Los 1.699 días del Real Madrid que Pablo Laso también ha llevado a Múnich e ilusionan al Bayern
El técnico vitoriano repite la historia que escribió en el conjunto blanco en Múnich y termina con cinco años de sequía.

Pablo Laso apareció en la sala de prensa del o2 World de Múnich con una cerveza y una sonrisa de oreja a oreja tras cumplir con la misión que le había sido encomendada. El entrenador español aterrizaba en la capital bávara con el objetivo de devolver al Bayern a lo más alto del baloncesto alemán y lo ha conseguido con un doblete que no se veía desde hacía seis años.
Laso llegaba a Múnich para intentar reconquistar un título liguero que el Bayern no levantaba desde el 23 de junio de 2019. Es decir, que la afición bávara ha tenido que esperar 1.818 días para ver a su equipo levantar una liga, que antes habían conquistado Alba Berlín y Ratiopharm Ulm.
Una cifra muy alta, pero que encierra un halo de optimismo para los aficionados bávaros. Laso ya sabía lo que era terminar con más de 1.000 días de sequía. Lo hizo en su etapa en el Real Madrid. El vitoriano llegó al banquillo blanco entre las sospechas por su, por entonces, escaso caché y pronto demostró que el nombre no lo es todo.
Los blancos llevaban cinco años sin títulos en sus vitrinas y Laso rompió la sequía que castigaba a los de Concha Espina, que llevaba desde el 26 de junio de 2007 sin alzar un título al cielo. El 19 de febrero de 2012 los madridistas volvían a ver a los suyos ganar la Copa del Rey en el Palau y terminaban con 1699 días de travesía en el desierto.

Fue el primero de los 22 títulos que el técnico ganó en el banquillo antes de su extraña e incomprensible salida del Real Madrid en julio de 2022. Un año más tarde Laso cogía las riendas del Bayern y ya ha sumado otros dos títulos en las vitrinas alemanas, cuya afición ya sueña con que estos dos primeros títulos en su primera temporada también sea el inicio de una larga lista de trofeos.

"Ha sido una temporada que sabía que iba a ser muy difícil al principio. Primero, un entrenador nuevo, que viene de fuera, que no conoce la liga, con muchos jugadores también nuevos en el equipo, que debutaban en Euroliga, con jugadores lesionados… Todo esto puede sonar casi como excusa, pero sabía que iba a ser complicado. Nuestro inicio de liga no fue bueno, y en cambio en Euroliga fuimos capaces de ir ganando partidos y de ser bastante competitivos", apuntaba el técnico en una entrevista con Relevo el pasado mes de mayo.
Los muniqueses han cosechado el segundo doblete de su historia -el anterior fue en 2018-, tras conquistar la Copa de Alemania en febrero, elevando a 24 la cuenta de títulos de Pablo Laso en los banquillos. Un éxito atronador al que le falta el broche de los grandes resultados en la Euroliga.