TENIS

Djokovic vive un día negro en Montecarlo: "La sensación es terrible"

El serbio se despide del Masters 1000 de Montecarlo en octavos de final ante Musetti. Pierde una oportunidad de oro para distanciarse de Alcaraz en el ranking.

Djokovic se lamenta durante su partido ante Musetti en Montecarlo. /ERIC GAILLARD/REUTERS
Djokovic se lamenta durante su partido ante Musetti en Montecarlo. ERIC GAILLARD/REUTERS
Nacho Encabo

Nacho Encabo

Ocho breaks en contra. 46 errores no forzados. Molestias en el codo. Una raqueta rota. Un enfado mayúsculo. Para colmo, el público de la ciudad en la que resides, en contra. Novak Djokovic ha sufrido este jueves una dolorosa derrota en los octavos de final de Montecarlo.

Arranca el serbio la gira de tierra con el pie torcido, cayendo por 4-6, 7-5 y 6-4 ante el italiano Lorenzo Musetti en casi tres horas de batalla en la pista central de Montecarlo. Djokovic llevaba un mes sin competir y se va del Principado con una única victoria ante el 198 del mundo, un saco de dudas y unas molestias en el codo que habrá que ver cómo evolucionan.

Resumen del Djokovic-MusettiATP Portal

En su debut en el torneo jugó sin ningún impedimento físico, pero este jueves ante Musetti rebajó más de diez kilómetros por hora sus servicios y no se encontró cómodo con la derecha en ningún momento. Algo le pasa en el codo derecho, una articulación que ya le ha dado algún quebradero de cabeza en el pasado.

Pese a ello, el número uno del ranking llegó a estar 6-4 y 4-2, pero se enredó y dejó escapar la ventaja. En el final del segundo set cometió varias dobles faltas, acabó discutiendo con la jueza de silla y fue silbado por el público de la pista tras reventar una raqueta con el pie. Desde luego, no fue el día del serbio, que tenía además una oportunidad de oro para abrir hueco en el ranking respecto a Carlos Alcaraz, ausente en Montecarlo por lesión.

"La sensación después de jugar así es terrible", ha señalado después en la rueda de prensa, donde se le ha visto tremendamente enfadado. El serbio acostumbra a dar respuestas largas y elaboradas, pero estaba tan cabreado que ha despachado a los periodistas en un minuto y medio. "No quiero decir nada, estoy bien", ha respondido cuando le han preguntado por el codo. "No ha sido un buen día, no tengo ganas de hablar".

Djokovic tiene previsto jugar la próxima semana el ATP 250 de Banja Luka en Bosnia y después el Mutua Madrid Open y el torneo de Roma para ultimar su puesta a punto de cara a Roland Garros, donde intentará destronar a Rafael Nadal y alzar su 23º Grand Slam. Pero de momento ha tenido una salida en falso sobre la tierra batida. Y eso que partía desde la pole position.