Carlos Sainz vuelve a pilotar tras el Rally Dakar y olvida sus molestias en la espalda: "Está como un toro"
El madrileño completó un test con Past Racing un mes después de su eliminación.
Hace un mes y un día Carlos Sainz estaba en la lona. "Me quedo muy decepcionado, una de las grandes decepciones de mi carrera", reconoció con dolor, frustración y pena nada más caer eliminado del Rally Dakar tras haber disputado apenas dos etapas. "Hoy lo que pienso es en que todo el trabajo de un año ha servido de poco, hoy es un día duro", añadió después de que la Federación Internacional no considerara su coche apto tras su accidente.
El vigente campeón había perdido su corona, estaba roto mentalmente y arrastraba molestias en la espalda, tal y como reconoció a los medios presentes en Arabia Saudí, donde estuvo Relevo. 31 después, Sainz está como nuevo. "Como un toro", aseguran a este medio desde su entorno. La renovación, física y mental, ha sido total. Cierto es que el plano físico nunca ha sido un problema para el madrileño pues, con 62 años, sigue arrasando en los exámenes a los que se somete.
Más de cuatro semanas después de bajarse de ese Ford Raptor que apenas pudo probar, el madrileño ha vuelto a subirse a un coche de rallies. Lo ha hecho en un test con el equipo Past Racing junto a la joven promesa de 17 años Gil Membrado. A pesar de no haber exprimido el coche al máximo al tratarse de unas prácticas, las sensaciones han sido buenas y el tetracampeón del Dakar completó el primer kilometraje de 2025.
Pasó un tramo de copiloto, posición menos habitual para él pues las notas las suele cantar desde el asiento derecho su fiel Lucas Cruz, y otro al volante. Dió consejos a Membrado e intercambió impresiones con ingenieros y resto de personal presente en los tests. Todo en un ambiente distendido donde cogió las primeras sensaciones de este año tras el varapalo del Dakar.
Habrá que esperar, eso sí, para verle subido de nuevo al Ford Raptor. Más allá del ritmo sobre las piedras, la mejor noticia para el madrileño es el estado de su espalda. Como él mismo afirmó nada más volver a España tras el día de Reyes, las pruebas médicas realizadas fueron satisfactorias. Así lo reconoció en su Instagram.
No todo son malas noticias. Nada más llegar a Madrid he realizado un chequeo completo por las molestias en la espalda y ya han podido confirmarme que no tengo ninguna lesión. Estos días volveré a mi rutina de entrenamiento.
Atrás queda su accidente del 5 de enero tras chocar de morro cuando trataba de atravesar una duna cortada. Ni conduciendo a 20 kilómetros por hora, como él mismo explicó, pudo superar con éxito aquella montaña de arena. El test completado es el primer paso para buscar su quinto Dakar.