OPEN DE AUSTRALIA
Destanee Aiava logra su victoria más especial tras estar al borde del suicidio: "Intento no fijarme en los comentarios de quienes se comportan como una mierda"
La jugadora local ganó su primer partido individual en un Open de Australia tras derrotar a la belga Greet Minnen (5-7, 7-5, 7-6) este lunes.
De estar a un impulso de tirarse desde lo alto de un puente en 2022 a conseguir la victoria más importante de su carrera. Así de drástico ha sido el cambio que la tenista Destanee Aiava ha experimentado en su vida en poco menos de tres años.
La australiana derrotó este lunes a la belga Greet Minnen (91) para lograr su primera victoria en un Open de Australia. Y lo hizo a lo grande, firmando un partido para el recuerdo que le permitió superar la primera ronda del torneo, en la que ya había caído eliminada cinco veces previamente.
DESTANEE FULFILLED AT #AO2025
— #AusOpen (@AustralianOpen) January 13, 2025
Aiava fights back from the brink to score her first AO main draw victory! @wwos • @espn • @eurosport • @wowowtennis • #AusOpen • #AO2025 pic.twitter.com/RZbtWLTNMR
Tras perder el primer set e ir 5-2 abajo en el segundo, consiguió salvar dos bolas de partido, encadenar cinco juegos consecutivos para forzar la tercera manga y llevarse el partido en el tie-break definitivo, obteniendo así su primera victoria individual en un Grand Slam.
La remontada, poco común a estos niveles, se explica a través de la fortaleza mental que la australiana ha adquirido en los últimos dos años tras sufrir la experiencia más traumática de su vida en 2022, cuando estuvo a punto de suicidarse: "La noche del 17 de abril me iba a tirar de un puente, pero pasaron por allí tres personas, me sacaron de la barandilla y me llevaron en coche a casa. No quería llegar a mi 22 cumpleaños", publicó en un post de Instagram (que ha sido eliminado) un mes después de aquello, que paradójicamente ocurrió un Domingo de Resurrección.
Aiava, que ocupa la posición 195 del ranking WTA, rebosa confianza después de haber superado ese mal trago con la ayuda de su familia y amigos, que también le han protegido de unas redes sociales que en el pasado fueron sus peores enemigas: "Intento mantenerme alejada del teléfono lo máximo posible. Cuando era más joven lo utilizaba mucho, ahora lo manejo mejor y tengo a gente a mi alrededor que me ayuda a mantenerme distante".
La tenista, que llegó a publicar tras su intento de suicidio que "había ocasiones en las que algunas personas le hacían pensar que no era digna de ser querida por los demás", aprovechó para lanzar un mensaje tras el partido a aquellos que utilizan las redes para sacar a relucir su peor versión desde el sofá de casa: "Intento no fijarme en los comentarios de quienes se comportan como una mierda con los demás, pero me gusta regañarles. Son solo personas que se sientan delante de sus teléfonos y no tienen nada mejor que hacer porque están tristes y descontentas con su vida", declaró.
Con este discurso, que puso en pie al público del Melbourne Park, Aiava dio por finalizado un día que no olvidará. A sus 24 años y con toda la vida por delante, buscará seguir sumando éxitos a una carrera que podría haber acabado de forma trágica antes de lo debido. Su próximo reto será en la madrugada de este jueves, cuando se medirá a la estadounidense Danielle Collins (11) en treintaidosavos de final.