TENIS

Fue número 4 del mundo, ganó a Arantxa Sánchez Vicario o Monica Seles... pero convivió con un 'monstruo': "No había un centímetro de mi piel que no estuviera magullado"

Jelena Dokic relata el calvario que vivió por culpa de su padre y las "consecuencias" que tenía si perdía.

Jelena Dokic en un partido frente a Justine Henin./Efe
Jelena Dokic en un partido frente a Justine Henin. Efe
Guillermo García

Guillermo García

Jelena Dokic llegó a ser número 4 del mundo, ganó seis títulos de la WTA tras vencer a tenistas de la talla de Arantxa Sánchez Vicario, Monica Seles o Amelie Mauresmo y apuntaba a ser una de las grandes de la raqueta. Sin embargo, su estrella se apagó con la misma rapidez que se había iluminado. Y todo por culpa de su padre.

La tenista australiana, aunque nacida en Croacia, estaba considerada una niña prodigio del tenis. Un talento precoz que siempre iba acompañada por su padre, que hacía las veces de progenitor, pero también de entrenador. Una dualidad que escondía un infierno para la tenista, que ahora ha vuelto a revivir con la publicación del documental autobiográfico 'Unbreakable', donde la extenista comparte la profundidad de los traumas que marcaron su vida, tanto dentro como fuera de las canchas de tenis.

Dokic ha decidido relatar el calvario que le tocó vivir por culpa de su padre, Damir, por los abusos sufridos durante su etapa como jugadora. Una etapa, su vida profesional, que se convirtió en una película de terror, como ella misma confiesa en un adelanto del documental que se estrenará el 7 de noviembre en su país.

"Tenía 16 años, estaba jugando contra la número 1 Martina Hingis y sabía que, si perdía, las consecuencias serían catastróficas"

Jelena Dokic

"Tenía 16 años, estaba jugando contra la número 1 Martina Hingis y sabía que, si perdía, las consecuencias serían catastróficas", confesó en el documental, mientras observaba videos de sus partidos. Continuó diciendo: "Un día después de perder supe lo que iba a pasar. Empecé a sentirme realmente destrozada por dentro. No había ni un centímetro de piel que no estuviera lastimado".

Dokic llegó a las semifinales de Wimbledon y del US Open en 2000 con sólo 17 años y alcanzó el puesto número 4 del mundo dos años después. Era una de las grandes promesas del tenis, como demostró con sus resultados sobre la pista durante esos primeros años. Sin embargo, esas victorias tenían un lado muy oscuro detrás de ellos.

Durante años tuvo que sufrir los abusos psicológicos con un padre que le llevó hasta un límite inhumano. Algo que ya contó en su biografía, cuando relató cómo su progenitor le escupía a la cara, la pateaba e incluso la prohibió dormir en el hotel después de perder las semifinales de Wimbledon. "Un golpe en la cabeza me hizo caer y, mientras estaba tendida en el suelo, comenzó a patearme. Me pateó cerca de mi oreja y mi visión se volvió borrosa", describió la tenista en su autobiografía.

Damir Dokic. EPA
Damir Dokic. EPA

 "Casi salto de un 26º piso y pongo fin a mis días. No olvidaré nunca ese día, todo era turbio, negro, sin sonido, sin luz. Nada tenía sentido", aseguraba la tenista en 2022, cuando estuvo a punto de quitarse la vida tras todo lo vivido con un padre con el que no se habla desde hace más de una década. "Tenía la esperanza de que cambiara, pero no fue posible. Ahora duermo bien".

Fueron muchos años de pesadilla para una Dokic que ahora vuelve a abrir su particular caja de truenos para desvelar todo lo que tuvo que pasar para llegar a lo más alto.