¿Por qué no se podía comprar la camiseta de Carlos Alcaraz del Open de Australia? Qué precio tiene y cómo encontrarla

Carlos Alcaraz es todo un fenómeno social. El tenista español es el actual número 2 del mundo y uno de los principales favoritos para hacerse con el Open de Australia. Además, su carisma y juventud le convierten en uno de los atractivos del circuito. Eso hace que todos los ojos estén pendientes de él. Tanto de su desempeño en la pista como de todo lo que le rodea: su actitud, su forma de moverse y también, claro, su look, incluyendo el pelo, las zapatillas y, por supuesto, la camiseta que lleva.

En el tenis, el marketing se ha puesto las pilas y el mandato suele ser claro: en cada uno de los cuatro torneos más importantes del año (Australia, Roland Garros, Wimbledon y US Open) las principales estrellas estrenan indumentaria. Alcaraz no es ajeno a esta costumbre. Para asaltar el primer Grand Slam del año, el tenista murciano ha optado por lucir una llamativa camiseta sin mangas. Un estilo que ya ha utilizado en más ocasiones, por ejemplo en el US Open de 2023, y que teniendo en cuenta las altas temperaturas que se suelen alcanzar en el Melbourne Park, posee un sentido funcional además de estético.

Con la retirada de última hora de Rafael Nadal del Open de Australia, Alcaraz se ha convertido en el principal reclamo de Nike en el torneo. Sin embargo, con la ropa de los tenistas ocurre a veces un problema por solucionar: las camisetas de los jugadores o los vestidos de las jugadoras no están inmediatamente disponibles (como a veces sucede con las botas de los futbolistas). En este caso, sucede lo mismo: la camiseta amarilla de tirantes de Alcaraz en Australia no ha estado a la venta durante los primeros días de la competición, por lo que solo el murciano podía lucirla de forma exclusiva. La marca ya ha puesto a la venta la prenda y está disponible para el gran público en Tennis Point por 64, 95€.

Los tiempos de venta de este tipo de prendas puede variar mucho. En el Open de Australia 2023, por ejemplo, se hizo muy famosa la camiseta de Frances Tiafoe, y la única opción de conseguirla durante el torneo era a través de la página australiana de una de estas tiendas, con el consecuente retraso y los gastos de envío que ello supone. Para encontrar la camiseta de Alcaraz en tiendas físicas españolas el tiempo de espera es aún mayor porque, lo primero de todo, tiene que hacerse popular (si Carlitos gana el torneo es más fácil que aparezca en tiendas).

Para su partido de primer ronda contra Richard Gasquet, Carlos Alcaraz optó por una vistosa camiseta de tirantes de color amarillo en el frente y completamente blanca en su espalda. Posee un detalle verde en el cuello y el logotipo de Nike centrado a la altura del pecho: el modelo es Court Slam Tank Top Men. No se trata de un modelo único, ya que otros tenistas patrocinado por el gigante norteamericano como Holger Rune también ha jugado con una camiseta sin mangas. Sin embargo, los dos jugadores han contado con equipaciones de diferente color. Otros tenistas de Nike presentes en el Open de Australia, como Francis Tiafoe o Taylor Fritz, han disputado sus partidos con las prendas de la línea CourtSlam de Nike diseñadas expresamente para el torneo.

Evidentemente, el look de Alcaraz luciendo una camiseta de tirantes sobre una pista de tenis evoca de manera de manera irremediable a Rafael Nadal. El tenista balear utilizó un estilismo similar cuando irrumpió en el circuito por primera vez. Aquella imagen rupturista ayudó a posicionar al de Manacor como la alternativa perfecta a Roger Federer, un jugador mucho más clásico tanto en su forma de jugar como en su línea. No obstante, a diferencia de su compatriota, Alcaraz no luce pantalones pirata, una llamativa bandada u otro complemento especialmente vistoso más allá de una muñequera de color verde en su brazo derecho.

A pesar de los títulos que ya ha conseguido, poco a poco Alcaraz, como todo joven tenista, ha de encontrar su hueco en el circuito. Una búsqueda de su lugar en el mundo que también se expresa a través de la ropa que luce, sus celebraciones o actitud para con sus rivales y compañeros. Al fin y al cabo, no deja de ser un chico de 20 años con un legado prácticamente todavía por escribir.