EUROLIGA | REAL MADRID 98 - PARTIZAN 94

El Real Madrid traslada la mística del Bernabéu a la caldera del WiZink

El Palacio no defrauda y presenta el mejor ambiente de la temporada lleno de personalidades como Shai Gilgeous-Alexander, los Hernangómez o Vinicius Jr, entre otros.

Ambiente en el WiZink Center para este quinto partido entre Real Madrid y Partizan. /GETTY IMAGES
Ambiente en el WiZink Center para este quinto partido entre Real Madrid y Partizan. GETTY IMAGES
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Siete de la tarde, calle Fuente del Berro. La Policía Nacional y la seguridad privada ya tiene montado todo el dispositivo de seguridad en los aledaños de un WiZink Center que hace ya unos días que colgó el cartel de "lleno". Faltan aún tres horas para el partido, pero los autobuses de los dos equipos están a punto de llegar y ya hay algún que otro aficionado por la zona. Pero no por dónde llegarán los equipos, sino en los bares. Por eso, la timidez sería el adjetivo perfecto para tildar lo que fue tanto la llegada del Real Madrid al Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid como la que, diez minutos después, haría el Partizan.

Algún que otro aficionado con cuentagotas hace algún cántico, tanto blanco como serbio. Pero poca cosa. Las fuerzas se están guardando para después y eso se nota. En la plaza de Felipe II sí que hay algo más de color... pero negro. Ahí se han concentrado los aficionados del Partizan -como ya venían acostumbrando en lo que ha sido esta serie- y de vez en cuando sí que hay algún cántico hacia los suyos. Pero muy lejos de lo vivido hace dos semanas en este mismo enclave y más aún de lo que se vivió hace una en Belgrado.

El ambiente es distinto. Y quizá algo más frío del que uno pudiera pensar de cara a un quinto partido. Al menos, hasta que uno entra al WiZink. Ahí la cosa cambia y todo es más caliente. Y no precisamente por el fuego que acompaña la presentación de un Real Madrid que, como ya venía avisando tanto Chus Mateo como el propio Rudy Fernández, necesita del Palacio hoy más que nunca y dejando atrás los fantasmas del pasado -concretamente, del último jueves que se dieron cita aquí-. Y este no falla.

Así ha sido la presentación del Real Madrid en este quinto partido de la eliminatoria ante Partizan. RELEVO/NOELIA GÓMEZ MIRA

Los cánticos arrancan cuando todavía quedan más de cinco minutos para el inicio. Y no, no suele ser algo habitual. Pero, como ya se ha dicho, lo de hoy es diferente a todo. Porque es, valga la redundancia, un todo en sí mismo. O eso o nada. Así es el baloncesto y así es esta eliminatoria de la Euroliga que ha tenido, desde luego, absolutamente de todo. Por eso, nadie se la quiere perder.

Desde personalidades como la actriz Amaia Salamanca hasta su tocaya, pero con 'y', Amaya Valdemoro. O el jugador del Madrid de los pies Vinicius Jr, que sólo 24 horas antes estaba en plena faena ante el Manchester City y que bien podría decirse que trasladó hasta el Palacio esa mística del Bernabéu. O incluso los hermanos Hernangómez (Willy y Juancho) y Dontaye Draper. Y has la estrella de los Oklahoma City Thunder Shai Gilgeous-Alexander. Tampoco han faltado a la cita Emilio Butragueño, Alfonso Reyes, Andrés Miso, Ángel Gabilondo, Eli Pinedo, Iñaki de Miguel y Joan Plaza. Además de los ya habituales a pie de pista Ana Pastor y Antonio Ferreras. Ni siquiera personalidades conocidas del lado Serbio. Como Dejan Tomasevic y Nikola Pekovic, entre otros. O el jugador del Atlético de Madrid, Savic, que tampoco se perdió el segundo partido de la serie.

"Es un partido muy importante. Nosotros siempre tenemos claro que hay que estar aunque no tengamos entrada", reconoce a Relevo Branislav, un "hooligan" como él mismo reconoce del Partizan. Él, junto a alguno que otro más, se ha desplazado desde Belgrado pero verá el partido desde un bar de los alrededores del Palacio. ¿El motivo? Es sencillo: "Sólo tenía cinco entradas y éramos siete. Yo soy de los que organizan dentro de los fans y prefiero que entre mi gente a ver el partido", explica mientras enseña los cinco tickets que, efectivamente, tiene en el correo. Esa es la filosofía de vida -y baloncesto- en Serbia. La de compartir y dar antes que recibir.

Cánticos de los aficionados del Partizan antes del partido. RELEVO/NOELIA GÓMEZ MIRA

Eso sí, esa confesión de Branislav ha sido off the record... O, bueno, sin grabarse "la cara". "Te lo cuento y tú lo escribes, pero no me grabes la cara. No podemos mostrarla. Es como una norma no escrita que hay entre los hooligans desde la guerra de Yugoslavia", explica. Lo dicho: la filosofía serbia. Por eso, sus compañeros, los que sí que están dentro del WiZink -menos en número que en las dos citas anteriores- han cantado por ellos y por todos los que no han podido estar. Aunque se les escuche poco. Porque, esta vez, sí. El WiZink es de los que suman. De los que lo dejan (y lo dan) todo. Y, pase lo que pase, por primera vez esta temporada, en eso el Real Madrid de baloncesto ya ha ganado.