COPA DAVIS

El sueño olímpico de Carlos Alcaraz queda en una encrucijada tras el desastre de España

El murciano todavía no cumple con los requisitos para participar en París 2024 y es posible que necesite una invitación especial.

Carlos Alcaraz, compitiendo por España en la Copa Davis en la fase de grupos de 2022. /AFP
Carlos Alcaraz, compitiendo por España en la Copa Davis en la fase de grupos de 2022. AFP
Nacho Encabo

Nacho Encabo

El gran ausente en la fase de grupos de la Copa Davis en Valencia puede ser también el mayor perjudicado del descalabro del equipo español. La eliminación del conjunto capitaneado por David Ferrer en la fase de grupos de Valencia ha colocado a Carlos Alcaraz en una encrucijada de cara a los Juegos Olímpicos de París 2024.

El actual número dos del ranking mundial no cumple todavía con los requisitos de la Federación Internacional de Tenis (ITF) para poder competir sobre la tierra batida de París 2024 y sólo le quedan dos balas en la recámara para conseguir el billete olímpico: jugar una serie de Copa Davis en la semana posterior al Abierto de Australia 2024 -una eliminatoria que podría ser en España, pero también en Taiwán o Kazajistán- o bien recibir una invitación especial por parte del Comité Olímpico de la ITF.

El asunto es un poco lioso. Primero, por el sistema de clasificación para los Juegos Olímpicos. Y segundo, porque España podría recibir una invitación para la fase de grupos de la Davis 2024 que le libraría de jugar la serie de febrero. En ese caso, que es el mejor escenario para España, a Carlitos ya sólo le quedaría la vía de conseguir la invitación.

La renuncia de Alcaraz

Vamos por partes. Carlos Alcaraz fue convocado por David Ferrer para disputar la fase de grupos en Valencia, pero anunció su baja a última hora alegando el cansancio acumulado durante la gira americana. "Necesito parar y descansar, física y mentalmente. El calendario es muy exigente, todavía queda mucha temporada y ahora me toca recargar fuerzas", señaló tras caer en las semifinales del US Open el murciano de 20 años, para el que los de París 2024 serían sus primeros Juegos.

Huérfana de su mejor tenista, España cayó con estrépito ante República Checa (3-0) y Serbia (3-0) y llegó a la última serie ante Corea del Sur ya eliminada y sin opciones de clasificarse a las finales de Málaga, que se celebrarán del 21 al 26 de noviembre.

Sin poder pelear por el título, España ya no volverá a competir hasta el año que viene. La siguiente cita del calendario será el fin de semana del 2, 3 y 4 de febrero, cuando se disputarán las eliminatorias. Será justo unos días después de la final del Open de Australia (28 de enero) y los posibles rivales de España son: Argentina, Alemania, Kazajistán, Ucrania, Israel, Brasil, Bélgica, Taiwán, Hungría, Eslovaquia, Perú y Portugal. Los duelos contra Kazajistán, Ucrania e Israel serían fuera de casa, mientras que si toca Taiwán o Portugal se sortearía la sede. En el resto de casos, España sería local.

La normativa de los Juegos Olímpicos

El caso es que, según la normativa de la ITF, para que un tenista pueda acudir a los Juegos Olímpicos de París 2024 tiene que haber formado parte del equipo nacional al menos en dos ocasiones durante el ciclo olímpico y que una de esas dos convocatorias haya sido en 2023 o 2024. Alcaraz ha sido convocado en dos ocasiones durante el actual ciclo olímpico, pero ambas fueron en 2022, así que para cumplir ese requisito tiene que jugar una serie más antes de los Juegos. Y la única posibilidad es la citada serie de febrero.

El problema ahí es que España podría no jugar esa eliminatoria de febrero. La organización de la Copa Davis tiene dos invitaciones para que dos países se salten esa serie y acudan directamente a la fase de grupos de septiembre. Y como una de las sedes de la fase de grupos es Valencia, es lógico pensar que los organizadores quieren al país anfitrión jugando ante su público. No tendría ningún sentido un grupo en Valencia sin las raquetas españolas.

El equipo español, durante la Copa Davis en Valencia.  Óscar J. Barroso/AFP
El equipo español, durante la Copa Davis en Valencia. Óscar J. Barroso/AFP

La apelación de la Federación Española

¿Qué pasaría entonces con Carlitos? ¿Se quedaría sin Juegos? No, ni mucho menos: ahí activaría la última palanca, una que le permitiría conseguir el billete sin haber representado a España en 2023 y 2024. En ese caso, necesitaría que la Federación Española escribiera una carta de apelación al Comité Olímpico de la ITF pidiendo que le permitan jugar.

"Eso se suele hacer en casos en los que el tenista no ha podido representar a España", dicen desde la RFT. "Ya ocurrió, por ejemplo, con Paula Badosa y Roberto Carballés en los Juegos de Tokio". Efectivamente, Badosa y Carballés acudieron a los últimos Juegos sin haber representado antes a España en categoría absoluta.

Hay una ligera diferencia entre los casos de Badosa y Carballés y el de Alcaraz, ya que el murciano no ha competido en la fase de grupos de Valencia por decisión propia, mientras que sus compatriotas no renunciaron a una serie una vez convocados. Sin embargo, no tendría ningún sentido que la Federación no pidiera esa exención para su mejor tenista de la actualidad.

Ya tampoco tendría lógica alguna que el Comité Olímpico de la Davis no aprobara esa invitación especial. ¿A quién le interesa que uno de los mejores tenistas del mundo no esté en unos Juegos? Organizativamente a nadie, por lo que cuesta imaginarse ahora mismo unos Juegos Olímpicos sin Carlos Alcaraz.