Los 400 días que han transformado a Ana Peleteiro: "Me encuentro mejor que nunca"
La saltadora española volverá a una gran cita internacional poco más de un año después de ser madre.
![Ana Peleteiro, tras lograr la medalla de oro en el triple salto del Campeonato de España de Ourense./RFEA](http://s2.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202402/19/media/cortadas/ana-peleteiro-ourense-RlNRvu4LooqDzYDDD3w8G8M-1200x648@Relevo.jpeg)
Lúa — en portugués Luna — significa 'lo que brilla y reluce'. Es el nombre de la hija de Ana Peleteiro y su marido, el atleta francés Benjamin Compaoré, y representa a la perfección el aura que rodea a su madre cada vez que pisa una pista de atletismo. Hay pocos deportistas privilegiados que siempre muestren un espíritu competitivo por encima, incluso, de sus condiciones previstas. El primer embarazo no lo ha cambiado y Peleteiro es un gran exponente de 'los que siempre rinden'.
En solo 400 días que han cambiado todo, el nombre de la bronce olímpico en Tokio vuelve a la lista de una gran competición internacional para competir en el Mundial de pista corta en Glasgow [1-3 de marzo]. Una noticia que llega pocas horas después de lograr la mínima olímpica de la Real Federación Española de Atletismo para los próximos Juegos Olímpicos de París con un gran salto de 14,32 metros y proclamarse campeona de España de triple, con un más de un metro y medio sobre sus rivales. Conseguir el primer objetivo le hizo romper a llorar al abrazar a su entrenador Si la ilusión no fuera suficiente, más prometedor fue el último intento del concurso, que terminó siendo nulo por apenas un centímetro y que parecía estar en los 14,50.
🥲 Ana Peleteiro se emociona tras su tercer intento, en el que ha volado hasta 14,32 m
— Teledeporte (@teledeporte) February 18, 2024
Con esa marca en triple salto está virtualmente clasificada para el Mundial de Glasgow. ¡Bravo!
Sigue la sesión en directo en TDP y RTVE Play: https://t.co/rxXrYdpKFe pic.twitter.com/eNBXLrTsTN
Hace 400 días, el 16 de enero de 2023, solo 28 días después de dar a luz a Lúa, Ana Peleteiro se ponía en las manos de la preparadora física Crys Díaz. Por delante, un reto mayúsculo que sigue despertando dudas, pero donde cada vez más deportistas rompen con los estigmas: Volver al mejor nivel después de ser madre. A pesar de que no paró de entrenar hasta pocos días antes del parto para notar lo menos posible el shock físico de volver a los entrenamientos, el temor también rondaba la cabeza de Ana. "Inseguridad, miedos y muchas dudas rondaban mi cabeza ya que no me reconocía, cada vez que me miraba al espejo o que simplemente me ponía la ropa de deporte para ir a entrenar", reconocía Peleteiro en aquel momento tras su vuelta a la actividad física.
Tras tres semanas de gimnasio, fue el momento de dar el salto a la pista y el 7 de marzo, Relevo le acompañaba en su primer entreno en La Fuente de la Niña de Guadalajara. En un entrenamiento tranquilo, acompañado de Benjamin, la luz de Peleteiro volvía a encenderse: "Estoy sorprendentemente bien", nos confesaba.
Muchos expertos y aficionados se atrevían a afirmar que el rendimiento de la ribeirense no volvería a ser el mismo, que su mejor tiempo había pasado e, incluso, que las opciones de subir a un gran podio ya eran una quimera. Para poner a prueba los atrevimientos de los 'expertos', el 14 de junio en Castellón volvía a aparecer en una lista de participantes en el VII Memorial José Antonio Cansino y, una vez más, no para pasear. Ganó el concurso, pero mejor aún fue verla saltar por encima de los 14 metros para confirmar que le quedaba mucha guerra para dar.
Con ese resultado, se mereció colocarse de nuevo la camiseta del equipo nacional. Era en un campeonato menor, la Copa de Europa de selecciones en Polonia, pero era un paso más y llegaba solo 10 días después de su vuelta. Logró la medalla de oro en el Campeonato de España, superando a toda una María Vicente, y con un 14,21 metros con los que rozaba su vuelta a un Mundial al aire libre. La gallega podía estar compitiendo en Budapest, pero los criterios internos de competitividad que le exigían saltar cuatro centímetros más le dejaron fuera. "El año pasado estaba resucitando", analiza ahora la saltadora.
𝐕𝐨𝐥𝐜𝐚́𝐧 𝐠𝐚𝐥𝐞𝐠𝐨 🌋
— atletismoRFEA (@atletismoRFEA) February 18, 2024
🏠 En su casa
👨👩👧 Con su gente
🎯 Con un objetivo bien claro: volar 🛫
🥇 Octavo título en triple salto en el #CEatletismoST para Ana Peleteiro
📏 14.32m y un nulo larguísimo por menos de una uña
No estamos preparados para lo que se viene 🥵 pic.twitter.com/WFhpKYwiCk
Con el inicio de 2024, las sensaciones han crecido exponencialmente y las aspiraciones comienzan a ponerse muy serias. Tanto como para que la propia Peleteiro afirme que se encuentra "mejor que nunca". "Estoy al 100% otra vez, encontrándome muy bien, sin molestias y muchas ganas", confesaba tras su octavo título nacional en pista corta: "Antes, en el cuarto salto ya estaba reventada y ahora, el último siempre es el mejor. Estoy en mi mejor estado de forma".
Unas sensaciones que no han llegado sin un esfuerzo físico, pero sobre todo tambiñen mental. En las semanas de pretemporada, la preparación le alejó de Lúa durante varios días. El duro trance de una madre, primeriza, de alejarse de su pequeña se pudo hacer cuesta arriba, pero la mentalidad no podía tener más claro el objetivo: "Valdrá la pena y en el día de mañana, mi bebé estará orgullosa de su mamá y le servirá de ejemplo para luchar por sus objetivos".
"Es un placer estar aquí, con mi gente, y en esta pista donde se vuela"
— atletismoRFEA (@atletismoRFEA) February 18, 2024
"Estoy orgullosa de haberme esforzado por volver a la competición"
Y ahora… a Glasgow: "Voy a por todas. Miedo, ¿a qué?"
Ana Peleteiro, feliz en el #CEatletismoST pic.twitter.com/OtsrDbtTSq
Tras probarse en Metz y Valencia con dos concursos por encima de los 14 metros y rozando la mínima exigida por la federación para poder ser seleccionada en París si el ranking lo permite, en el Nacional todo pareció ir rodado: un 14,19m. en el primer salto permitía arriesgar en la carrera y en la batida previa al vuelo. El 14,35m. del tercer salto, que provocó sus lágrimas, le confirmaba el primer objetivo de la mínima RFEA.
El último salto, que vino tras una charla con su entrenador donde pedía poder ampliar la distancia de carrera para "correr como una loca" porque se sentía "muy fresca", realizó un salto en torno o por encima de 14,50 metros, muy cerca de la mínima olímpica absoluta [14,55m.]. Un nulo de apenas un centímetro le robó la medición, pero le debe llenar de ilusión para los próximos meses porque... ¿de qué puede ser capaz con varios meses más de competición? "Estoy orgullosa de haberme esforzado por volver a la competición", contaba tras la prueba.
Estabilidad fuera de la competición
Varios factores fuera de la pista han aportado su gran granito de arena en esta rápida transformación: Su técnico desde hace varias temporadas, el multicampeón Iván Pedroso es uno de los pilares de un crecimiento exponencial que devuelve a Peleteiro a la lista de las mejores saltadoras del mundo en su discplina. "Si no tuvieses a tu niña, no tendrías esta capacidad de sufrimiento" es una de las frases motivadoras que utiliza el cubano para animar a la medallista olímpica, como reconoció la propia Peleteiro en una entrevista de uno de sus patrocinadores hace unos días. La capacidad de Pedroso para sacar lo mejor de sus atletas es un seguro de vida y la implicación de la gallega lo facilita.
Por otro lado, la estabilidad personal es otro factor que le ha dado toda la tranquilidad para centrarse en su vuelta a lo más alto. Tras el último salto en Ourense, Ana no tardó en acercarse a abrazar a su familia que le esperaba a pie de pista. En los últimos meses, se ha casado, su marido ha dejado todo por ella mudándose de París a Madrid para vivir juntos. Un entorno ideal para centrarse en pensar
Hoy, 400 días después de aquel primer entrenamiento posparto, Peleteiro aparece en la lista del seleccionador Pepe Peiró para un Mundial por méritos propios y volverá así al Arena Commonwealth de Glasgow, donde en 2019 logró el único oro en una gran competición internacional durante el Europeo indoor. Con su progresión y su carácter competitivo, lo único seguro es que luchará por todo el próximo 3 de marzo. "¿Miedo? ¿Miedo a qué? A la muerte, y ni eso", expresa con orgullo la gran estrella del atletismo español afrontando su vuelta a una gran cita.