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10 años después, Argentina volverá a ser testigo de un duelo España e Italia con Marc Márquez como protagonista... y un discípulo de Valentino Rossi

En 2015 comenzó el principio de la rivalidad histórica entre Marc Márquez y Valentino Rossi.

Marc Márquez y Valentino Rossi en Argentina 2018. /MotoGP
Marc Márquez y Valentino Rossi en Argentina 2018. MotoGP
Raquel Jiménez

Raquel Jiménez

MotoGP vuelve a Argentina después de haberse tenido que salir del calendario de MotoGP en 2024 por temas políticos del país sudamericano. El mundial vuelve a pisar territorio argentino e inevitablemente parte de los recuerdos se trasladan a las grandes batallas que a lo largo de los años se han protagonizado en Termas de Rio Hondo. Una de ellas, y probablemente la más recordada, fue la que se vivió hace exactamente ahora diez años, que dio comienzo a la que posteriormente sería una de las rivalidades más fuertes de la categoría reina entre Marc Márquez y Valentino Rossi y que este año tendrá su símil nuevamente con el ilerdense y un discípulo de Il Dottore.

En esa ocasión, Marc Márquez llegaba a la temporada de 2015 después de haber cosechado sus dos primeros títulos de campeón del mundo y el italiano regresaba a la que había sido su casa después de un breve paso por Ducati. En el estreno de la temporada, Il Dottore se postuló como un claro candidato al título y el octacampeón quería plantarle cara. Después de un fin de semana de tira y afloja, ambos se encontraron en pista y un incidente -el primero de los que vendrían a lo largo del año-, acabó con Márquez en el suelo y Rossi ganando la carrera. Un escenario que posteriormente derivaría en una rivalidad que rozó el odio deportivo.

De hecho, apenas tres años después y tras lo ocurrido en el Gran Premio de Malasia de ese mismo año ambos volvieron a encontrarse en pista. En esa ocasión, el catalán acabó llevándose por delante a Valentino Rossi, que terminó por los suelos. Tras ese incidente, la relación entre los dos campeones nunca volvió a ser la misma e incluso a día de hoy su rivalidad sigue muy presente a pesar de que el italiano ya no forma parte de la parrilla de la categoría reina.

Una nueva batalla España e Italia

Ahora diez años después el escenario es similar y el recuerdo de aquella carrera sigue más que nunca presente. En esta ocasión, el ilerdense llega como líder del mundial después de completar un fin de semana perfecto en Tailandia y su rival principal vuelve a ser otro italiano, curiosamente uno de la academia de Valentino Rossi, Pecco Bagnaia. Ambos llegan en igualdad de condiciones, con las mismas armas pero la diferencia de ocho puntos en la clasificación general. Sobre el papel, el plan perfecto para volver a ver un duelo España e Italia por la victoria.

"Si estoy en Argentina es bueno, es que estamos enteros. Me salté tres años seguidos por lesiones y poder estar aquí significa que estamos bien. El circuito me gusta, he vivido de todo, carreras con mucha ventaja cono 2019 y otros que con ventaja que me he caído y he cometido errores estúpidos. Así que intentaremos gestionar todos esos puntos, más la euforia de la gente, la expectación, para estar calmado y seguir con la misma mentalidad que Tailandia", revelaba en su llegada al circuito de Termas de Rio Hondo.

La sombra de Valentino Rossi en el fin de semana argentino

Entonces, cuando Rossi consiguió la victoria en 2015, Il Dottore quiso subir a lo más alto del podio con una camiseta de la selección argentina con el nombre de Maradona, con quien en alguna ocasión pudo compartir algún momento en una de las visitas del astro argentino al paddock de MotoGP. Este jueves, en su llegada al circuito argentino, el de Cervera replicó este gesto portando la camiseta de la selección campeona del mundo, aunque en esta ocasión lo hacía con su nombre y su número de dorsal. "Hemos entrado con la camiseta de la selección, pero con mi nombre. Hay que tener valor para entrar con nombres históricos, yo no me atrevo", reconocía.

Este fin de semana Pecco Bagnaia tendrá el papel de antihéroe, el mismo que en su momento vivió su mentor. En esta ocasión, además, el italiano cuenta con el handicap de haber tenido un inicio de temporada insuficiente y llega con ganas de vendetta. "Sé que es un circuito en el que tengo que trabajar un poco más. El viernes trataré de adaptarme a la situación, porque he dado dos vueltas andando y las condiciones distan mucho de ser las mejores, pero en cualquier caso trataremos de mejorar y de aprender de lo que hice mal en Tailandia para ser competitivos desde la primera sesión. Yo no he corrido hoy por la pista, pero a mí no me ha parecido que estuviera bien. Caminando creo que era más claro ver que había mucho barro", advierte.

Los ingredientes están listos para una batalla que podría dejar el primer duelo de la temporada entre los dos compañeros de equipo. Una batalla entre España e italia, pasado y futuro que promete caer del lado del octacampeón.