PREMIER PADEL FINALS

Ale Galán y Fede Chingotto acaban el año de madrugada y entre calambres: "Vamos a mostrar un poquito de hambre"

Momo y Edu Alonso protagonizaron una de las campanadas del año para apear a los número dos en los cuartos de final del Premier Padel Finals.

Solo tres parejas han conseguido ganar a Chingotto y Galán esta temporada. /Silvestre Szpylma / Premier Padel
Solo tres parejas han conseguido ganar a Chingotto y Galán esta temporada. Silvestre Szpylma / Premier Padel
Joaquín Serna

Joaquín Serna

La extraordinaria temporada de Chingalán llegó a su fin mucho antes de lo esperado en el torneo más importante del año. Por primera vez este curso, la pareja hispanoargentina cayó eliminada antes de la ronda de semifinales. Eso sí, de forma merecida, ya que Momo y Edu Alonso mostraron un nivel excelso sobre el 20x10 para dar la campanada tras una batalla de tres sets (6-4, 4-6 y 6-4).

Los de Gaby Reca tuvieron que remar durante más de dos horas y media para derrotar a una dupla que demostró que es muy difícil superarles, incluso en uno de sus peores días. "Estamos jugando sin intención, pensando que la pelota va a ir fuera", decía Jorge Martínez en el banquillo mientras miraba a Galán. Y es que el jugador madrileño llegó a cometer hasta once errores no forzados y los dos breaks de sus rivales en el primer set llegaron a través de su saque.

El mal trago no cesó en la segunda manga y tampoco cambió el discurso cuando Momo y Edu Alonso se pusieron 4-3 arriba con saque a favor. "El partido está jodido, están jugando bien y estamos cometiendo errores, vamos a meterle piernas" decía Martínez. Chingotto era más directo con su compañero: "Necesitamos alegría, para mí eres el mejor Ale, sé que los recontracagás a palos", afirmaba el argentino, consciente de que las opciones de llevarse la eliminatoria pasaban por el revés. Dicho y hecho, la reacción de Galán llegó para pasar de los nueve winners a los catorce y disminuir notablemente los errores no forzados para llevarse la segunda manga por 6-4.

Sin embargo, la película no iba a tener el guion de la remontada que muchos esperaban. Y es que Momo y Alonso sumaron dos breaks consecutivos tras el cuarto juego que demostraron que su presencia en el Torneo de Maestros no era ninguna casualidad, aunque terminasen el partido sufriendo de lo lindo.

"Vamos a ser competitivos, a tener un poquito de hambre. Solo hay que correr en los momentos importantes, vamos a tener actitud macho, que tengan que hacernos más daño para ganar puntos", se escuchaba en el banquillo de los número dos, que rozaron la remontada. Con estas premisas, consiguieron tener dos bolas de break con 5-4 en contra para empatar el partido, pero el acierto de los de Gaby Reca y los calambres de un Galán al que se le percibió muy incómodo en los puntos finales tuvieron como desenlace la primera gran sorpresa del Premier Padel Finals.

Una eliminación que no empaña un año excelso

A pesar de caer antes de lo esperado en Barcelona, lo cierto es que la temporada de Chingotto y Galán ha rozado el sobresaliente. Han disputado 14 de 18 finales posibles y hasta esta madrugada siempre habían pisado como mínimo las semifinales, convirtiéndose en una alternativa muy seria para el número uno.

La dupla hispanoargentina ha sido la única capaz de seguirle el ritmo a Agustín Tapia y Arturo Coello, llegando a ganarles cinco de las 16 finales que han disputado ante ellos. De hecho, por momentos demostraron tenerles tomado el pulso a los Golden Boys, algo que se vio reflejado en el doble 6-1 que les endosaron en Génova en junio para levantar el título.

Sin embargo, todo cambió a raíz de ese torneo, ya que tras aquel resultado no pudieron volver a doblegarles, algo que según dijo Galán en Cadena Serse debió al trabajo que hicieron los números uno durante el verano: "Tapia y Coello hicieron una gran pretemporada mientras nosotros aprovechamos para descansar. Creíamos que era lo adecuado porque Chingotto nunca había tenido tanta carga de finales en años anteriores. Sin embargo, creo que lo enfocaremos de otra manera el año que viene porque ellos lograron cambiar esa dinámica a través del trabajo que hicieron esas semanas".

Para el madrileño, que ha sido la criptonita de los número uno esta temporada tras derrotarlos en seis ocasiones (una junto a Juan Lebrón y cinco con Chingotto), la clave para luchar por la corona mundial en 2025 estará precisamente en la pretemporada: "Necesitamos esa base de entrenamiento, este año prácticamente solo se ha basado en competir con Chingotto. En cuanto hagamos unos ajustes podemos ser más competitivos".

Estas declaraciones cobran más sentido que nunca tras la derrota en Barcelona, especialmente tras unas últimas semanas de competición en las que se ha visto la versión menos agresiva de la pareja, que ha terminado el año sufriendo a nivel físico tras un calendario plagado de torneos. Ahora, queda ver si las palabras se convierten en hechos el próximo curso, donde habrá nuevas parejas que también buscarán sentarse a comer en la mesa de Tapia y Coello.