UFC
Islam Makhachev: el número uno de la UFC estrena condición de campeón en Estados Unidos
El ruso, rey del peso ligero de UFC, no ha disputado ninguna pelea por el título en Estados Unidos. Este sábado, en el estelar del UFC 302, se enfrenta a Dustin Poirier en New Jersey.
Las dos victorias de Islam Makhachev sobre Alexander Volkanovski han provocado que el ruso sea considerado, de manera unánime, el mejor luchador de la empresa. El primer enfrentamiento entre ambos, en febrero de 2023, dejó dudas debido al gran desempeño de Volkanovski. El segundo, en octubre de 2023, las despejó todas. Había condicionantes en contra del australiano, pero el brutal KO de Makhachev fue incontestable.
El daguestaní, de 32 años, es campeón del peso ligero de UFC desde octubre de 2022. Ganó el título a Charles Oliveira y después se encargó de Volkanovski. Dos peleas por año es lo habitual para un luchador de este nivel, pero por encima de todo destacaba un dato: sus tres peleas titulares habían sido en Abu Dhabi. El país asiático es un lugar en el que pelean muchos luchadores rusos. La connotación política provoca que algunos de ellos tengan más problemas para llegar a Estados Unidos. No es el caso de Makhachev, quien por puros factores promocionales lleva desde febrero de 2022 sin competir en territorio estadounidense.
La empresa era consciente del detalle. 2024 tenía que ser el año del regreso de Islam Makhachev a Estados Unidos. La idea era clara: Islam debía liderar el UFC 300. El plan era que se enfrentase a Charles Oliveira. El brasileño iba a ser su rival en octubre de 2023, pero una lesión le dejó fuera y Volkanovski aceptó el chance. Tenía sentido, pero todo se rompió por una lesión del campeón que le impidió estar en abril en Las Vegas. La empresa tuvo que recomponer el cartel y había dudas sobre retorno. Precisamente, tras el UFC 300, Dana White anunció que la vuelta de Makhachev sería este sábado (UFC 302) en New Jersey.
La noticia de su regreso fue opacada porque en el mismo momento se dio a conocer que Conor McGregor pelearía en el UFC 303. No obstante, tener de vuelta al número uno es una buena nueva siempre. La pelea, eso sí, no será contra Oliveira. El excampeón decidió mantenerse en el UFC 300 y se enfrentó a Arman Tsarukyan. Perdió, por lo que su chance titular tendrá que esperar. Aún así, era inviable que pelease en abril y en junio, por ello la UFC le quiso dar la oportunidad a Dustin Poirier.
El Diamante creció mucho gracias a sus dos victorias consecutivas sobre McGregor (enero y julio de 2021), pero desde entonces es irregular. Perdió, por el título, frente a Charles Oliveira, ganó a Michael Chandler y volvió a caer ante Justin Gaethje. La aproximación no era la mejor, pero su gran victoria sobre Saint Dennis en marzo provocó que le llegase la llamada. En UFC importa mucho a quién se gana, pero sobre todo el modo y aquí volvió a quedar demostrado.
El combate tiene morbo por muchos motivos. El principal es la vuelta de Makhachev y el secundario es que Poirier mueve mucho entre el público estadounidense. Fuera de eso, el ruso es el claro favorito. Sólo ha perdido uno de los veintiséis combates que ha disputado y lleva una racha de trece triunfos. Es completo en el striking, en el suelo y en el wrestling. Parece superior a su oponente en todos los ámbitos. Khabib Nurmagomedov lo nombró su sucesor y de momento no ha defraudado.
El ruso es favorito y debe demostrarlo. El pleito llama la atención, pero la mirada a la división es compleja. Tsarukyan es el nuevo número uno de la división y parece el siguiente, ya que se necesita sangre nueva. Por detrás vienen de perder Oliveira y Gaethje. El cuarto ya es Poirier. Esto explica que Volkanovski haya sido el último oponente del campeón. Hace falta movimiento, lo cual quiere aprovechar Ilia Topuria, aunque al hispanogeorgiano le queda todavía trabajo en el pluma para poder pensar en una división superior. Ese es su objetivo, pero de momento el libra por libra tiene que defender su plaza. Makhachev no tiene permitido el fallo en su estreno en Estados Unidos como campeón.