La lluvia siembra el pánico: "El agua nos cubría hasta el cuello, teníamos que mantener el coche encendido"

Ha'il.- Y al tercer día se abrieron los cielos. La etapa 3 del Rally Dakar 2023 quedará grabada a fuego en la mente y las vivencias de muchos de los participantes. En unas condiciones dantescas en las que la lluvia ha llegado a llenar el cauce de lechos de ríos habitualmente secos donde solo fluye la arena y el viento, los pilotos y copilotos han sido protagonistas de una de esas jornadas que ponen a prueba mente y cuerpo.

El caso más brutal, por las imágenes que ha publicado la organización del rally, y por los nombres que lo han vivido ha sido el de Chaleco López, hasta hoy líder de la general de T3, y su compañera de equipo Cristina Gutiérrez, que se han visto atrapados en mitad de uno de esos cauces de río.

En el kilómetro 258, de los 447 cronometrados que componían la jornada, ambos pilotos del equipo Red Bull Can-Am han visto cómo sus prototipos ligeros quedaban atrapados en el agua. Con la ayuda de sus copilotos y de dos camiones que han llegado al lugar de los hechos, han intentado rescatarlo a través de eslingas y jugándose el tipo. De hecho, Pablo Moreno, copiloto de la española, ha tropezado en mitad del torrente de agua y a punto ha estado de ser arrastrado por la corriente.

Después de la pesadilla sufrida, han logrado llegar hasta el segundo punto de neutralización, en el km 334, pero con más de 1h10 de retraso respecto a sus rivales. De hecho, la organización ha adelantado a las 17.20 hora local (15.20 en España), la neutralización de la etapa al km 240, antes del río desbordado. Desde ahí, los pilotos que aún siguiesen en la especial, tendrán que salir a la carretera más cercana para volver al campamento y completar 227 km bajo la lluvia.

"Ha sido una locura y muy peligrosa. Hemos tenido la mala suerte de cruzar en el peor momento, porque éramos los primeros coches en llegar ahí con esa situación. En el roadbook marcaba un paso sin agua y cuando hemos pasado nosotros, veníamos muy pegados Chaleco y yo y nos hemos quedado en un río muy arenoso, donde el agua cubría a mitad de rueda. Pero en cuestión de tres minutos ha subido de manera brusca hasta cubrirnos hasta el cuello y en el caso de Chaleco, le ha cubierto el coche entero. No podía salirme del coche porque teníamos que mantener el motor encendido y demás para que no entrara agua. Quiero dar las gracias a los camiones que han parado, porque eran los que se juegan la victoria, y han demostrado una gran solidaridad", comentó Gutiérrez en el vivac cubierta de barro.

"Después ya han empezado los problemas electrónicos que han provocado que se nos parar el coche y que no nos funcionaran los limpiaparabrisas con todo el barro y la lluvia que estaba cayendo. Yo no veía absolutamente nada. Espero que la organización tenga en cuenta todo lo que ha pasado, aunque es verdad que las situaciones han cambiado de un momento a otro y ha sido muy peligroso y no es agradable de vivir en ninguno de los casos".

Su copiloto, Pablo Moreno Huete, añade a Relevo: "Estamos jodidos. Cuando hemos llegado había agua, pero justo había un Way Point ahí y había que pasar sí o sí. Chaleco ya estaba atascado y en cuestión de minutos se ha puesto el río a crecer. Los camiones han visto que era peligroso y han parado todos para ayudarnos porque tenían que sacarnos de ahí como fuese. Ni un coche nos habría podido sacar de ahí. Nos ha costado mucho porque la eslinga se ha roto en el primer intento y luego el camión se ha quedado enganchado. El agua nos llevaba por momentos. A ver qué pasa ahora con los tiempos".

Por su parte, Chaleco López añadió: "Un día muy, muy duro y muy complejo. Tuvimos un problema eléctrico al principio veníamos empujando fuerte pero lamentablemente había un rio que creció muchísimo. Pasó todo el agua por arriba del auto, lo bueno es que no lo perdimos porque en un momento estuvo a punto y eso sí que no habría tenido vuelta. Estamos con mucho frío pero lo bueno es que las ganas las tenemos aún como el primer día".

Las motos, sobre todo las que no rodaban en el grupo de cabeza, también han sufrido las condiciones climatológicas, para las que muchos de ellos no habían salido preparados esta mañana. No obstante, no se han encontrado todo lo que vendría después por su llegada más temprana a la neutralización del km 334. Pero Javi Vega, participante español en Original by Motul (sin asistencia), cuenta así su experiencia a Relevo: "Mis botas han acabado llenas de agua hasta arriba. Nos han parado porque no podían volar los helicópteros por tormenta y nos hemos enchufado 200 y pico kilómetros por carretera diluviando a muerte. Por momentos ni se veía delante de la moto e íbamos congelados de frío. Yo iba sin chubasquero, sin mangas, con los guantes finos... puta locura".

Por su parte, Gerard Farrés y Diego Ortega, sextos en la jornada de este martes en los T4 y en la misma posición en la general, también vivieron su propia aventura. Esta con final feliz. "Ha sido un día complicado hoy, hemos cometido algún error, hemos pinchado, pero luego ha empezado a llover y a nosotros nos gusta el agua. Hemos disfrutado, hemos dado gas y recuperando, recuperando, hasta llegar al río donde había mucha, mucha agua donde había algunos coches enganchados. Hemos buscado algún paso adelante como 800 metros más abajo y hemos visto que podíamos cruzar. Ke hemos metido gas a fondo, hemos cruzado y hemos tenido la suerte de pasar. A veces la suerte cuenta y hoy era uno de esos días. Contentos de sobrevivir. Esto acaba de empezar y ya ha dejado a muchos pilotos fuera y contento de estar en buenas posiciones", comentó.

Esta es la película especial más allá de la clasificación general de coches y motos, más allá de los grandes nombres de la carrera. El Dakar también son días así.