Jordan Díaz voló y TVE se desesperó: así se quedó España sin ver en directo un salto para la historia
El hispanocubano establece en Roma la tercera mejor marca de todos los tiempos y conquista el oro europeo... en 'diferido'.

Roma. El reloj supera por poco las diez de la noche y Jordan Díaz Fortún acaba de hacer historia. El hispanocubano, nacido en La Habana hace 23 años, pero nacionalizado español en 2022, salta hasta los 18,18 metros en el triple, estableciendo el récord absoluto del Campeonato de Europa, la mejor marca de la historia del atletismo español y la tercera mejor de todos los tiempos, solo superado por los 18,29 del británico Jonathan Edwards (1995) y los 18,21 del norteamericano Christian Taylor (2015).
Lo increíble, aunque quizá no tanto atendiendo a los precedentes, es que Díaz hizo historia cuando los focos apuntaban a otros. La señal internacional, esa de la que se nutre la imagen que Televisión Española (TVE) lleva a nuestras casas, ofrecía la disputadísima final del salto de altura, con el italiano Gianmarco Tamberi jugándose el oro en casa ante los ucranianos Vladyslav Lavskyy y Oleh Doroshchuk.
Con el listón de la altura en el foco, Lourdes García Campos, narradora de TVE, advirtió de lo que acababa de suceder en el lateral del estadio. "Por favor, por favor, ¡volvamos al triple!", suplicó la periodista en antena, ante la sorpresa de los telespectadores españoles. "Ahora sí que no les vamos a decir nada, porque en casa hay que ver esto pegados al televisor".
🥹Una secuencia para la historia del atletismo español.
— Teledeporte (@teledeporte) June 11, 2024
⚡️Jordan Díaz ha batido el récord de España en su cuarto intento con un registro de 17,96.
🔥El español ha dinamitado la final con una marca de 18,18 en su siguiente salto, la TERCERA MEJOR MARCA DE LA HISTORIA. #Roma2024 pic.twitter.com/enGDGfZRJ2
Algo había ocurrido. Y por las formas, se trataba de algo muy grande. "Que nadie se levante, porque lo que nos van a ofrecer es espectacular. ¡Historia del atletismo español!", añadió García Campos, claramente excitada por lo que acababa de presenciar desde la tribuna de prensa del Estadio Olímpico romano. "Bueno, bueno, bueno... Tremendo. ¡Puuuuf!".
No fue hasta cinco minutos después cuando Televisión Española recibió las imágenes... en falso directo. "¡Ahí está! Aquí tenemos el quinto intento de Jordan Díaz, que había hecho récord de España en su anterior intento con 17,96...", cebaban desde TVE, fingiendo cierta sorpresa al tiempo que el saltador nacido en La Habana aceleraba hacia el foso.
Pim. Pam. Pum. Tres pasos y vuelo interminable hasta la arena. Hasta con la pantalla de referencias apagadas, algo ciertamente poco entendible. Daba igual. Aun en diferido, Díaz acababa de hacer historia. Nada más levantarse, el hispanocubano, pupilo de Iván Pedroso, lo sabía. Sabía que había hecho historia. No hacía falta mirar las mediciones. Bastaban sus sensaciones. Lo sabía. La grada también. "Este es su salto, ya van a ver la marca enseguida...", advertían en TVE en los escasos segundos que separan el aterrizaje y el anuncio de la marca en televisión. "Ojo, ojo... ¡18,18 metros! ¡Jordan Díaz, récord del Campeonato de Europa!". El resto ya es historia.