Leon Edwards no es flor de un día: gana a Kamaru Usman en una pelea ajustada en el UFC 286
Leon Edwards retuvo el Campeonato del peso welter en el estelar del UFC 286. Usman se mostró vulnerable ante la mejora del nuevo rey de la división.

La patada que acabó con Kamaru Usman encumbró a Leon Edwards. Ese pudo ser un rápido resumen del segundo combate entre ambos luchadores (agosto 2022), pero la acción fue mucho más para los dos. Este sábado, en el estelar del UFC 286, tuvieron su trilogía y fue muy diferente a lo visto anteriormente. Los luchadores cambiaron de manera radical. Usman lució incómodo y se tomó el pleito de manera excesivamente personal. Edwards volvió a demostrar que un título da un plus a los luchadores. Fue mucho más pausado y completo que en las dos luchas anteriores. Mejoró en todos los aspectos, destacando cómo frenó el trabajo en el clinch y en el suelo. El jamaicano revalidó el Campeonato de la UFC del peso welter en una pelea cerradísima. Se impuso por decisión mayoritaria (48-46, 48-46 y 47-47). La cenicienta se convirtió en realidad. Su reinado no fue flor de un día.
El combate comenzó con un Usman muy pasional. Parecía que su plan era noquear a Edwards, por lo que se quedó en la distancia que quería el campeón. En el intercambio, Leon era superior. Con las patadas estaba trabajando bien las piernas del excampeón y también dañó incluso al africano en la zona de flotación. Cuando Usman intentaba el derribo se encontraba con un golpe. Todo cambió en el tercer acto, ya que Kamaru demostró que si le dejaban dar el 100% en los derribos, la ejecución sería fácil. Su pelea pasaba por ahí, no por el striking. Llegaba, sí, pero se estaba llevando castigo. Pareció más vulnerable en ese combate que en el resto de su carrera. Preocupante para él.
En ese tercer acto, con la superioridad de Usman, se vio una triquiñuela de Edwards. En el primer asalto, el campeón había metido su mano dentro de la guardilla de su oponente para frenar una acción en el clinch. En ese tercer round, Edwards se agarró de manera descarada en la jaula para no ser derribado y le costó un punto. Ese era el camino que debía seguir Kamaru, pero fue incapaz de mantener en el tiempo. Edwards era muy certero con sus piernas y Usman no lograba superarlo. Con todo cuesta arriba, el aspirante salió a por todo en el round final… pero fue insuficiente. Leon Edwards ya no es un competidor más y se notó. Se acabó llevando una pelea muy cerrada. Pleitos de los que hacen afición.
Al acabar, Usman apuntó que se sentía ganador: "Es suficiente", espetó. Fuera de lo obvio, el nigeriano tranquilizó a sus fans. Tiene 35 años (36, en mayo) y lleva tiempo sufriendo por sus maltrechas rodillas, pero se tomará un pequeño descanso y "volverá". Mientras, para Edwards lo siguiente en la lista parece Colby Covington, quien estuvo en el O2 Arena de Londres para meter presión al campeón. Edwards le mencionó y es que el campeón no se achanta con nada. Empezó a hacer MMA con 17 años porque su madre quería evitar que se metiese en problemas en la calle. Su padre, que se dedicaba al narcotráfico, había muerto en un tiroteo en un club nocturno en Londres. Superar a fanfarrones en su vida ha sido una constante. Covington parece el siguiente. Un campeón legítimo espera a Colby. Edwards se consagró ante su público. Leon es una realidad.