MMA
Pinchazo de Bellator 300
Usman Nurmagomedov y Cris Cyborg retuvieron las coronas del ligero y pluma con gran facilidad en Bellator 300. Carmouche venció tras la lesión de su rival.
Bellator festejó este sábado sus 300 eventos numerados. La promotora celebraba también los 14 años de vida que les contemplan. Fuegos artificiales, muchas leyenas en San Diego, confeti, guantillas doradas... el envoltorio fue perfecto, pero el espectáculo se quedó cojo por diferentes motivos. Dos horas de cartelera estelar que dieron para poco.
El primer varapalo llegó antes de comenzar, el lunes, Linton Vassell causó baja por lesión y no encontraron rival para Ryan Bader. El campeón del peso pesado no pudo exponer su campeonato y la noche de los cuatro cinturones se quedaba en tres. El trío de pleitos titulares hacía un buen cartel de nombre, pero había dos luchas con un claro favorito. Se demostró.
Usman Nurmagomedov ganó de manera holgada (triple 50-45), pero se llevó los abucheos del público durante gran parte de su pleito. Ver al ruso pelear en el striking es una delicia, pero es tan superior que falta emoción. Brent Primus le puso ganas, pero poco más le dejó el ruso mostrar. Arriba el aspirante no fue capaz de rozar al campeón y cuando la pelea se fue al piso el dominio fue completo de Usman. El ruso retiene así su corona del peso ligero y pasa a la fina del torneo que Bellator está organizando en ese peso.
Antes, Cris Cyborg aplastó a Cat Zingano en un asalto. La brasileña, de 38 años, está lejos de su prime, pero le sirve para ganar con gran solvencia a todas las rivales que puede tener en Bellator. Cyborg controló la contienda, sin apretar conectó fuertes manos y cuando su oponente se fue a por ella la llevó al piso para finalizarla en el ground and pound.
El último combate titular, que abrió la cartelera, era el más igualado sobre el papel y también lo fue, pero acabó de manera descafeinada. Liz Carmouche logró retener el Campeonato del peso mosca. Ilima-Lei Macfarlane, leyenda de la división en esta compañía, logró ganar el primer round y parecía que iba a poner en aprietos a la campeona. el duelo estaba parejo.
Tras tres asaltos, Carmouche ya estaba por delante y el cuarto todo cambió. Los duros pateos de Carmouche sobre Macfarlane pasaron factura a la hawaina, que evidenció claros síntomas de dolor. Tiró de arrojo y aguantó, pero en el quinto, tras una nueva patada en su rodilla izquierda la excampeona gritó de dolor y la pelea se acabó. Carmouche fue de menos a más y estaba siendo mejor, pero un final así deja frío a cualquiera.