EUROPEO | ESPAÑA 7 - PAÍSES BAJOS 8

¿Entró el balón en la jugada decisiva de la final del waterpolo? El reglamento es distinto al del fútbol

El disparo de Bente Rogge en la derrota de España ante Países Bajos sobrepasó la fina línea que une los palos, suficiente para que el tanto suba al marcador.

La toma del gol decisivo./
La toma del gol decisivo.
Jonás Pérez

Jonás Pérez

España ha caído de forma cruel en la gran final del Europeo femenino de Eindhoven, ante la anfitriona Países Bajos y con un final de infarto. A falta de seis segundos para el final, las neerlandesas se pusieron por delante gracias a un tanto de Bente Rogge, que entró de milagro. De hecho, al otro lado de la pantalla muchos seguidores podían preguntarse si realmente la pelota había entrado. La respuesta es sí, porque el reglamento del waterpolo es diferente al de otros deportes.

Bente Rogge disparó contra la madera, golpeó en la espalda de la portera española, Martina Terré, y puso rumbo al otro palo, donde se quedó la pelota suspendida, sobre la línea. Los árbitros concedieron el tanto y Miki Oca solicitó tiempo muerto para tratar de igualar el duelo en los seis segundos restantes.

Ni siquiera les hizo falta repasar la acción en la pantalla (hay VAR en todos los partidos del campeonato), ya que en directo se mostró claramente como la bola entraba en la portería. Quizás se preguntarán por qué si no conocen el deporte y solo ven el esférico sobre la línea imaginaria de la portería.

El reglamento de waterpolo.
El reglamento de waterpolo.

En fútbol, por ejemplo, el esférico debe superar completamente la línea para que sea gol. En waterpolo no es exactamente así. La normativa marca una línea imaginaria delimitada por el comienzo de los palos de la portería. Una línea de un milímetro, que va del principio de palo izquierdo a principio de palo derecho.

Subirá el tanto al marcador siempre y cuando el balón supere completamente esa línea. Es decir, no es necesario que supere en fondo al grosor de los palos, sino estar toda la circunferencia en paralelo con los postes ya es suficiente.

La toma de la jugada.
La toma de la jugada.

De este modo, la imagen es clara y no deja lugar a dudas. Puede dar lugar a dudas si la pelota supera completamente los palos, pero en ningún caso si sobrepasa esa delgada línea delimitada de palo a palo. De ahí que las españolas apenas protestaran, conscientes de que les tocaba remar.

Miki Oca trató de diseñar una acción exprés, pero no fue suficiente. La Selección cayó con honor y continúa diseñando un currículum brillante. Desde la llegada del técnico al banquillo, suma tres Europeos, dos Mundiales, dos platas olímpicas y once medallas en total en grandes campeonatos. Las jugadoras llegaron con la ilusión de sellar su tercer Europeo consecutivo, pero se despiden con la certeza de que darán mucha guerra en lo que está por venir. En tres semanas, toca el Mundial de Doha. Y en verano, los Juegos Olímpicos.