REAL MADRID 93 - BAYERN DE MÚNICH 71

Una sobredosis de cansancio lleva al Real Madrid a descubrir la solución que siempre tuvo delante: "Cuando entendemos que podemos jugar dos velocidades..."

Chus Mateo mantiene que ahora llega "el momento más duro del año" y que van con la mentalidad ganadora: "Quedan cinco victorias para ser campeones de la Euroliga".

Chus Mateo da indicaciones a los jugadores del Real Madrid durante el duelo ante el Bayern. /GETTY IMAGES/THIAGO MORA
Chus Mateo da indicaciones a los jugadores del Real Madrid durante el duelo ante el Bayern. GETTY IMAGES/THIAGO MORA
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

Pasillos internos del Movistar Arena, unos quince minutos después del bocinazo final que daba al Real Madridel último billete para los playoffs de la Euroliga. Si el pasado martes, lo que se escuchaba era la celebración del Paris Basketball dentro del vestuario, esta vez era bien distinto. La victoria había sido blanca, un "alivio", como reconocía Chus Mateo, pero toda la energía blanca se había quedado sobre el parqué. "Este calendario y los retos que tenemos por delante no permiten mucha celebración. Obviamente, estamos contentos porque hemos hecho un partido sólido, pero toca preparar lo que viene", admitía por su parte Alberto Abalde. Y no se equivocaba.

En menos de 48 horas -el domingo a las 12:30 horas- tienen cita en la Liga Endesa. Y el peaje de haber tenido que disputar los dos partidos del playin también pasa factura. "Estoy cansado y hasta un poco vacío hasta este momento del esfuerzo que hemos tenido que hacer este año para conseguir el objetivo que era llegar a playoffs", decía el entrenador blanco. Pero la realidad es que si algo ha demostrado el Real Madrid es que, precisamente, en esas situaciones donde parece que las fuerzas no le llegan, acaba resurgiendo como equipo. Y a eso precisamente es a lo que se aferraron para cumplir con el objetivo que se habían marcado, unos playoffs de la Euroliga a los que, ahora, aspiran directamente a ganar. Y esa es la mentalidad que ha sacado el Real Madrid del que ha sido el primer playin de su historia y que ahora tendrá que hacer valer ante el Olympiacos.

Alberto Abalde tras la victoria. N.G.M.

"Este año hemos tenido que pelear un poco más, incluso hemos tenido dos partidos más por el hecho de no clasificarnos matemáticamente a los playoffs a pesar de haber hecho un esfuerzo enorme de final de temporada regular, que ganamos los seis últimos partidos, pero aun así no valió para entrar por las matemáticas. Asumimos, aceptamos y respetamos las normas del juego que nos han llevado a jugar dos partidos a vida o muerte contra dos equipazos", decía el técnico, que tras reconocer que el martes el Paris Basketball fue merecedor de la victoria, fundamentó la clave del éxito de este viernes en algo tan simple, pero certero, como el jugar en equipo. Y lo que esta palabra conlleva.

"A uno de ellos no pudimos vencerle el martes porque realmente mereció ganar, y hoy hemos sido muy buen equipo, jugando como equipo, defendiendo muy bien, entendiendo perfectamente sus fortalezas, sus balones, es un equipo que desde la línea de tres puntos es letal, es el equipo que más tiraba de tres y el que más metía, con el segundo porcentaje con todo ese volumen de anotación. Creo que lo hemos entendido muy bien, hemos estado realmente serios y muy bien ofensivamente hablando, porque defensivamente ya lo veníamos haciendo, pero hoy hemos sido capaces de compartir muy bien el balón lo que nos ha hecho conseguir tiros abiertos y muy buenos porcentajes, hemos estado muy centrados en convertir esos tiros abiertos que generábamos y ver 24 asistencias en la estadística me alegra", dijo. Y no se equivocaba.

Chus Mateo sobre el jugar en equipo y el objetivo del Real Madrid. N.G.M.

Los números del Real Madrid ante el Bayern se fueron a dobles dígitos en el caso de cinco jugadores -tanto en puntos como en valoración: Mario Hezonja, Dzanan Musa, Alberto Abalde, Facu Campazzo y Edy Tavares-, ganaron el rebote, dieron más asistencias y superaron en triples y porcentaje de anotación (15/28 con 53,6% frente a 12/30 y 40%) a uno de los equipos más eficaces en este sentido de toda la Euroliga. Y lo hicieron con jugadas como la del mate de Edy Tavares en el segundo cuarto para poner el 41-26 en el marcador, en la que fue la circulación de balón y la paciencia colectiva la que permitió que se ejecutase.

"Esto supone que se juega como equipo y cuando entendemos que podemos jugar dos velocidades, una de contraataque y otra de 5x5 en medio campo y elegir bien esos buenos tiros en el 5x5 a medio campo, metemos muchos más. Estoy contento, cansado, por esta liga regular que ha sido dura, mis jugadores también están cansados, pero vamos a ir a por las cinco victorias que nos quedan para ser campeones", dijo sin titubear Chus Mateo. Y es que si algo tiene claro el Real Madrid es que, precisamente, el hecho de poder ir casi de underdogs -y eso que con el ADN del club casi suena impensable esta etiqueta- por la forma en la que se ha dado la temporada y su entrada en los playoffs es, a nivel mental, un arma a favor para, ya no solo pelear por el billete a la Final Four de Abu Dabi, sino por el título continental.

"Que nadie dude que ahora, que hemos salido reforzados mentalmente y con ganas de guerra y de pelear y luchar por el objetivo que es llegar lo más alto posible, este Real Madrid aunque pueda parecer que estamos cansados, mañana vamos a recuperarnos y vamos a estar otra vez vivos para enfrentarnos en un playoff que va a ser como siempre durísimo", dijo el técnico, que también dejó un recado a sus jugadores: "Espero y deseo que seamos capaces de entender que ahora llega el momento más duro del año, si antes ha sido duro, ahora más y que la mentalidad del equipo esté preparada para afrontarlo". Porque está claro que cuando consiguen usar la presión a su favor para plasmar ese juego colectivo que, como este viernes, saben hacer, el Real Madrid 'de siempre' aparece y, con él, ese equipo capaz de aspirar a cualquier cosa. Y eso en Grecia también lo saben.