WIMBLEDON

Un malentendido desata la 'guerra' en Wimbledon: "Bebieron mucho durante todo el día"

El partido entre la ucraniana Svitolina y la bielorrusa Azarenka terminó con abucheos del público.

Un malentendido desata la 'guerra' en Wimbledon: «Bebieron mucho durante todo el día»
José M. Amorós

José M. Amorós

Londres.- El partido entre la ucraniana Elina Svitolina y la bielorrusa Viktoria Azarenka en la 3ª ronda del cuadro femenino se presentaba bajo la sombra de la guerra, siempre presente desde el inicio del conflicto cada vez que se enfrenta dos tenistas de los países involucrados.

Durante el encuentro, solo el tenis tuvo protagonismo pero, con la victoria de Svitolina, llegó el lío. La ucraniana ya anunció hace meses que no daría la mano al final del encuentro a tenistas rusas y bielorrusas, porque estaba en contra de su participación internacional. Las rivales conocen su decisión y deciden felicitar la victoria desde la lejanía, mientras se despiden del juez de silla. En ocasiones, como ya ocurrió en Roland Garros, el público desconoce el motivo de la situación y la toma contra una de las tenistas.

En esta ocasión, Azarenka levantó el pulgar en la distancia y se marchó a recoger sus cosas. Al encaminar su salida hacia vestuarios, las gradas de la pista 1 del All England Club comenzaron a abuchear a la bielorrusa. Le recriminaban no haber dado la mano a su rival. Azarenka, que sabía que no había hecho nada malo, no se lo tomó bien y, tras una mirada acompañada de una sonrisa irónica, levantó sus manos y las juntó encima de su cabeza. Ese gesto provocó que el cabreo de la grada se incrementara mientras la jugadora desaparecía por el túnel.

"Probablemente, bebieron muchos Pimm's [bebida inglesa a base de ginebra, infusionada con hierbas aromáticas y especias] durante todo el día", decía Azarenka a su llegada a la sala de prensa, visiblemente enfadada tras unas gafas de sol. "No puedo controlar a la multitud, no estoy segura de que mucha gente entendiera lo que estaba pasando".

La polémica estaba servida. Con las preguntas de los periodistas en un clima tensionado, la tenista bielorrusa continuaba arremetiendo contra quienes la abuchean: "No he hecho nada malo pero a veces sigo recibiendo un trato diferente, siento que esto ha sido bastante constante durante los últimos 18 o 19 meses". No es la primera vez que una grada reacciona contra ella desde el inicio de la invasión rusa en territorio ucraniano.

Solo quedaba una duda: qué significaba el gesto. Azarenka explicó que no recordaba qué había hecho y que no tenía significado alguno: "En realidad, no tengo ni idea. No sé, no tengo ni idea y ni siquiera podría repetirlo". Tras una retahíla de preguntas sobre el tema, en las que llegó a enzarzarse con un periodista sobre si estaba enfadada ("¿Usted qué cree? Deme su opinión", le requirió), se marchó por la puerta de la sala de prensa.

Petición de un declaración

Solo dos minutos después, por la misma entrada, llegaba Elina Svitolina que, tras una nueva polémica con el saludo en sus partidos, pidió la intercesión de las instituciones: "Me pasó lo mismo en París, jugué tres partidos y pasó esto. Hoy, también. Creo que las organizaciones de tenis tienen que salir con una declaración de que no habrá apretón de manos entre los jugadores rusos, bielorrusos y ucranianos. Quizás la gente no lo tiene claro y algunas personas no saben realmente lo que está sucediendo".

La ucraniana, que se ha metido en cuartos de final después de ser madre, volvió a insistir en que su postura no va a cambiar: "Ya he dicho varias veces que hasta que las tropas rusas estén fuera de Ucrania y recuperemos nuestros territorios, no nos daremos la mano". La mayoría de jugadoras del país han tomado la medida y no realizan el saludo.

Este es el último episodio de tensión en el tenis provocado por el conflicto bélico en Ucrania y parece que no va a ser el último, sobre todo en un circuito femenino donde los países involucrados cuentan con algunas de las mejores jugadoras del mundo y los enfrentamientos en torneos son habituales.