Álvaro Bautista: "Corro porque me apetece y porque quiero"
El bicampeón del mundo de SBK analiza para Relevo su complicado inicio de curso tras colocarse líder en Assen.

Álvaro Bautista decidió el año pasado prolongar su carrera deportiva por lo menos un año más. El de Talavera de la Reina (Toledo) cumple en noviembre los 40 años y ha querido seguir porque le gusta disfrutar sobre su Ducati, con la que ha conseguido dos títulos mundiales en SBK, la categoría de motos derivadas de serie que está mostrándose muy espectacular y abierta en este arranque de 2024 (cinco ganadores distintos en las seis carreras largas disputadas hasta el momento). Un inicio de temporada para el que Bautista no las tenía todas consigo.
El año pasado sufrió una lesión cervical cuando ya había cerrado su segunda corona, un daño que no detectó hasta que no volvió de Sepang de disputar como piloto invitado la prueba de MotoGP del Gran Premio de Malasia, en lo que debía ser un premio de su marca por sus logros. Una dolencia que ha arrastrado hasta los primeros meses de esta temporada, algo que ha retrasado su preparación y que se ha sumado al segundo hándicap que ha tenido que afrontar: el cambio en el reglamento técnico de SBK que ha establecido un peso mínimo moto-piloto, una norma que se bautizó irónicamente como 'ley anti-Bautista'.
Con todo esto, el piloto español ha sido capaz de sacar petróleo de las tres primeras citas 2024: segundo en la segunda carrera en Australia; tercero y primero en las dos de Barcelona, con un tercero en la prueba corta; y tercero y segundo en Assen este pasado fin de semana, con victoria en la 'Superpole Race', el sprint de SBK. Todo esto le ha colocado como líder de la general, seis puntos por delante del turco Toprak Razgatlioglu. Bautista está empezando a disfrutar, lo que buscaba, y lo que hace que no descarte seguir un año más, aunque la decisión aún no está tomada.
Daba la sensación de que este inicio de temporada tenía un punto crítico para ti, por cómo fue el invierno con tu lesión cervical, y por el cambio en la moto con la norma del peso.
He pasado un invierno bastante chungo, porque era una lesión que iba a peor. He estado bien jodido. Empecé a recuperarme en enero, ahí parecía que había tocado fondo y que iba a mejor. Pero no pude prepararme mucho. Y en SBK, como empezábamos a final de febrero, los primeros entrenamientos fueron a final de enero. Y no llegué a mi cien por cien, y se añadió lo que cambiaba en la moto por la norma del peso. Por una cosa o por otra, no tuve buenas sensaciones en los tests de pretemporada. Yo lo achacaba primero a la lesión, porque no podía pilotar como quería. En Australia las condiciones no eran normales, por el asfalto, y pensé que podía ser eso. Pero cuando fuimos a entrenar a Barcelona, estando ya físicamente bien, vi que el feeling con la moto no era bueno, no era como el año pasado, y eso que la moto era la misma.
¿Todavía estás lejos de sentirte al cien por cien con tu moto como en los últimos dos años?
No. Para la carrera de Barcelona hicimos unos cambios, trabajando como si fuese una moto nueva aunque no había cambiado, para buscar lo que yo quería, y olvidándonos del último año, y empezó a ir, no bien, pero sí que encontramos un camino. Ahí nos dimos cuenta de qué hacer y fui recuperando la sensación. Pero este último fin de semana en Assen no pudimos mejorar eso, porque hizo mucho frío, estuvo todo el rato lloviendo, y eso no nos dejó trabajar ni probar nada. Y aún así hemos hecho un buen fin de semana, pero no estoy como quiero estar con la moto. Por lo menos voy cogiendo confianza y vamos ganando prestaciones.
¿Te ha quitado o te quita eso el sueño?
Sinceramente, estoy tranquilo. La manera que tengo ahora de afrontar las cosas es de no meterme tanto dentro de los problemas. Sé que está ahí, sé que se puede solucionar, y que es cuestión de tiempo. Lo veo más como algo fuera del piloto, trabajo en mí mismo, intento mejorarme, y respecto a la moto sé que tengo a Ducati detrás, a mis técnicos, y sé que es cuestión de tiempo solucionarlo. De hecho, ya estamos en el camino. No es que no me importe, pero no me como la cabeza como cuando era más joven. Lo llevo de una manera más natural, intento disfrutar de lo que tengo. Me he hecho mayor (Risas).
Entonces el saldo de los tres primeros fines de semana tiene que ser muy bueno vistas las circunstancias.
Sí, la verdad es que sí. Si me dices antes de ir a Australia, tal y como estaba físicamente y viendo las sensaciones con la moto, y más viendo esta parrilla, que iba a estar líder, te lo lo habría firmado con los ojos cerrados. Ha cambiado mucho la película con respecto a 2023. Y sobre todo de Assen hemos sacado petróleo, con las previsiones de frío y lluvia que teníamos, que luego fue tal cual. Como soy pequeño, me cuesta más meter en temperatura los neumáticos, y pese a eso la cosa ha salido muy bien.
Pasado unos meses, habrás asumido ya esa normativa que bautizamos como 'anti-Bautista', y buscarás eso que dijiste el año pasado cuando decidiste seguir un año más, pasártelo bien.
Sí, al final es por lo que he seguido corriendo. Porque creo que estoy en un momento de forma físico y mental bueno, y no tengo ni la presión ni la necesidad esa de tener que correr. Lo siento como un hobby, que corro porque me apetece y porque quiero, pero sé que si mañana no me apetece, ya he cumplido en mi carrera deportiva. ¿La norma 'anti-Bautista' como dices tú? No es que no lo piense, desde que la pusieron dije que no estaba de acuerdo, pero que iba a trabajar lo mejor que pudiera para que las pequeñas ventajas que podía tener antes y las bastantes desventajas, intentar no perder muchas de las primeras y minimizar las segundas. Eso lo tenía claro desde el primer día. Pero sigo con mi pensamiento de que no me parece justo, y no sólo por mí. En el futuro, los pilotos que vengan a esta categoría no digo ligeros, sino normales, pueden no tener la capacidad de ir rápido desde el principio por este hándicap, con estas motos. Creo que se tiene que quitar. Esto nunca ha existido en MotoGP, y estas motos pesan más. No entiendo por qué existe. Bueno, sí lo entiendo, si yo hubiese pesado diez kilos más esta norma hoy no existiría. No me parece justo que por mi culpa, entre comillas, se vean perjudicados otros pilotos en el futuro. O que las fábricas terminen eligiendo pilotos que pesen más para evitar esto. Yo voy a intentar que quiten esta norma, e insisto que no es por mí, porque con esto he ganado en Barcelona y en Assen.
¿Has pensado cuándo quieres decidir qué harás el año que viene? No sé si Ducati te marca unos plazos.
Me siento en una posición privilegiada, porque tengo yo el mango de la sartén. Sé que ahora Ducati y Aruba tienen que renovar, pero nunca me han dicho nada, no me meten presión. Sólo me han dicho que soy su preferencia, y que haga lo que quiera. 'Si te apetece para nosotros sería le leche'. Después de todo lo que ha pasado este invierno para mí lo importante era volver a disfrutar. Ahora estoy en el camino, pero no tengo la prisa por decidir, aunque está claro que cuanto antes diga algo, mejor para el equipo. Vamos a pensarlo bien, con la familia, porque mis niñas se van haciendo mayores y eso te cambia un poco la perspectiva. Está claro que cada año pesa más, un año de ahora no pasa tan rápido como los de antes, pesa más. Pero no estoy preocupado.
SBK ha cambiado bastante, más allá de la famosa norma. Rea se fue a Yamaha, Razgatlioglu a BMW, tienes compañero nuevo, llegó Iannone, vimos el otro día a Gardner en el podio, etc. Cuesta saber qué puede pasar cada fin de semana antes de empezar.
Mola, me ha gustado este cambio un poco radical, con nuevos pilotos que han llegado, los que han cambiado de marca, la norma… Es un poquito más abierto. El año pasado era o Toprak o yo, y Rea ya estaba sufriendo un poco con la Kawasaki. Es verdad que se le está echando un poco de menos delante con la Yamaha, pero no es fácil después de tanto tiempo con otra moto, tan diferente. Creo que ha subido el nivel de la categoría, hay más pilotos que optan a ganar y a subir al podio, y esto es bueno para el campeonato. Y a nivel personal esto me ha motivado. En los últimos años había casi un orden establecido, mis rivales eran Toprak y Rea, y sabía de que cojeaban cada uno, y sabía que haciendo esto o esto podía ganar. Ahora si no sale uno, sale otro, hay una especie de anarquía. Me ha gustado y motivado, para defender el número 1. Y de cara a fuera ha dado más nombre a SBK, creo que ha crecido la expectación. Y me siento un poco culpable de este cambio, porque creo que antes de que yo llegara, o yo lo veía así, o eso parecía en España, no tenía ese interés, y ahora otros pilotos lo ven con otros ojos. Antes a SBK no quería venir ni yo, cuando me lo ofrecieron. Pero ahora es una opción muy atractiva.
¿Te ha sorprendido tu compañero, Nicolò Bulega? Era la gran promesa del motociclismo italiano, el protegido de Valentino Rossi, pero se perdió un poco hasta que aterrizó en Supersport con Ducati.
Es un tipo Fabio Quartararo, que llegó como una súper estrella, pero no brilló como se esperaba en Moto3, en Moto2 hizo casi sólo una carrera brillante, que le mandó a MotoGP, con todo el mundo dudando de ese salto… y luego, campeón del mundo. Me acuerdo cuando Bulega llegó con el equipo VR46 al Mundial de Moto3. 'Este va a ser el sustituto de Rossi, el mejor talento que tenemos'. Y luego al pobre le costó. Pero creo que tiene mucho talento y, sobre todo, un método de trabajo muy bueno. Contaba con él, ya dije que iba a ser un candidato al título desde este primer año, porque veía cómo iba en Supersport y cómo trabajaba, y el salto a SBK no es como el salto de Moto2 a MotoGP, aquí los neumáticos son los mismos, son más parecidas las motos. A principio de año yo contaba como rivales con Bulega, y sabía que Toprak iba a ir rápido con la BMW. Rea pensaba que podía tener más problemas, y al que no me esperaba fue a Iannone, le veo más competitivo de lo que pensaba, después de cuatro años sin competir, y con el nivel que hay. Es el que más me ha sorprendido.
Entiendo que tu objetivo sólo puede ser el tricampeonato.
Exacto. Es una consecuencia de cómo haces las cosas. Está ahí, pero a día de hoy no me obsesiona, intento trabajar al máximo y sacar el máximo de cada situación. Y sé que si soy capaz de hacer eso luego tendré muchas posibilidades de conseguirlo. Pero no me quita el sueño. Para mí hay cosas más importantes, como disfrutar de la moto, es lo que más motiva. Y si cada pequeña cosa la haces bien vas por el camino.
Te cambio de tema: ¿Qué te está pareciendo MotoGP hasta este momento?
Un poco parecido a lo que ha pasado en SBK, algunos cambios, pilotos nuevos, Pedro (Acosta) que ha llegado, que parece que tiene un estilo distinto al resto, no sé si porque es así o porque no se ha adaptado a la moto, pero que le está funcionando. Me está gustando más que otros años MotoGP. Veo más competitividad, más lucha, más batalla, como si se hubiesen soltado. Y hay más adelantamientos, porque ya vi en Sepang que era muy difícil pasar a otros pilotos con esta aerodinámica. Me está pareciendo más interesante.
¿Cómo ves la evolución de Marc Márquez con la Ducati?
A ver, creo que la moto es buena, y Marc es Marc, no hay que decir nada de él, así que sólo es cuestión de tiempo, de confianza. Ha pasado un periodo muy difícil, y hasta que todo vuelve a rodar, cuesta a un tiempo. No es sólo un cambio de moto, sino los problemas que tuvo. Le veo haciendo las cosas tranquilo, sin querer volverse loco. Igual el otro día en Austin sí que sintió algo de presión por ser el sitio que es, o a lo mejor no es presión, pero sí que por dentro sabes que estás en uno de tus circuitos, como Sachsenring. Y tiene que tener esa calma, porque aunque creo que está al cien por cien preparado, después de estar tanto tiempo sufriendo cuesta. Pero, vamos, estoy convencido al cien por cien de que va a ganar carreras este año.
¿Y el salto de Aprilia y de Viñales? Tú viste nacer ese proyecto, cuando apenas era una SBK adaptada a MotoGP.
Me acuerdo que en Austin conseguimos los primeros puntos para Aprilia en su vuelta a MotoGP. Aquellos inicios no tienen nada que ver con cómo están ahora, era un laboratorio aquella moto en 2015. En 2016 ya empezamos a tener una MotoGP, y ahora es muy distinta. Maverick es un tío que cuando todo está en el sitio y todo está como él quiere, va rápido. Pero como tenga algún problema y no le cuadren las cosas es todo lo contrario. Creo que Aprilia tiene que cuidarle más a él que a la moto, porque parece que ya la tienen. No sólo en Austin, en Portimao también luchó por ganar. Pero aquí no se puede saber nada. En Jerez, que es una pista más normal, veremos a ver qué pasa, veremos más dónde está cada piloto y cada marca. Pero me alegro por Aprilia porque sé cómo empezaron, han trabajado muy bien, y le está plantando cara a Ducati, y a KTM, que parecía que era la segunda potencia.