No será el mejor Djokovic, pero ya está en su 45ª semifinal de Grand Slam

París.- Dice Sergi Bruguera que no ve del todo fino a Novak Djokovic. Comenta Nicolás Almagro que este Novak Djokovic no le termina de convencer. En los pasillos de Roland Garros se lleva días barruntando eso mismo, que este Nole no es el Nole de siempre, que le falta chispa, que necesita elevar su nivel.

Enfadado como en pocos torneos, rabioso y gritón, el serbio sigue a lo suyo. No será el Djokovic de siempre, no, pero ahí está, batiendo por 4-6, 7-6 (7-0), 6-2 y 6-4 a Karen Khachanov y en las semifinales de Roland Garros. Otra vez. A dos victorias de elevar su 23º Grand Slam y de recuperar el número uno, a dos victorias de dar un bocado decisivo a los libros de historia. ¿Quién va a discutir que no es el mejor de todos los tiempos si el domingo sale por la puerta con su tercera Copa de los Mosqueteros bajo el brazo?

Con su victoria de este martes, Djokovic sum ya 12 semifinales en Roland Garros y 45 en todos los Grand Slam situándose a tan sólo una del récord absoluto de Roger Federer. Su próximo rival será Carlos Alcaraz, que barrió después a Tsitsipas por 6-2, 6-1 y 7-6 (7-5). Será el partido del torneo y del que saldrá el favoritísimo para la final.

Aunque no hay ningún estudio al respecto, es de una obviedad palmaria que para ganar a Djokovic al mejor de cinco sets en arcilla hay que jugar un tenis superlativo durante varias horas. Khachanov, que regresará el próximo lunes al top ten, salió a la pista con la lección bien aprendida. Concentrado, con un alto porcentaje de primeros y fallando poco, el ruso fue construyendo pasito a pasito su fortaleza.

Se llevó el primer set, algo que no había conseguido ningún tenista ante Djokovic en lo que iba de torneo, y llegó al tie break del segundo sin haber concedido todavía ninguna pelota de quiebre. Noleestaba siendo ultradefensivo, jugando muchísimas bolas altas, y le estaba costando llevar la iniciativa.

Contra Djokovic sabes que si bajas un peldaño la concentración, el serbio se te sube a las barbas. Y ahí ya poca escapatorias hay porque quitárselo de encima es imposible. Khachanov lo sintió en el tie break del segundo set. Igualadísimo todo hasta ese momento, Djokovic le endosó un 7-0. Había despertado la bestia.

"Él ha sido mejor jugador durante los dos primeros sets y yo he sufrido para encontrar mi ritmo, he entrado lento en el partido. Pero he jugado un tie break perfecto y desde entonces he elevado el nivel un par de peldaños", ha comentado Djokovic nada más acabar el partido. "Ha sido una gran pelea, lo que se puede esperar de unos cuartos de Grand Slam".

El resto del partido no fue coser y cantar, pero el hachazo ya estaba dado. Se antojaba imposible que Khachanov, semifinalista en los dos últimos grandes, se pudiera recuperar del golpe. Y así fue. Djokovic no es el de siempre, pero está en semifinales. Y a ver quién le frena.