La broma de Serena Williams que hizo saltar las alarmas: "No estoy retirada"

El pasado 2 de septiembre el mundo del deporte hacía un alto en el camino. Ese día Serena Williams, una de las mejores deportistas de la historia y un icono dentro del mundo del tenis femenino, perdía ante Ajla Tomljanovic en la tercera ronda del US Open y ponía punto y final a una carrera sin parangón en el circuito. Su imagen entre lágrimas, en el centro de la Arthur Ashe, dio la vuelta al mundo y ponía el broche de oro a su vida como tenista profesional.

Poco más de un mes después de aquella imagen la propia tenista californiana ha sido protagonista en un foro en San Francisco en el que ha bromeado con la posibilidad de dar marcha atrás en su decisión de colgar la raqueta. "No estoy retirada", aseguró en una charla para promocionar Serena Ventures, su compañía de inversión.

La audiencia que se dio cita en la ciudad californiana no se podía creer las palabras de la ganadora de 23 torneos del Grand Slam. Sin embargo, fue la propia Serena quien instantes más tarde dejaba todo en una broma: "Las posibilidades de volver a verme jugar son muy altas. Puedes venir a mi casa, allí tengo una pista".

 

Tras su primera broma, Serena aseguró que todavía le cuesta asimilar que ya no es una jugadora en activo: "Me levanté el otro día, me acerqué a la cancha que tengo en casa y por primera vez en mi vida fui consciente de que no jugaba por competir. Y fue realmente extraño. Fue como el primer día del resto de mi vida y lo estoy disfrutando, pero todavía tengo que encontrar ese equilibrio".

Williams, que en su último partido dio una lección de pundonor y levantó hasta cinco bolas de partido antes de claudicar ante la tenista australiana, cerró su carrera con un palmarés de ensueño en el que además de sus 23 trofeos de los cuatro grandes sumó otros 50 títulos del circuito WTA, donde ganó 855 partidos y que se embolsó más de 94 millones de dólares sólo en premios.