolverle todo lo que les había aportado.

En 1896 Shinnecock Hills fue seleccionado para albergar el US Open, un torneo que solo contaba con una edición y que por aquel entonces, como el resto de citas golfísticas del planeta, estaba reservada para jugadores británicos. Los socios del club quisieron premiar a Shippen y le pagaron la cuota de inscripción para disputarlo y medirse a 33 profesionales procedentes de las Islas Británicas. Pero no todo iba a ser tan sencillo.

El resto de participantes amenazaron el día antes al inicio del torneo con no disputarlo, ya que no querían compartir campo con una persona de raza negra. Y fue ahí donde Theodore Havemeyer, presidente de la USGA, ayudó a cambiar la historia del golf. "El torneo se disputará aunque Shippen y Bunn (de raza india) sean los únicos participantes", expuso antes de la cita. Finalmente, todos se presentaron a jugar.

A diferencia de lo que ocurre hoy en día, a finales del siglo XIX el torneo se disputaba en dos días en lugar de los cuatro actuales. Y tras la primera jornada, Shippen, que se conocía al dedillo el campo que tantas y tantas veces había completado, compartía liderato. De un plumazo se convertía en el primer jugador negro que disputada un Major de golf y que, además, lo lideraba. El segundo día no fue tan positivo.

Medalla entrega a Fouls en el US Open de 1896. Getty
Medalla entrega a Fouls en el US Open de 1896. Getty

El estadounidense estaba completando una vuelta normal hasta que llegó al hoyo 13, donde necesitó 11 golpes para embocar la bola y que le llevaron a ocupar la sexta posición final en aquel US Open a siete golpes de Foulis, el campeón. "He deseado cientos de veces haber jugado ese pequeño par 4 de nuevo", aseguró Shippen años después.

Su participación en ese torneo derribó muchas barreras, aunque los siguientes pasos fueron más lentos de lo esperado. El siguiente golfista negro en jugar el US Open fue Ted Rhodes en 1948. No fue hasta 1975 cuando Lee Elder se convirtió en el primer afroamericano en llegar al Masters de Augusta y Tiger Woods fue el primer jugador negro en ganar el US Open. Fue en ese momento cuando quiso honrar la figura de Shippen. "Sin él todo esto nunca hubiera sido posible", confesó el ganador de 15 Majors. Su carrera y su legado quedaron plenamente reconocidos cuando la PGA le otorgó a título póstumo su tarjeta como miembro de pleno derecho en 2009.