RUGBY

"Una paliza, una vergüenza, una desgracia": Inglaterra vive sus días más oscuros a seis meses del Mundial

El XV de la Rosa sufrió este fin de semana una humillante derrota ante Francia en el VI Naciones y las críticas son feroces.

Afición inglesa abandonando Twickenham antes del pitido final./GLYN KIRK / AFP
Afición inglesa abandonando Twickenham antes del pitido final. GLYN KIRK / AFP
Rodrigo Contreras

Rodrigo Contreras

La victoria francesa en campo inglés del sábado por 10-53 pasará sin ninguna duda a los libros de historia del torneo y del deporte oval. Si hay una palabra en la que coinciden todas las crónicas para definir lo que pasó en Twickenham, ésa es humillación.

Los franceses llegaban a la penúltima jornada del Seis Naciones con muchas opciones de volver a ganar en un campo que se le resistía desde hace dieciocho años, y así fue. Pero lo que muy pocos presagiaron es que esa victoria se convertiría en la mayor derrota de los ingleses en casa y en la tercera más abultada de la historia del XV de la Rosa.

Hasta en siete ocasiones posaron los franceses el oval en la zona de marca inglesa para firmar el resultado final de 10-53 en Le Crunch (el 'clásico' del rugby en el hemisferio norte durante el Seis Naciones). Una derrota histórica que activa todas las alarmas de peligro en el país donde se inventó el rugby. Inglaterra, la única selección europea campeona del mundo, tiembla a seis meses de la cita mundialista, que además se disputará en casa de su histórico gran rival norteño, Francia.

Protagonistas y sus reacciones

A la conclusión del partido, el entrenador francés Fabien Galthié no pudo evitar la emoción ante las cámaras y se refería así a la gran victoria de su equipo: "Este lugar, el contexto... No es el azar, hace cuatro años que trabajamos con los jugadores... Es verdad que en el inicio del torneo no estábamos satisfechos y hoy queríamos hacer algo especial… Tenemos mucha alegría, placer y emoción. Las elecciones tácticas que hicimos funcionaron bien y pusimos en gran dificultad a Inglaterra. Todavía no hemos dejado caer el trofeo, nuestro objetivo sigue siendo ganar la competición. Después vendrá el Mundial, que lo tenemos en la mira desde hace cuatro años. Somos un equipo joven pero estamos progresando".

Por su lado, Steve Borthwick, entrenador inglés, plasmaba así el desencanto tras la derrota histórica: "Estamos muy decepcionados con esta actuación, nos duele, jugamos de manera deplorable. Tenemos mucho trabajo por hacer antes de ir a Irlanda el próximo fin de semana. Vamos a redoblar el esfuerzo e intentaremos arreglar esto antes de la Copa del Mundo".

Muchos otros protagonistas han hablado después de lo vivido en la jornada 4 del torneo. Uno de los testimonios más duros ha sido el de Sir Clive Woodward, el entrenador de la Inglaterra campeona del mundo en 2003, apuntando directamente en su columna en The Daily Mail al entrenador saliente Eddie Jones.

"Sería fácil echarle la culpa a Steve Borthwick. Pero esta humillación de Francia no es culpa del nuevo entrenador de Inglaterra… El resultado simplemente muestra que el régimen de Eddie Jones llevó al rugby inglés a grandes problemas en los últimos tres años, con algunas victorias únicas cubriendo las grietas", explicó Woodward. "Lo único bueno del resultado del sábado es que le mostró a Inglaterra el nivel al que debe llegar si quiere tener alguna esperanza de tener éxito y ganar una Copa del Mundo… Borthwick ahora necesitará aprender y actuar rápidamente… Tanto Irlanda como Francia tienen un juego de ataque brillante del que Inglaterra está a kilómetros de distancia en este momento".

Los medios británicos

La prensa inglesa, especialista en sacar el cuchillo en este tipo de situaciones, no se ha quedado atrás y The Telegraph apuntaba: "El día más oscuro para Inglaterra en Twickenham fue muchas cosas: una paliza, una vergüenza, una desgracia…".

Por su lado, The Sun en un artículo titulado Sacre Bleus decía: "Fue desagradable de principio a fin… Francia había estado esperando dieciocho años por una victoria en Twickenham como parte de las Seis Naciones, pero sus jugadores nunca podrían haber imaginado que sería tan fácil ni tan grande, ya que se ensayaron hasta siete veces".

"La guillotina cayó de manera brutal y definitiva. Inglaterra ha tenido algunos días difíciles a lo largo de los años, pero nada como ese récord que ha dejado Francia", apuntaba The Guardian. Y la ESPN bromeaba: "¿Le Crunch? La humillación a Inglaterra de Francia fue ¡The Crumble!".

"¿Quién sabe qué vas a hacer de ahora en adelante?", se preguntaba The Independent. "La respuesta literal es viajar a Dublín para enfrentar la fuerza imparable del equipo número uno del mundo, dentro de siete días, pero se están acercando preguntas filosóficas mucho más importantes y es difícil de creer".