La llegada de Kevin Pangos instaura un nuevo 'orden' en Valencia Basket

Tres semanas después de que su nombre empezara a sobrevolar la Fonteta, ya es oficial: Kevin Pangos es el nuevo base del Valencia Basket. Un fichaje que, como ya publicó Relevo, no sólo supone un refuerzo para el equipo de Álex Mumbrú, sino que también significa una reorganización dentro de la plantilla taronja, que ya hace unos días que incorporó también a Justin Anderson.

Valencia Basket ha cerrado la primera vuelta de la Euroliga con un balance de victorias y derrotas de 9-8, ocupando la décima posición de la tabla. Lo que viene a ser puesto de playin: el torneo en el que del séptimo al décimo clasificado pelean por las dos últimas plazas del playoff. Si bien, aún queda mucha temporada y lo cierto es que el conjunto taronja ha tenido, principalmente, una fortaleza y un lastre: la defensa y el tiro exterior. Aunque este último venía dado, más que por la falta de un jugador exterior, por la falta de creación de juego colectivo. Y por eso la figura de Pangos resulta imprescindible.

El fichaje ha tardado casi un mes debido a la negociación de su salida -el acuerdo económico al que tenía que llegar con su ya exequipo para rescindir su contrato- entre el base y el Olimpia Milán. Si bien, como ya avanzó Relevo, esta última semana de diciembre era la decisiva para que finalmente se cerrase la negociación. Y así ha sido, pues se terminó de cerrar este mismo jueves. Este viernes pasó el reconocimiento médico y el acuerdo es hasta final de temporada con opción a un año más.

La realidad es que desde que empezó la temporada, el gran eje sobre el que ha girado el juego de los de Álex Mumbrú ha sido la defensa. Y por eso, con la baja de Ojeleye y de Claver -que se extenderán a 2024-, el conjunto taronja no tardó en hacerse con un refuerzo: Justin Anderson. Y tras su debut este jueves ante el Bayern de Múnich de Pablo Laso, lo cierto es que no ha tardado en ilusionar a la afición taronja.

El alero, que puede caer al puesto de '4', estuvo en pista 19:46 minutos en los que anotó ocho puntos, cazó un rebote y dio una asistencia. Y para llevar sólo un par de días entrenando con el equipo, lo que se vio de él invita a pensar bien. Su contrato es de sólo 45 días -es extracomunitario y llega para suplir la carencia del equipo por las lesiones-, pero con la opción de ser prorrogable.

Eso sí, la gran baza para la segunda vuelta de la competición continental de Álex Mumbrú es sin duda Kevin Pangos… Y Chris Jones. Porque sí, aunque Jones no sea una nueva incorporación, sí que se le verá ocupando un nuevo rol con la llegada del base canadiense -en su caso, no ocupa plaza extracomunitaria al tener pasaporte esloveno- y, de hecho, formará pareja en pista con él.

La apuesta de Mumbrú es pasar al Jones al puesto de '2' para así liberarlo de la creación de juego y que pueda aportar más desde el tiro exterior. Aunque, todo sea dicho, si en alguna ocasión se necesita reforzar la posición de base, también pueda hacerlo. Mientras que Pangos formaría pareja de bases con Stefan Jovic, con el fin de tener a dos jugadores que sean creadores puros para así habilitar con más facilidad al resto de jugadores. De este modo, la llegada de Pangos supone una revolución dentro de la plantilla taronja con una reconversión de piezas de la que espera sacar rédito Valencia Basket.