Dwayne Bacon, un sinfín de polémicas en Panathinaikos y la amenaza de "romperle las piernas"

Si uno lee el nombre de Dwayne Bacon la palabra 'polémica' casi que viene automáticamente a la mente. El hasta ahora escolta estadounidense de Panathinaikos ha estado envuelto en un sinfín de situaciones que no lo dejan en muy buen lugar. De la fiesta con Mike James tras el partido de Euroliga ante el Mónaco, en mitad de una semana con doble competición -martes y jueves- hasta la trifulca con su compañero de equipo Lefteris Mandzoukas, sin olvidar la peineta que hizo al Buesa Arena. La actitud mostrada por el escolta esta temporada terminó por romper su vinculación con el conjunto griego hace sólo unos días y, ahora, ha querido defenderse asegurando que recibió amenazas hasta por parte del club.

El presidente del Panathinaikos, Dimitris Giannakopoulos, anunció el fichaje de Ergin Ataman como técnico para la próxima temporada y eso que la campaña actual todavía no ha terminado. Sin embargo, esta noticia quedó algo diluida cuando sólo unos días después, esta misma semana, se conoció que Dwayne Bacon era apartado del equipo. Aunque al principio no se conocían los motivos, finalmente salió a la luz que esta decisión había sido tomada a raíz de un incidente que el escolta estadounidense había tenido con su compañero de equipo Lefteris Mandzoukas, algo que fue la gota que colmó el vaso (y la paciencia) de un Panathinaikos que tomó la decisión de cortarlo como jugador.

Este domingo, a través de un directo en Instagram Bacon ha querido defenderse y ha denunciado que recibió presiones y amenazas hasta el punto de asegurar que le dijeron que le "romperían las piernas" tras una derrota.

Según su versión, tuvo un comportamiento violento con su ya excompañero Mandzoukas porque este le habría provocado. Siendo así la justificación que da de su actitud, aunque no es la única. Y es que también ha intentado justificar aquella falta disciplinaria que cometió al salir de fiesta con Mike James en mitad de una doble jornada de Euroliga. Panathinaikos y Mónaco se midieron un martes y ambos tenían otra cita europea el jueves de esa semana. Sin embargo, se fueron de fiesta tras aquel partido y fueron castigados por ello. Eso sí, según Bacon, "no bebió" aquella noche e incluso asegura tener "pruebas" que lo demuestran.

Por otro lado, también ha denunciado, según recoge Eurohoops, que vivía un ambiente duro e incluso el club le llegó a poner seguridad en los alrededores de su casa en Atenas. Mientras que el jugador mantiene que esto era para su control y evitar que saliera de casa, desde club habrían asegurado que fue el propio Bacon quien pidió tenerla ya que, supuestamente, habría recibido amenazas por sus salidas nocturnas.

Pese a ello, el jugador insiste en que recibió un trato hostil, con amenazas incluso dentro del vestuario en las que hasta le llegaron a asegurar que le "romperían las piernas" si salía de casa.

"Promedié 17 puntos por partido, lo máximo del equipo. No creas todo lo que escuchas. He pasado por muchas situaciones raras, así que no me importa irme temprano a casa ya que todavía recibo mi dinero. Es una situación de ganar-ganar. Dile a los periodistas griegos que escriban esto. Pusieron cuatro guardias de seguridad afuera de mi casa y les dijeron que me rompieran las piernas si me iba. Todo porque perdimos el partido como si fuera culpa mía, no de todo el equipo. Vinieron al vestuario y dijeron estas cosas, amenazándonos, pusieron guardias de seguridad afuera de mi casa, la de Paris Lee y la de Derrick Williams. Pero yo estaba ahí, jugando hasta con lesiones", ha asegurado el estadounidense durante su directo de Instagram tras confirmar que está fuera del club griego. Así, Bacon suma otra polémica más a una larga lista que parece no tener fin.