BALONESTO

Jayson Granger denuncia la pasividad del baloncesto uruguayo ante el racismo

El jugador, exACB, ha roto su silencio ante el continúo ataque de las aficiones y de sus rivales con insultos como "negro cagón" o "sos mío mono".

Jayson Granger, cuando jugaba en España. /AGENCUAS
Jayson Granger, cuando jugaba en España. AGENCUAS
Mateo López de Prado

Mateo López de Prado

Jayson Granger está cansado de insultos racistas. El jugador de Peñarol ha denunciado la pasividad y la inactividad de la Federación Uruguaya de Basketball, instituciones judiciales y de los representantes del estamento arbitral.La reivindicación del exACB se ha producido durante el transcurso de la final de la Liga uruguaya entre Aguada y Peñarol por la continúa ristra de faltas de respeto y de odio que se le transmiten desde las gradas en los partidos.

El protagonismo del deporte y de la competición en este final de temporada en el baloncesto uruguayo ha pasado a un segundo plano, ya que esta no es la primera vez que sucede. El inicio se produjo con un incidente, hace una semana, por un encontronazo entre Jayson Granger y el jugador del Aguada, Santiago 'Pepo' Vidal.

Lo ocurrido fue, que tras varias desavenencias durante el encuentro y unas palabras al oído de Vidal, Granger respondió con el gesto del revólver con la mano dos veces, apuntándolo y acabó con el dedo pulgar de la mano derecha pasándoselo por el cuello, una clara amenaza de muerte. "Está claro que mis gestos el otro día no fueron los adecuados y por ello pedí perdón dos veces, pero vienen por algo: por le cúmulo de racismo y odio al que me he visto sometido en ciertas canchas como la de ayer, de forma reiterada e injusta. Racismo que, lamentablemente, viene también de boca del propio jugador rival, como así me sucedió", según detalló el jugador.

Tras el acontecimiento del partido anterior, el jugador de Peñarol, harto, ha denunciado y ha salido a reivindicar la reiterada actitud racista hacia su persona y su no prohibición. " Una vez más vuelvo a sufrir el racismo y el odio gratuito de una cancha llena en un espectáculo deportivo y me veo obligado a hablar. Negro cagón a voz de grito de todo un estadio, más otros insultos racistas de todo tipo son los que anoche sufrí de nuevo en Uruguay".

Su propio país de origen descarga ira y desprecio a su persona como si fuera común, según transmite Granger en el comunicado, "Esto al parecer acá se tolera y se ha naturalizar de tal punto que no se da la mínima importancia, cuando en cualquier otra parte del mundo se tomarían medidas al respecto inmediatamente. Acá nadie hace nada, se mira para otro lado".

Desesperado por la situación que tiene que vivir partido tras partido ha intentado desde su mano tomar medidas, pero no ha encontrado respuestas, ni apoyos desde ninguna institución deportiva, "Suelo transmitir a la terna arbitral, pero de los que únicamente recibo sonrisas irónicas y comentarios como: no lo oí o no pasa nada, seguí jugando. También lo transmití al Juez y a la Federación, pero al parecer no lo consideraron de importancia, comparado con mis acciones y mis gestos".

Para terminar, Jayson Granger ha querido mostrar su tristeza y desprotección por ver a tantas personas de varias edades con esas palabras tan despectivas e irrespetuosas dirigidas hacia él: "Me siento profundamente triste y desprotegido de ver a niños espectadores junto a sus padres en mi propio país llamando a alguien negro esclavo. Me siento triste también por cómo he llegado a actuar, ya no me reconozco. En 18 años de profesional, jamás me expulsaron de un partido, ni tuve problema con ningún rival hasta llegar a mi propio país y eso me duele".