NCAA

El desgarrador discurso de la "villana" rival de Caitlin Clark: "Me amenazan de muerte, soy humana"

Angel Reese, gran rival de la mediática Clark, lamentó entre lágrimas en rueda de prensa el machaque que recibe en redes sociales.

Angel Reese, en rueda de prensa./AFP
Angel Reese, en rueda de prensa. AFP
Jonás Pérez

Jonás Pérez

Caitlin Clark se llevó su particular duelo ante Angel Reese para dar el puesto en la Final Four de la NCAA a Iowa frente a LSU. Más allá del encuentro en sí, se veían las caras dos jugadoras generacionales, leyendas del baloncesto universitario. Y el plano mediático ya había encasillado a ambas. A Clark en el papel de ángel, una tiradora total que hace disfrutar al público y que marcará diferencias durante más de una década en los Estados Unidos. A Reese como el demonio de esta historia, la villana. Sin embargo, este encasillamiento a la derrotada de la madrugada de este martes le ha pasado factura.

La pasada campaña, LSU logró el título universitario con Angel Reese como principal estrella. Ganó en la final precisamente a Clark y pasó a la posteridad con un gesto a esta a lo John Cena: "No puedes verme". Fue el encuentro de baloncesto universitario femenino más visto de la historia y aquella escena, señal de la rivalidad entre ambas jugadoras, fue una auténtica bomba mediática.

Desde entonces, la rivalidad entre ambas es carne de miles de comentarios en redes sociales, un nido de odio que Angel Reese, la señalada como villana, ha vivido muy de cerca, como desveló tras lo que pudo ser su último partido en la NCAA: "Tengo un gran sistema de apoyo. Tengo mi ciudad natal. Tengo a mi familia que me apoya. En realidad no puedo hablar de las cosas porque intento ignorarlas y mantenerme fuerte. He pasado por muchas cosas. He visto tantas cosas. Me han atacado muchas veces, me han amenazado de muerte".

Visiblemente emocionada, Angel Reese continúa su discurso: "Me han sexualizado. Me han amenazado. He pasado por muchas cosas y siempre me he mantenido fuerte. Intento mantenerme fuerte por mis compañeras de equipo, porque no quiero que me vean abatida y que no esté ahí para ellas. Quiero que siempre sepan que sigo siendo humana. Todo esto ha pasado desde que gané el Campeonato Nacional. Y el otro día dije que no he tenido paz desde entonces, y es una mierda, pero aún así no cambiaría".

Un calvario que nace de una rivalidad deportiva con Caitlin Clark que ha llegado demasiado lejos para aquellos que no saben distinguir entre la competición y el respeto: "Siempre voy a dejar esa marca, y ser quien soy, y mantenerme en eso. Y espero que las niñas que me admiran puedan inspirarse en mí". Entonces, les manda un mensaje: "Espero que no sea tan duro, con todas las cosas que se te vienen encima, pero sigue siendo quien eres, sigue levantándote cada día, sigue motivada, sigue siendo quien eres, sigue siendo tú. No te eches atrás y ten confianza".

Una rivalidad con futuro

Mientras Clark ya se ha declarado elegible para el Draft de la WNBA, Angel Reese todavía no ha tomado la decisión final. Sea como fuere, la de Iowa será la indiscutible número 1. La de LSU tiene todavía hasta el 15 de abril para presentar su candidatura y pide calma: "Tomaré una decisión cuando esté lista". De momento, las proyecciones la sitúan en octava elección, para las Chicago Sky. Sus números ante Iowa (17 puntos, 20 rebotes, 4 asistencias, 3 tapones y 2 robos) bien pueden ser una señal de todo lo que la jugadora está dispuesta a ofrecer en la mejor competición de baloncesto femenino del planeta.

Caitlin Clark lanza ante Angel Reese. REUTERS
Caitlin Clark lanza ante Angel Reese. REUTERS

Al otro lado del charco, dudan de su capacidad ofensiva, aunque sí consideran que su defensa y potencial reboteador está a la altura de las mejores jugadoras del planeta. Si da el salto, a buen seguro, se reencontrará con Caitlin Clark, en lo que es ya una de las rivalidades deportivas más populares de todo Estados Unidos.

"No creo que la gente se dé cuenta de que no es personal. Una vez que salimos de las canchas, si la veo caminando por la calle es como: 'Oye, chica, qué pasa, pasemos el rato'. Creo que la gente simplemente se lo toma como si nos odiáramos. Caitlin Clark y yo no nos odiamos. Quiero que todos entiendan eso. Es un juego competitivo, una vez entró en las líneas de la cancha, no hay amigas. Voy a decirle tonterías. Voy a hacer todo lo que sea necesario para meterme en tu cabeza", contó en la previa del mediático enfrentamiento.

La fortaleza mental de Reese le lleva a tomar con naturalidad la asignación de los roles: "Está bien. Asumiré el papel de villana. Recibiré el golpe por ello, pero sé que estamos haciendo crecer el baloncesto femenino. Si esta es la forma en la que lo vamos a hacer, pues esta es la forma. Te guste o no", cierra. Sin embargo, tras perder ha estallado. Con una actitud u otra, cada jugadora es humana, aunque tantas veces se olvide desde el anonimato al otro lado de la pantalla...