NFL

Travis Kelce, una estrella más allá de Taylor Swift

Tras una temporada bajo el foco por su relación con Taylor Swift, Travis Kelce quiere conseguir su tercer anillo.

Travis Kelce en el Media Day de la Super Bowl LVIII./AFP
Travis Kelce en el Media Day de la Super Bowl LVIII. AFP
Javier de Ramón

Javier de Ramón

Actualmente mucha gente le conoce como la pareja de Taylor Swift, pero mucho antes de estar con la cantante, Travis ya era una estrella. Creció jugando al fútbol americano junto a su hermano mayor Jason, con el que actualmente tiene un podcast muy famoso en EE.UU. En el instituto, Travis practicó también béisbol y baloncesto. Además, comenzó como quarterback y haciendo muy buenos números en su año de sénior.

Gracias a un cambio de posición, pasó de quarterback a tight end, la posición donde años más tarde destacaría, aunque fue un cambio que le costó bastante. En su tercer año, después de una gran victoria el equipo lo celebró y al día siguiente les hicieron test antidrogas, en el que Travis dio positivo. Fue el peor momento de su carrera ya que le echaron del equipo. Ahí apareció la figura de Jason Kelce, el cual pidió al entrenador otra oportunidad para su hermano.

En 2012 se graduó y fue seleccionado por los Kansas City Chiefs. Andy Reid pidió una reunión con el hermano mayor, Jason, antes de seleccionar a Travis, dado que estos habían tenido relación como entrenador-jugador en Philadelphia Eagles, equipo con el que el mayor de los Kelce ganó una Super Bowl en 2018 a los Patriots de Brady. Empezó a mostrar destellos de su calidad, pero no fue hasta la temporada 18-19 donde despegó.

La llegada de Mahomes

Nuevo quarterback titular en la franquicia de Kansas, Patrick Mahomes se hacía con los mandos del ataque de los Chiefs y eso hizo que Travis empezase a explotar todas las virtudes que hasta ese momento no se conocían. Diez touchdowns en esa primera temporada con Mahomes para el tight end. Desde ese momento han forjado una pareja letal para todas las defensas de la NFL, emulando a la gran pareja de los Patriots, Brady-Gronkowski.

La mejor temporada del tight end fue el año pasado. 1.338 yardas para 12 touchdowns que culminó ganando la Super Bowl LVII en Arizona ante los Philadelphia Eagles. Está temporada ha sido la peor de los Chiefs desde que Patrick Mahomes es titular. También para Travis, que ha hecho menos de 1.000 yardas y tan solo cinco touchdowns. Con 34 años, se pensó que era normal ese bajón, pero al parecer se estaba cuidando para los playoffs. Ha sido el mejor jugador ofensivo de los Chiefs en esta postemporada con tres touchdowns.

¿El mejor tight end de la historia?

Es una de las preguntas que más se escuchan en la NFL. Las comparaciones no gustan a nadie, a menos que sean con Rob Gronkowski, el gran jugador de los Patriots y fiel escudero de Brady. Kelce ha ido mejorando año tras año y con ello rompiendo algunos récords. Tiene la marca más alta conseguida por un tight end, 1.416 yardas en una temporada.

Ha conseguido dos Super Bowls, 2020 y 2023, la última ante su hermano Jason. Siendo así la primera vez en la historia que dos hermanos juegan la Super Bowl. 4 veces en el mejor equipo de la temporada. Travis, junto a Patrick han conseguido romper la marca de más touchdowns en playoffs que tenían Brady y Gronkowski. También, tras el partido de la final de la AFC consiguió superar el récord de más recepciones en playoffs que hasta ese momento ostentaba Jerry Rice con 151. Kelce ya tiene 152.

Su peor año

Kelce entró en el ojo del huracán, tras oficializar su relación con la cantante Taylor Swift. Kelce no ha podido estar tranquilo en ningún momento de la temporada. Una temporada en la que por momentos se le ha visto dando su peor imagen. Hasta se llegó a pensar que la no presencia de la "reina" del pop en los partidos le hacían jugar peor.

Taylor Swift en el palco de los Chiefs. Reuters
Taylor Swift en el palco de los Chiefs. Reuters

Pero en cuanto pisó los playoffs, Kelce volvió a ser el jugador que había maravillado a toda la liga. Su camiseta es la más vendida de toda la NFL, un efecto de los "Swifties". A sus 34 años, vuelve a otra Super Bowl con las ganas de hacer historia y conseguir el tercer Vince Lombardi de su carrera, lo quiere más que nunca, así lo dijo en el podcast que tiene con su hermano Jason. Tendrá a toda su familia apoyándolo y como no, a su pareja, Taylor Swift, que llegará desde Tokyo.