Una pizza, un traje 'salvado', un paseíllo de campeón y un chárter rumbo a Málaga para celebrar la Copa que asienta a Unicaja entre los grandes

Gran Canaria.- Cuando sonó el bocinazo final en el Gran Canaria Arena todo estaba ya teñido de verde. La afición cajista llevaba ya un minuto celebrando que volvían a ser campeones de Copa. "¡El tercer título de la temporada, que se dice pronto! Escribe eso en Relevo, ¿eh?", gritaba desde la grada Víctor, un aficionado malagueño que no podía contener su felicidad, al igual que tampoco podía frenarse la celebración sobre el parqué. Abrazos, camisetas de campeones, cánticos... La pista donde acababan de ganar con convicción al Real Madrid acababa de convertirse en una auténtica fiesta. Y entre micrófono y micrófono, "¡si es que no he parado y ahora me vais a tener en rueda de prensa!", decía entre risas Ibon Navarro. Era lógico. Acababa de hacer a Unicaja campeón de la Copa ACB y, por tanto, de firmar el 3/3 en finales ganadas en lo que va de temporada.

Pero a quien no podía emplazar a la rueda de prensa era a sus aficionados. Esos que incluso volaron a Las Palmas sin entradas y que hicieron malabares para finalmente acabar consiguiendo un abono para ver la fiesta cajista... y ser partícipe de ella. Porque Ibon Navarro se fue directo a saludar y hacerse fotos con aquellos que seguían allí, más de media hora después del final, celebrando el título copero. Un paseíllo de campeón tras el que llegó a vestuarios y, como más sabe el diablo por viejo que por diablo -es lo que tiene esto ya de acumular títulos con el club malagueño-, lo primero que hizo fue quitarse rápido el traje porque... ¡a la piscina!

Hasta dos veces lo acabaron bañando en una piscina hinchable antes de salir al pasillo rumbo a la rueda de prensa y decir entre risas eso de "a mí no me van a joder un traje más". El traje esta vez estaba a salvo... como también la pizza de Kendrick Perry. Porque el MVP del torneo acabó dejando la anécdota de la jornada en ese mismo momento.

El base acompañó a Ibon a rueda de prensa, con una caja de pizza en una mano y el trofeo individual en la otra. Y nada más sentarse en la tarima para dar la rueda de prensa... mordisco a la pizza. "Perdón, tengo hambre", dijo entre risas, para luego explicar: "Después de jugar un partido así de duro, no sólo este, sino estos últimos siete días, tengo bastante hambre, así que..." y ahí su entrenador no pudo aguantarse la risa.

"Necesitaba darle un mordisco. Bromeé con mis compañeros diciendo que era por el MVP", dijo Perry. "Sushi", le contesta Ibon. "Sí, ellos me decían que sushi mejor...", replica el base. "Es más caro, pero más sano, que lo dice el preparador", le decía Ibon entre risas.

"Personalmente el MVP es algo bonito, pero se consigue gracias al grupo. Esto significa que es algo que sigo haciendo bien. Cuando pienso en mi carrera a nivel global no es secreto que he sido un trotamundos, que quería encontrar sitio donde estuviera cómodo y convertirlo en mi casa. Me ha costado tiempo encontrarlo, he tenido éxitos y fallos, pero en estos 11 años de carrera no solo he encontrado una casa en Málaga sino que hemos conseguido estos éxitos juntos", reconoció Perry antes de poner rumbo de nuevo al vestuario porque tocaba recoger las cosas ya que el vuelo de vuelta a Málaga para celebrar el título era en apenas un par de horas.

Casi a la par, de nuevo en el parqué, la jefa de prensa del Unicaja, Rosa Mariscal, acompañaba a Ibon Navarro a hacerse la pertinente foto con la copa de campeón. Y claro, al trofeo no le faltaban ni novias... ni novios. "Que me lo tengo que llevar, que nos sale el chárter ya mismo", decía la jefa de prensa, dejando a más de uno con las ganas de posar con esa copa que ya tiene grabado el nombre del Unicaja, el equipo que tras un año en el que las cosas no fueron bien en el torneo, ha vuelto a recuperar el trono. Ese que hace que ya sea el tercer título que gana esta temporada. Tres de tres, junto a la Intercontinental y a la Supercopa, para un equipo que ya está formalmente asentado entre los grandes.

"Que los aficionados lo disfruten, que disfruten de este momento", reconocía a Relevo Juanma Rodríguez, director deportivo del Unicaja. Y desde luego, es algo que van a hacer este lunes desde las cinco y media de la tarde en la capital de la Costa del Sol. Aunque bueno, eso será de forma oficial, porque la fiesta ya estaba montada en el autobús del equipo a la salida del Gran Canaria Arena rumbo a ese chárter que aterrizará de madrugada en Málaga con el equipo y ese codiciado trofeo que ya es suyo.