Juan Lebrón y Ale Galán empiezan con sonrisa su nueva vida tras el divorcio más sonado del pádel

La pareja formada por Juan Lebrón y Ale Galán ya es historia. Lo era antes en sentido figurado por ser uno de los mejores dúos del circuito y ahora lo es en sentido literal, después de que los dos jugadores hayan comenzado sus respectivos caminos por separado tras una ruptura que provocó un auténtico terremoto.

Su 'divorcio' ha marcado la actualidad del mundo del pádel después de que el jugador madrileño anunciara su intención de separarse de su compañero tras la polémica desatada por Lebrón ante Yanguas y Garrido en Catar. Una discusión entre El Lobo y sus rivales que colmó el vaso de la paciencia de quien había sido su compañero durante los últimos cuatro años.

Cuatro temporadas en las que Lebrón y Galán habían dominado el pádel mundial, pero en las que el carácter del jugador gaditano marcó el paso. Enfados, broncas, peleas y malas caras con su compañero son comportamientos que han tenido mucho peso para que Ale Galán se atreviese a tomar la decisión.

El madrileño, tal y como adelantó Relevo, eligió a Fede Chingotto como nuevo compañero de batallas. Y su aventura juntos ha comenzado con buen pie. En Venezuela, en la cuarta prueba del Premier Padel, la pareja hispano argentina resolvía con solvencia su primer partido juntos venciendo por 6-3 6-0 a Javier Valdés y Rafa Méndez. Los nº3 del torneo se enfrentarán en los octavos de final a Enrique Goenaga y Teo Zapata, que vencían en tres sets, 6-2 6-7 6-4, al dúo que llega de la previa formado por Fran Ramírez y Thomas Leygue.

Por su parte Juan Lebrón tendrá que esperar para jugar con la que va a ser su nueva pareja, Paquito Navarro. En Venezuela lo hace con un compañero de circunstancias como es Momo González, con el que también ha comenzado su nueva vida sin Galán con una victoria. Los andaluces se impusieron a Marc Quílez y Toni Bueno con un ajustado 7-5 y 6-4 en casi hora y media de juego.

La ciudad de Puerto Cabello, a 200 km al oeste de Caracas, acoge la primera prueba de categoría P2 de la historia de la competición. Esta prueba tiene numerosos incentivos deportivos como el estreno de dos nuevas parejas que van a dar mucho que hablar en los próximos meses y el adiós de otras que será el último torneo que jueguen juntos. Podríamos afirmar que se trata de una prueba de transición en medio del efecto dominó de cambios de pareja que supuso la ruptura de Lebrón y Galán.