Grasso mantiene su corona ante Shevchenko con un polémico nulo

Sobre Mike Bell recaen todas las miradas en este momento. El juez decretó un 10-8 en el último asalto del combate entre Alexa Grasso y Valentina Shevchenko. Debido a esa puntuación, su cartulina final quedó en un 47-47. Ese empate provocó el nulo (48-47, 47-48 y 47-47) en la pelea que cerraba el evento de UFC que puso el broche al fin de semana de la Independencia de México. El duelo fue muy igualado, pudo caer de cualquier lado, lo que no tiene explicación lógica es el empate. "He ganado, pero ha pesado estar en el fin de semana de la Independencia de México", espetó enfadad Shevchenko al acabar. La excampeona fue abucheada por los muchos mexicanos que estaban arropando a la suya en el T-Mobile Arena. Nadie quedó contento.

El pleito tuvo un nivel altísimo durante los 25 minutos que duró. Grasso venía de someter a una irregular Shevchenko en marzo. La excampeona aprendió la lección y salió seria al octágono. Golpeó con contundencia y rapidez de inicio para acabar llevando la pelea al piso. En el segundo acto, Grasso contragolpeó con una dura derecha que envió a Valentina al suelo. La contienda se igualaba, permitiendo a la mexicana respirar y crecerse.

El tercer asalto es para Shevchenko. La de Kirguistán llevó el pleito al suelo, teniendo un claro intento de sumisión. El cuarto acto es la clave de la pelea. Shevchenko tiene un gran striking y Grasso cuenta con un intento de sumisión en el suelo. Las MMA son un deporte de apreciación. En este punto se vio claro: 3-1 para la aspirante o 2-2, cualquier visión era válida. "No vayas al derribo, te estará esperando, no cometas ningún error", le pedía en la esquina Antonina a su hermana Valentina. La excampeona no hizo caso y tras un asalto de nuevo cerrado intentó el derribo en la parte final. Grasso la recibió y acabó dominando. El asalto fue para la campeona, pero en ningún caso se pudo dar un 10-8.

Si Mike Bell hubiese dado un 10-9 en round final, la vencedora habría sido Shevchenko. Además, en el cuarto asalto la excampeona recibió varios rodillazos cuando estaba con tres apoyos. La acción era ilegal. La aspirante se quejó levemente, pero el árbitro hizo caso omiso. Una deducción de puntos hubiese sido clave. No sucedió y con polémica se decretó un nulo que permite a Alexa Grasso retener su corona. La mexicana respiró aliviada al poder mantener su corona en un fin de semana tan especial para los mexicanos. Sigue siendo la campeona, pero su futuro lo tiene claro. La trilogía es de justicia.