Las peripecias del único nadador ruso en París: un 'crowdfunding' y un email a escondidas a Washington

Los Juegos Olímpicos son por excelencia una de las principales metas de todo deportista, sino la que más. Este año se están viviendo profundamente marcadas por todos los temas políticos que están sucediendo a nivel mundial. La principal polémica salió a la luz cuando se establecieron ciertas condiciones para que los deportistas rusos pusiesen formar parte de la competición.

Evgenii Somov ha dado un paso al frente y se enfrenta solo al resto del mundo en la competición como el único nadador de origen ruso. Somov ha competido sin la bandera de su país, bajo un estatus neutro con el que no le ha conseguido ganar ningún podio pero sí. "Me estoy divirtiendo pase lo que pase", declaró. Cuenta con el apoyo de parte de la población de su país que, lamentablemente, no le han podido ver en la piscina, ya que los Juegos no se televisan en territorio ruso.

Tuvo que hacer peripecias para estar aquí: se pagó propio pasaje, con algo de ayuda de un GoFundMe. Tuvo que luchar por un visado, enviando su pasaporte por email a una embajada francesa en Washington, DC.

A pesar de luchar bajo un traje verde y blanco habla con todos los deportistas de la Villa Olímpica. "Nadie me juzga por mi pasaporte", aseguraba el nadador. Independientemente de su decimotercer puesto en 100 mariposa, Somov se lleva de los Juegos mucho más que el hecho de competir en lo más alto del deporte, "Es una gran experiencia. Estoy pasando el rato con los mejores atletas del mundo".

Se perdió los Juegos de Tokio 2020 pero eso no le ha frenado cuatro años después. El nadador tiene claro su camino y ha decidido luchar por su deporte dejando a un lado la situación que vive su país. "Sin comentarios" es la respuesta por excelencia del atleta ante la guerra.

A excepción de Somov y los otros catorce atletas rusos que han acudido a la cita olímpica, numerosos deportistas se negaron a competir bajo un estatus neutral, como es el caso del nadador Kliment Kolesnikov.

A sus 24 años, Kliment ya suma a su palmarés la medalla olímpica de plata en los 100 de espalda y una de bronce en 100 libres. Ambos podios los consiguió en la pasada edición disputada en Tokio2020, aunque, a pesar de ello, no ha querido pelear por el oro en París.

"Si no obtienes el estatus neutral, no clasificas a los Juegos. Hay quienes están dispuestos a aceptar estas condiciones de las federaciones internacionales y actuar. Me alegraré por ellos si compiten. Yo no puedo aceptar esto", declaró el nadador cuando se supieron las condiciones establecidas por el Comité Olímpico Internacional.

En los 100 de espalda de esta edición el oro se lo ha llevado a casa el italiano Thomas Ceccon con un tiempo de 52:00, ni mas ni menos que el mismo que necesitó Kolesnikov para agenciarse el segundo puesto del podio hace tan solo cuatro años.

El dos veces récord mundial de 50 de espalda, no solo podría haber luchado por el oro sino que se podría decir que tenía el podio prácticamente asegurado. Con la marca de la edición anterior ya habría superado al chino Xu Jiayu (52:32) y al bronce del estadounidense Ryan Murphy (52:39).