EUROLIGA

Predrag Danilovic cuenta en primera persona cómo se ganó la primera Euroliga: "Djordjevic y yo no nos hablábamos"

El actual presidente de la federación serbia habla sobre su etapa como jugador, la diferencia entre la Euroliga y la NBA y su pasado en Fuenlabrada.

Predrag Danilovic y Djordjevic con la camiseta del Partizan./Partizan
Predrag Danilovic y Djordjevic con la camiseta del Partizan. Partizan
Guillermo García

Guillermo García

Sin tanto romanticismo como la generación de los Petrovic, Kukoc y compañía que cerraron la etapa de última gran Yugoslavia y sin la repercusión de quienes llegaron después a una NBA más global como pudo ser Stojakovic. A Predrag Danilovic (Sarajevo, 1953) le tocó bailar entre dos aguas. Y no se ahogó.

Junto a Djordjevic y Bodiroga sacó a flote el baloncesto yugoslavo en plena guerra de los Balcanes. Un conflicto que le obligó a 'emigrar' a Fuenlabrada, desde conquistó la primera edición de la actual Euroliga con el Partizan de un joven Obradovic. Lo hizo siendo el mejor jugador de una final que se decidió en el último segundo con un tiro de Djordjevic que enmudeció al Joventut de Badalona.

Danilovic se acostumbró a ganar y lo hizo también con una Virtus de Bolonia a la que lideró hasta convertirla en la escuadra más temida del Viejo Continente. Su facilidad ofensiva le llevó a ser un extraño en una NBA que todavía no había abierto sus puertas de par en par al baloncesto europeo. Y desde ahí, con más de 15 puntos de media, decidió volver a Europa para seguir dominando antes de una retirada que sorprendió a propios y extraños. De eso han pasado 23 años. Más de dos décadas en las que no ha perdido el contacto con la cancha.

¿Qué hace ahora Predrag Danilovic?

Llevo 7 años como presidente de la Federación serbia de Baloncesto. Un honor para mi.

Buen momento para llevar las riendas del baloncesto plavi.

Y no sólo por la plata conseguida en el pasado Mundial con una selección que no tenía jugadores como Micic, Jokic o Kalinic. También por la generación de talento en las selecciones inferiores, que están saliendo y nos hace ser optimistas. Gente como Topic, que apunta muy alto.

Eso en el presente. Ahora toca viajar al pasado, a la época en la que usted empezó en el Partizán de Belgrado.

De eso ya hace mucho tiempo. Era finales de los 80 y los 90. Empecé muy joven y tuve una buena carrera. No muy larga, pero buena. Era otro baloncesto. En los 90 teníamos otra forma de jugar. Pero no me gusta comparar una era con otra, aunque sí creo que antes había más calidad.

Predrag Danilovic. Efe
Predrag Danilovic. Efe

Fue una época de sentimientos encontrados. La tristeza de la guerra de los Balcanes, la alegría de la Euroliga conquistada con el Partizán, su exilio en Fuenlabrada. Ahora es el equipo blanquinegro el que acoge a otro conjunto en esa situación como es el Maccabi. ¿Cómo fue aquella experiencia en Fuenlabrada?

Fue increíble. Para mi la gente de Fuenlabrada siempre estará en mi corazón. Es un lugar muy especial para mí. Nos sentimos muy queridos y acogidos por la ciudad de Fuenlabrada. Tengo amigos allí. Mucha gente que ni siquiera conocía el nombre, pero que nos hicieron sentir como en casa. Quiero mucho a la gente que conocí entonces. Nos mostraron un enorme respeto.

Así fue el recibimiento al Fuenlabrada en Belgrado.Partizan

Tuvieron que hacer de tripas corazón y seguir jugando en mitad de la guerra. ¿Cómo se lleva esa dicotomía?

La guerra fue un episodio muy triste y prefiero dejarla en el pasado. No me gusta hablar de eso. La cancha y Fuenlabrada fueron un refugio para superar las adversidades y la tristeza del conflicto. No sabíamos dónde estaba Fuenlabrada, pero enseguida nos aceptaron como si fuéramos de allí de toda la vida. Sin ellos no habríamos podido jugar. Esa temporada fue magia.

Y para rematarla se ganó el título de la Euroliga con aquel famoso tiro de Djordjevic frente al Joventut. ¿Cómo era ese equipo?

Pues fíjate, ese año en el que ganamos la Euroliga Djordjevic y yo no nos hablábamos.

¿Cómo?

Sí. No nos hablamos durante un tiempo. Era muy amigo mío y después ha vuelto a serlo. Tengo una gran relación con él, pero durante aquel año no nos hablamos.

¿Por qué?

No lo recuerdo. Éramos muy jóvenes y seguramente fue por alguna tontería, pero sinceramente no lo recuerdo.

¿Y cuál fue su reacción cuando metió aquel tiro en la Final Four de Estambul que les dio la victoria? ¿Recuerda la cara de los jugadores del Joventut?

Ese tiro nos cambió la vida a todos. Recuerdo algunas caras de jugadores del Joventut. Creo que era la de Ferrán Martínez. Pero esto es deporte y al final gana uno. Ellos jugaron una gran final y también metieron algún tiro muy difícil como fue el de Tomás Jofresa instantes antes. Fuimos campeones de Europa y eso es algo que es para siempre.

Ese mismo año recibió la llamada de los Golden State Warriors, pero decidió quedarse en Europa, en Bolonia. ¿No tuvo oportunidad de jugar en España?

No, nunca. Bolonia me ofreció todo lo que necesitaba en ese momento. Además ahí estaba uno de mis ídolos como era Roberto Brunamonti. Además nunca tuve una oferta desde España.

Y luego llegó la NBA en una época en la que todavía no había muchos jugadores europeos.

Éramos 7 u 8 en aquella época. Fue una gran experiencia. Fueron dos temporadas en las que promedié más de 12 puntos por partido. Amo la NBA. Fue más fácil para mí jugar ahí que en Europa. La experiencia fue maravillosa y jugué contra grandes jugadores como Michael Jordan. Me encantaba jugar ahí, pero el estilo de vida que se llevaba no era para mí. Y eso que Miami tenía mucha vida, pero yo prefería el estilo de vida europeo.

"Nunca tuve una oferta desde España"

Predrag Danilovic

Nikola Jokic, Giannis Antetokounmpo, Luka Doncic

Son los mejores jugadores del mundo ahora mismo.

[Risas] Bien, pero no iba por ahí mi pregunta. Son tres jugadores que han dicho que ahora mismo es más dura la Euroliga que la NBA. ¿A usted se lo pareció?

Para mí era más fácil jugar en la NBA que en Europa y te lo explico. A mi en la Euroliga me defendían dos o tres jugadores. En la NBA no. En la NBA sólo me defendía una persona, entonces sólo tenía que irme a la esquina y tirar. Era más sencillo. Era una liga donde se defendía menos duro que en Europa. Quizás sólo en playoffs.

"Para mí era más fácil jugar en la NBA que en Europa y te lo explico. A mi en la Euroliga me defendían dos o tres jugadores. En la NBA no"

Predrag Danilovic

Pero usted no siempre fue un gran tirador. Al menos eso decía Obradovic, que decía que tenía una mano de piedra.

Eso no es verdad. [Risas] Lo que pasa es que tenía una mecánica rara. En mi etapa de juvenil me quedaba tras los entrenamientos para mejorarla. Hacía más de 1.000 tiros después de cada entrenamiento. Y mejoré. Luego ya como profesional me quedaba, pero 'sólo' hacía 200-300 tiros después de cada entrenamiento.

Fue un anotador excelso, pero decidió retirarse pronto.

Sí. Sólo jugué en cuatro equipos y me retiré siendo uno de los mejores jugadores en ese momento.

¿Y por qué dijo adiós tan pronto?

Porque para mi es importante que la gente te recuerde siendo grande, en un buen momento. Y no cuando ya empieza el declive.Nunca me he arrepentido de esa decisión. Tuve una gran carrera. Es tan simple como eso.

"Para mi es importante que la gente te recuerde siendo grande, en un buen momento. Y no cuando ya empieza el declive"

Predrag Danilovic

¿El rival más duro al que se enfrentó?

En la NBA, Michael Jordan. Y en Europa, Isma Santos. Era un gran defensor.

Y en cuanto a los entrenadores que tuvo, ¿se queda con alguno?

No podría. Me influyó mucho Dusha Vujocevic, pero he jugado para los más grandes: Zeljko Obradovic, Ettore Messina y Pat Riley. Ellos me ayudaron a formarme como persona y a madurar.

Hablaba antes de Jokic como uno de los mejores. ¿Espera que esté en los Juegos?

Sí. A él y a todos. Tenemos una gran oportunidad.

Y no sólo en el baloncesto. El deporte serbio vive un gran momento, ¿cuál es el secreto?

Ninguno. Mucha gente me lo pregunta y yo no lo sé. De verdad. Lo que pasa es que en nuestro carácter todo es a vida o muerte. No hay término medio. Es el todo o nada y así nos lo tomamos. Esa puede ser la única explicación a nuestra competitividad.