TENIS

El día que Federer estuvo en la pista central de Wimbledon y no sintió ganas de jugar: "Me siento contento viendo, disfrutando el juego"

La estrella de tenis habló sobre su retirada en una presentación de su nueva colección de ropa.

Roger Federer viendo la final de Wimbledon. /EFE
Roger Federer viendo la final de Wimbledon. EFE
Nagore Domínguez

Nagore Domínguez

El año pasado Roger Federer salió a la pista central de Wimbledon para celebrar el 100º aniversario. "Fue un momento precioso, pero doloroso", confesó en The New York Times durante la presentación de su nueva línea de ropa. En su cabeza rondaba la duda de si volvería a pisar la hierba para disputar un partido, o daría un paso al lado. Pero este año, fue "totalmente diferente" cuando estaba en la grada viendo a Andy Murray, confesó. Su padre, quien acompañaba al tenista en las gradas del estadio, le susurró: "¿No te gustaría estar jugando en vez de sentarte y mirar?". A lo que él respondió con total sinceridad: "No. Me siento contento viendo y disfrutando del partido".

Desde que dejó de competir, Federer no sabía como sería su vida sin jugar a tenis, sin los seguidores y renunciando al calendario que había dominado sus últimos 25 años: "Ha sido algo que no sabía como me tomaría. Durante mucho tiempo traté de regresar y darle una oportunidad más y dejar el juego de una forma saludable, pero no fue factible", explicó en el medio estadounidense.

"Lo bueno y malo del Covid, y con mi operación de rodilla, es que todo comenzó a ralentizarse en los últimos tres años, así que no era como si viniera de jugar 100 partidos y luego boom, se acabó", contó.

Su final, aunque no fuera el esperado, terminó "de la manera más perfecta" en la Copa Laver. "Al final me sentí aliviado, creo, y feliz de jubilarme". En la copa, estaba rodeado de sus mayores rivales -Rafa Nadal y Djokovic- y en la grada contaba con el apoyo de su familia y sus amigos. "Para mí fue como 'vale, estoy bien ahora, no necesito perseguir ese hormigueo".

Ahora Roger Federer tiene que acostumbrarse a ver los partidos desde el palco, rodeado de personalidades de la talla de la Princesa Catalina, quien es amante del tenis: "La conozco bastante bien. Es una ávida fanática del tenis y juega sola. A veces tenemos que tener cuidado de no hablar demasiado. Puedes hablar, luego es súper silencioso y después, tienes que aplaudir".