Topuria siempre cumple su palabra: noquea a Holloway para afianzar su legado en UFC
Ilia Topuria noqueó en el tercer asalto a Max Holloway para retener el Campeonato de la UFC del peso pluma. Volkanovski le retó tras el pleito.

En el momento en el que Robert Lewandowski marcó el 0-1 en El Clásico, Ilia Topuria estaba siendo enfocado por las cámaras de UFC en el vestuario. Como se preveía, sobre todo por el enfado del luchador, el fútbol coincidió con su combate. Muchos alternaron ambos directos y otros quitaron durante unos minutos el deporte rey para ver a El Matador. A las 22:32 (hora peninsular española) llegó su momento con el inicio del combate. El hispanogeorgiano, de 27 años, prometió en la previa "volver a demostrar que era el mejor". Una vez más cumplió su palabra. Defendió con éxito el Campeonato de la UFC del peso pluma tras noquear en el tercer asalto a Max Holloway en el combate estelar del UFC 308.
CUMPLE LO PROMETIDO EN EL TERCER ASALTO CON UN KO! 🇪🇸🇬🇪 @Topuriailia 🔱 #UFC308 pic.twitter.com/p1ZLbDNMJL
— UFC Español (@UFCEspanol) October 26, 2024
El Matador se pasó la previa retando a Max Holloway. El hawaiano se negó por sistema a intercambiar golpes sin cuartel durante los diez primeros segundos de combate. El público neutral pensaba que no lo haría, pero Ilia hizo el gesto. Su rival hizo el pase de un torero para declinarlo. Ahí Topuria cambió al público. Le habían abucheado en la previa y comenzaron a corearle. Siempre cambia la visión de todos.
Una vez en lo deportivo, a Topuria le tocó arriesgar. Holloway estiraba bien sus brazos al golpear y eso hacía que Ilia estuviese fuera de distancia. El Matador empezó a medirse y buscó el hueco. Mediado casi el primer round demostró su inteligencia. Cuando el aspirante le esperaba con golpes, el campeón le amagó y entró con un derribo. Le agarró y lo proyectó de manera espectacular. Debía defender más cosas. Así pasó el primer round. Topuria se llevó golpes, pero acabó mandando en el suelo porque Holloway se resbaló en un cruce.
El segundo acto fue similar al primero. La igualdad fue la tónica. Quizá se fue para el hawaiano porque llegaba con bastante más volumen. Topuria no quería perseguirle pensando que la pelea se podía alargar. Por ello, se quedaba algo lejos y fallaba golpes. Holloway lo aprovechaba para ir impactando. Nunca estuvo en problemas, pero la sensación es que todo se complicaba. El Matador tomó cartas en el asunto en el tercero. Durante un minuto del segundo round llegó con dos acciones duras. Descubrió el camino.
En ese tercer asalto, Topuria salió con una marcha más. Empezó a cortar huecos y, en el centro de la jaula, cruzó una derecha recta que dañó a Holloway. "Noté que le había hecho daño y que retrocedía. Sabía que estaba tocado", admitió el hispanogeorgiano al acabar. Se fue con todo y Holloway, fiel a su estilo, aceptó el intercambio. No hubo color. Con un crochet Topuria logró noquear al hombre que siempre ha tenido una mandíbula de granito. Cumplió su palabra, una vez más.
"Podéis decir que es arrogante, prepotente, crecido... pero cada vez que se mete en el octágono demuestra lo mismo. Va a ser una fuerza imparable", avisó Dana White tras su triunfo en California en el mes de febrero. El Matador ha llegado para "liderar a la nueva generación". Quiere hacerlo y ha aprendido en estos meses que la UFC siempre gana. Le encantaría hacer su siguiente defensa en casa, pero Alexander Volkanovski se subió a la jaula y pueden llevarle a Australia (UFC 312, 8 de febrero). "Claro que sí, eres el siguiente", le dijo sobre la jaula Topuria. Quiere un legado en UFC y sabe que ese es el camino. La mesa de los top históricos del peso pluma en UFC (Aldo, Holloway y Volkanovski) tiene un nuevo integrante.