Marta Serrano, hija del entrenador y gran promesa del atletismo español: "Me cuesta no llamarle papá"
La joven de 20 años debuta en un Mundial absoluto tras ser campeona de España absoluta de 3.000m. obstáculos.
Es indudable que las personalidades, las maneras de ser y las aficiones tienen mucho que ver con lo que ves en tu entorno desde que eras solo un niño. Marta Serrano (Madrid, 20 años) parecía destinada a ser atleta en la élite. La hija de Antonio Serrano, mítico entrenador de campeones españoles como Juan Carlos Higuero, Chema Martínez, Diana Martín o Adel Mechaal, nació y creció rodeada de atletismo y del bueno.
En su infancia, dio como normal ver a los mejores atletas en el salón de su casa e incluso, como nos confiesa, algunos le llegaron a cuidar cuando apenas tenía 6 años. Esa niña creció y, aunque intentó huir del atletismo haciendo todo tipo de deportes, parecía que lo llevaba en la sangre y terminó tomándoselo en serio. Tanto como para que con 20 años sea la gran revelación del atletismo español, quemando etapas de categorías inferiores y haciendo su irrupción en la élite para ganar a las dominadoras Irene Sánchez-Escribano y Carolina Robles, discípulas de su padre, en la final de todo un campeonato de España y clasificándose para el Mundial absoluto de manera precoz.
Antes de debutar en Budapest, se sienta con Relevo para analizar cómo ha sido su vida, su crecimiento exponencial y sus sueños por cumplir.
¿Cuáles son las sensaciones antes de competir?
Pues, a ver, la verdad que no me puedo quejar ha sido bastante, o sea, entrenando muy bien y eso. La verdad es que en Soria también se hizo un poco más ameno porque la temperatura y todo ha ido bastante, ya que en Madrid hace muchísimo calor. Pero bueno, sí, bien, con ganas de ya afrontar lo que queda. Los entrenos han ido súper bien, sensaciones muy bien. Así que nada, a ver si ahora podemos rematarlo todo bien en el Mundial.
Cuando escuchamos 'Marta Serrano', es inevitable quedarse con un apellido que está ligado a muchas de las estrellas del atletismo español. Antonio Serrano es tu padre y entrenador. ¿Eres la niña mimada del entrenamiento?
No, qué va, qué va. Para nada, en el entrenamiento soy una atleta más y la verdad es que lo agradezco. Veo que es muy importante separar lo que es la relación de padre y de entrenador. Entrenando soy como si me llamo Irene, una más.
Cuando comienza el entrenamiento, ¿le sigues llamando 'papá' o 'Antonio'?
A mí me cuesta un poco. Como estoy todo el día con él, me cuesta mucho llegar a entrenar y llamarle Antonio, porque no lo he llamado así nunca. Entonces hay veces que sí que digo en plan "míster" o así, pero es que me sale solo decirle "papá". Pero bueno, no pasa nada. Luego, el comportamiento sí que es de atleta-entrenador.
Cuando termina el entrenamiento, volvéis juntos a casa en el mismo coche. ¿Ahí empieza la relación padre-hija o se sigue hablando de atletismo, del entrenamiento...?
Para mi padre, su vida es el atletismo. Entonces, creo que le cuesta mucho hablar de otras cosas porque está todo el día rodeado de esto. Entonces, aunque luego me suba al coche para ir a casa, la relación de entrenador sigue ahí. Él te sigue contando cosas, preguntándote y siempre como un poco todo alrededor de atletismo.
¿Cómo fue tu niñez? Estabas predestinada a ser atleta con tanto atletismo a tu alrededor.
Sí, sí. Empecé con el atletismo gracias a mi hermana. Fue ella la que quiso empezar, porque yo he hecho todos los deportes, y fue la que dijo: oye, vamos a empezar a hacer atletismo'. Entonces, los sábados bajaba al CAR a ver cómo mi padre entrenaba a su grupo y yo ahí me daba un par de vueltas. Y a mí me gustaba un montón bajar a entrenar con él los fines de semana. De vacaciones y muchas veces íbamos a ver los campeonatos, porque a nosotras nos encantaba y lo disfrutábamos muchísimo.
¿Cuál es tu primer recuerdo con el atletismo? Serías muy pequeña...
Sí, por ejemplo recuerdo de cuando era muy pequeña ir a los cross en invierno. A Atapuerca, que íbamos todos los años, y yo lo corría. Participaba en la prueba para prebenjaminas y me acuerdo que hacía un frío... Lo pasaba super mal. Mi padre, a las carreras que iba con sus atletas y veía que había igual alguna prueba de niños, para poder incluirnos en el viaje, decía: 'venga, venid y corréis también'. Me acuerdo de hacer carreras de niños súper pequeños. Siempre le decía: 'Papa, es que me canso mucho' y no me gustaba nada cansarme. Lo pasaba supermal.
Me has dicho que hacías otros deportes. Ya es curioso teniendo la elección del atletismo tan a mano.
He hecho voleibol, balonmano, baloncesto, taekwondo, ballet, baile moderno, natación... Yo creo que lo he probado todo. Sí que es verdad que siempre, cuando empecé el atletismo, siempre hacía atletismo y otra cosa. Siempre hacía dos. Y ya, hasta muy tarde, no me centré solamente en el atletismo. En la ESO, seguía haciendo balonmano y luego me iba a entrenar atletismo. O baloncesto y luego me iba a entrenar atletismo. A mí me encantan los deportes.
Parece que ibas buscando hacer la contra a papá. Como cuando a un padre del Madrid le sale un hijo del Barça.
Totalmente (sonríe). Yo creo mi padre estaba esperando bien en qué momento ya íbamos a centrarnos en el atletismo y dejar los demás deportes.
Tu madre también fue atleta. No sé si el instinto materno le hace pedir a tu padre que apriete menos. A lo mejor si entrenas mucho dirá: 'déjala a la niña, que llega muy cansada a casa'.
Sí, mi madre lo vive un poco distinto porque ella también fue atleta, pero decidió centrarse más en su trabajo como bióloga. Entonces, a mí ella me sigue viendo como su hija. Entonces, claro, esto de venir a un Mundial de categoría absoluta aún siendo de categorías inferiores... A ella sí que le sale ese instinto de: "Joé, mi niña se va a quedar sin verano por preparar un Mundial". Pero bueno, ella sabe que me encanta y que lo disfruto mucho. Al final me dice que tengo que hacer lo que más me guste y lo que más feliz me haga.
¿Has visto alguna conversación de estas de tu madre diciéndole a tu padre que no apriete a la niña que ha vuelto muy cansada?
Sí, sí, mi madre siempre es la que le pone un poco de freno.
"Sería una tontería clasificarme para un Mundial absoluto y decir que no voy porque quiero descansar"
Hablabas de perderte el verano. Has tenido una adolescencia diferente y no has podido disfrutar de veranos como el resto de los de tu edad poco...
Sí. No es el primer año que me pasa. El año pasado tuve el Mundial Sub-20 de Cali, el anterior, el Mundial Sub-18 de Nairobi que acabó a fines de agosto también. Ya no me cuesta tanto al final porque como es algo que me gusta... A ver, sí es duro no ir a un festival, pero tengo también mis dos o tres semanas de vacaciones que igual no son iguales porque no es en agosto o julio, pero lo disfruto de otras formas.
Es por una buena causa. Como para arrepentirse...
Es lo que me gusta y por lo que estoy apostando. Sería una tontería clasificar al Mundial y decir: 'ah, no, pues no voy porque quiero descansar en verano'.
Bueno, creo que eres la más joven de todo el equipo. ¿Notas esa presión de haber llegado demasiado pronto a élite?
Qué va. Este año no contaba para nada con el Mundial, era como algo inimaginable. Ahora que se me ha dado la oportunidad, voy con todo menos con presión. Voy con muchísimas ganas de afrontarlo, coger experiencia y disfrutar la carrera, Sobre todo, el viaje también, que estuve en la Copa de Europa con la absoluta y es completamente distinto a viajar con gente de tu edad. Para mí, es cogerlo como una experiencia y disfrutarlo y para nada ponerme presión. Vale, que he quedado campeona de España absoluta, pero tengo 20 años y mucha más trayectoria. Con paciencia y disfrutarlo.
💥 ¡¡Marta Serrano (@marttaserrano_) es CAMPEONA DE ESPAÑA!!
— Teledeporte (@teledeporte) July 28, 2023
🔥 La madrileña se impone a Irene Sánchez-Escribano (@irenesef) en una final de 3000m obstáculos APASIONANTE. #AtletismoRTVE
DIRECTO | @teledeporte y https://t.co/56x6E4YT2r pic.twitter.com/fA8OLyzdkQ
Ser campeona de España te quita presión porque el año ya está más que rentabilizado o te mete presión de que llegas al Mundial con el título y hay que dar la cara.
Es verdad que ahora estoy muy bien, sigo entrenando genial, estoy súper en forma y, de hecho, me sorprende que siga aguantando la forma tan bien. Aquí, puedo aprovechar para hacer una buena carrera, una buena marca o lo que sea. En estas carreras, la experiencia ayuda muchísimo. Irene (Sánchez-Escribano) y Carolina (Robles) tienen mucha más experiencia que yo en este tipo de carreras. Por eso, prefiero ir súper tranquila, porque también así es como mejor se compite. Si la gente quiere poner unas expectativas sobre mí, que las pongan, pero a mí eso no me influye.
¿Te podías esperar lo que pasó en el Campeonato de España de Torrent?
No, para nada. Encima después del Europeo Sub-23, que no fue como mi mejor carrera, no llegaba como con la mayor confianza en el mundo. Me dije: 'mira, voy a disfrutar la carrera y voy a ver cómo me encuentro', porque tampoco sabía muy bien cómo iba a estar. Fue una carrera que no me estaba creyendo, hasta que no entré en meta no lo asimilé.
¿Cómo fueron esos últimos metros en los que te das cuenta de que le vas a ganar a las dos atletas dominadoras de la disciplina en España en categoría absoluta?
Sí, sabía que si conseguía llegar con Irene al último 200 o así, podía lucharlo. Como entreno con ella, la conozco muy bien. Soy un poco más joven y creo que eso me da ventaja en los últimos metros, por la velocidad que tengo. Pero claro, como tampoco sabía si contar con eso, cuando me vi en la situación dije: 'ostras, a aprovecharlo'.
"Irene dice: 'De Martita no tiene nada, la cabrona cómo corre"
Hablabas de Carolina Robles y de Irene Sánchez-Escribano. Están contigo aquí en el Mundial y las tres entrenáis con Antonio Serrano. ¿cómo son contigo? Sois de generaciones diferentes. Ellas han competido entre ellas y llevan ahí unos años en la guerra, pero ahora has aparecido tú, ¿cómo es ese ambiente con ellas?
Con Carolina trato menos porque entrena en Sevilla y no es lo mismo. Con Irene siempre que alguien dice 'qué buena es la pequeña', ella siempre dice: '¿cómo que la pequeña? Si ya está con nosotras'. Como que ella ya me trata como una más. El año pasado era distinto porque, cuando entrenábamos, era como yo siempre detrás... Ahora, como ve que estoy ahí con ella, le da rabia cuando dicen en plan 'Martita la pequeña' o 'Martita no sé qué'. Ella está en plan como 'De Martita no tienen nada, la cabrona como corre'.
Cuando lees 'Marta Serrano es el futuro del fondo español', que ya se ha publicado en tropecientas noticias, ¿qué piensas?
Pues que ojalá. Estoy trabajando y luchando para ver si sí. Es lo que sueño y lo que quiero y por lo que estoy apostando. Mi padre dice que no hay que quemar etapa demasiado rápido y hay que ir poco a poco, pero también es verdad que estoy dando saltos muy grandes Quiero que seguir adelante, no quedarme estancada y seguir proyectando cosas. A ver si puedo, de verdad, ser el futuro del fondo español.
"¿El récord de España de 3.000 metros obstáculos? Es un objetivo que tengo ahí"
Los aficionados españoles al atletismo ya te señalan como la atleta que puede o tiene que batir/borrar el récord nacional de 3000 obstáculos [de Marta Domínguez, en 2009].
Sí, es verdad que me da mucha rabia porque es muy difícil y bueno, todos sabemos... pero es algo que me encantaría, la verdad. Es un objetivo que tengo ahí, también es verdad que, joder, también me gustan mucho los obstáculos, pero no me quiero cerrar ya solamente a esta prueba. La temporada que viene, que son los Juegos, sí que seguiré haciendo obstáculos, claramente, pero me veo con un buen 5.000, incluso 1.500, y me gustaría tocar esas pruebas también y ver hasta dónde puedo llegar en ellas.
Te hemos visto en categorías inferiores muy cerca de las africanas en una prueba como el 5.000. Para estar cerca en categoría absoluta de este 3.000 obstáculos, hay que bajar tanto como para estar en torno a los 9 minutos. ¿Te ves capaz en el futuro?
Sí, lo vamos a intentar, ¿no? Si ahora estoy ya pudiendo correr en 3:07-3:08 el kilómetro, si quiero durar años, también tendré que ir mejorando. Es la idea, a ver si funciona. Confío en mi entrenador.
No sé si le exiges al entrenador que apriete con los entrenamientos que te ves capaz de ir a más...
Él también que ir con calma y yo le digo: 'me gustaría un poco esto'. Y él ya hace lo que quiere y yo lo acepto.
¿Quién ha sido tu referente, la estrella en quien te has fijado?
Del grupo de mi padre, me encantaba Diana Martín que justo también hacía obstáculos. Me acuerdo que, de pequeña, le hice una entrevista y todo para el colegio. Luego, de chicos, me gustaba mucho Kevin López. Pero nunca he tenido grandes referentes de querer ser como alguien. He vivido muy de cerca a la gente que entrenaba con mi padre, a Juan Carlos Higuero y todos. Es que yo los veía como de la familia, ¿sabes? Al final venían a mi casa, me cuidaban cuando era pequeña. Eran como unos referentes, pero a la vez muy cercanos.
Has estado cuidada por estrellas, normal que ahora no te dé miedo nada cuando saltas a la pista contra las actuales.
Claro, es que era gente súper top que estaba en mi casa cuidándome cuando yo tenía 6 años. Obviamente, yo flipaba pero en ese momento también era como 'ah bueno, es un amigo de papá que viene a cuidarme'.