La figura en la sombra del maratón en Madrid fue un amigo de Doncic al que le dijeron que no volvería a andar
Tim Marovt, esloveno de 21 años, sufrió una lesión medular que lo dejaba en silla de ruedas de por vida, pero que él se tomó "como una lesión de rodilla".

Tim Marovt tenía 12 años cuando viajó con su familia a Hawaii para pasar unos días de vacaciones y, desde entonces, todo cambió. Era un niño muy deportista, con aspiraciones olímpicas, que hacía esquí y motocross. Tenía un gran potencial y quiso probar con el surf en ese viaje. Allí sufrió la mielopatía del surfista, una lesión de la médula espinal que afecta a algunas personas que practican surf por primera vez. No fue un golpe, ningún traumatismo, tan solo un giro que le provocó una lesión en la médula espinal. Perdió toda la movilidad en sus piernas y el pronóstico fue el de no poder volver a andar el resto de su vida. Pero el esloveno, de ahora 21 años, hizo oídos sordos, y hoy por hoy es capaz de correr maratones con la ayuda de dos bastones. "Me río de los doctores que dijeron que no volvería a andar", cuenta a Relevo con una sonrisa.
Tim, o Timson, como le llaman sus amigos, desprende una positividad envidiable. A pesar de las malas noticias que le dieron siendo tan solo un niño, jamás dejó de creer y trabajó desde el primer día para ponerle una solución al problema: "Me lo tomé como una lesión de rodilla". La idea de pasar el resto de su vida en una silla de ruedas no le gustó, pero tampoco le frenó a intentar cambiar y desafiar a lo que parecía prácticamente imposible. Hoy viaja por todo el mundo para participar en maratones como la de 10 kilómetros que completó en Madrid, en 1h53:23, el pasado domingo, llegando a meta sin los bastones.
"Cuando no tengo ganas de hacer ejercicio, solo recuerdo cómo era cuando estaba en la silla de ruedas. Y eso siempre es algo que me empuja a trabajar más duro", declara el esloveno. Desde el momento que decidió hacerle frente a su diagnóstico, realizó entrenamiento físico, fisioterapia y ejercicios a menudo dolorosos. Un año después, en 2015, dio sus primeros pasos y siete después corrió sus primeros 5 kilómetros. "Nadie creía en mí, solo mi familia y yo. Desde el día uno sabía que volvería", confiesa.
El poder de la mente
Marovt tiene un vínculo especial con otro gran deportista de su país, Luka Doncic. "Eslovenia es un país muy pequeño donde vive muy poca gente y estoy muy orgulloso de gente como Luka, que es mi amigo y en parte estoy aquí gracias a él", explica. Doncic le presentó a Javi Barrio, fisioterapeuta del Real Madrid de baloncesto, con el que compartió una gran relación en la etapa en la que vistió de blanco, y que ha ayudado mucho a Marovt.
Precisamente en su país fue donde, a su juicio, realizó su mayor logro y su favorito, el que le hace sentir más orgulloso. Ocurrió el año pasado, cuando conquistó el pico más alto de Eslovenia. "Estoy muy orgulloso de ser parte de esto, de ser esloveno y sí, es muy agradable viajar, pero cuando llegas a casa es muy bonito volver", expresa.
Sobre si se considera un referente para personas con su mismo problema, Tim Marovt es todo humildad. Con sus casi 400 mil seguidores en Instagram, trata de inspirar a todo el que lo necesite, aunque considera que hay gente que lo ha pasado peor y que sufre cosas también graves "como por ejemplo un cáncer". Trata de ayudar "lo máximo posible a tanta gente como sea posible".
No le gusta pensar en el pasado: "para mí lo más importante es mi futuro, mirar siempre hacia delante", por lo que tiene muy claros sus objetivos, que no son nada sencillos. "Quiero regresar a Hawaii, donde me lesioné. Participar en el Ironman algún día y luego surfear. Por supuesto, seguir haciendo grandes maratones los próximos cinco años y luego, retirarme. Esto también es lo que me motiva cada día a ser mejor, estar más preparado, estos objetivos me mantienen vivo", concluye.
Tim ha vuelto a caminar, correr, hacer esquí por montañas empinadas o en el agua, andar en moto e incluso es capaz de surfear. "Liberarme de mis limitaciones ha sido un viaje emocional y ha transformado mi vida de innumerables maneras", explica en su blog. Lo tiene claro, el poder de la mente es lo que le llevó a transformar su visión de la realidad.