Rafa Nadal compite pero Carlos Alcaraz se lleva el último baile con solvencia

El último Nadal - Alcaraz tenía un ganador claro. Los pronósticos se cumplieron (victoria de Carlitos por un doble 6-3), pero no fue de una manera apabullante como se podía imaginar. El manacorí compitió, su derecha hizo daño al de El Palmar por momentos... pero enfrente tuvo a un "animal", como definió Rafa en la entrevista postpartido, un Alcaraz que ha acudido a un torneo de exhibición millonario en Riad a hacer precisamente eso, exhibirse. Este sábado, la final del Six Kings Slam entre Sinner y el murciano. Antes, a partir de las 18:30 horas, el tercer y cuarto puesto entre Djokovic y Nadal. Será, sí, el último Nole - Rafa.

Afortunadamente para el espectador, los dos primeros juegos no fueron la tónica general del partido. Carlitos se llevó los ocho primeros puntos y, por consiguiente, los dos primeros juegos en blanco. Sin paliativos, sin dar opción a Nadal. Alcaraz, con mucho más rodaje pese a su derrota reciente en Shanghai, amenazaba con romper el encuentro de semifinales desde muy pronto. Pero Rafa replicó con otro juego en blanco.

A partir de ahí, ambos fueron capaces de conservar su servicio, con buenos momentos de tenis de ambos, con golpes ganadores del manacorí que le mantenían en el marcador. Nadal fue fiel a su ritual antes de saltar a la pista, con la misma intensidad de siempre en el calentamiento aún en el tunel de vestuarios, y tampoco perdió su competitividad habitual sobre la pista, y eso que las condiciones no podían ser más adversas a sus intereses: pista rápida y bajo techo.

La primera manga, sobre todo, fue una demostración de que Nadal no ha dejado de ser competitivo, pero que ya no está para ser competitivo de manera sostenida en el tiempo. De ahí que las finales de la Copa Davis el próximo mes de noviembre en Málaga sea su última aparición como tenista profesional. Esto se puede aplicar, por extensión, al propio duelo ante Alcaraz, con un Rafa de más a menos, con más errores en el segundo set.

De un lado y de otro se notó la abrumadora diferencia entre ambos en la actualidad. Mientras Alcaraz cerraba sus juegos de manera solvente y exhibiéndose, a Nadal le costó, aunque, en su intento de prolongar el encuentro lo máximo posible, Rafa todavía acumuló buenos puntos en la recta final del segundo set. Nadie quería que terminara, tampoco el público de Riad, que coreó el "Rafa, Rafa" en el último juego del partido. La afición quería el break, pero Alcaraz no dio opción y cerró con un último saque abierto.