El Baskonia apuesta por el físico en su renovada plantilla
Tras la pérdida de Darius Thompson, el Baskonia ha rodeado a Markus Howard de una plantilla muy física y con experiencia en la Liga Endesa para tratar de mejorar los resultados de la 22/23.
El Baskonia ha vuelto a afrontar un verano de cambios en su plantilla. El conjunto de Joan Peñarroya, uno de los equipos más destacados durante el curso de la 22/23, no terminó logrando sus objetivos en los momentos decisivos de la campaña y ha decidido cambiar ligeramente el rumbo a la hora de planificar lo que va a ser su próxima campaña.
Los vitorianos han perdido algunas piezas de las que no deseaban desprenderse. La más destacada en este aspecto ha sido Darius Thompson que ha puesto rumbo al Anadolu Efes después de haber usado una de las cláusulas de su contrato para poder poner rumbo a Turquía y ser el sustituto de Vasilije Micic. También se ha marchado del Baskonia un Rokas Giedraitis que estaba asentado en la rotación vitoriana y que ha decidido marcharse a uno de los agitadores del mercado de fichajes: el Estrella Roja. A sus salidas se han sumado algunas marchas de jugadores que no terminaron des responder a las expectativas como Daulton Hommes, Steven Enoch o Max Heidegger. Y los sustitutos en la mayoría de los casos han tenido un denominador común.
Apuesta por el físico para rodear a Markus Howard
Con la marcha de Darius Thompson, Markus Howard será la próxima temporada el principal referente del Baskonia en el apartado ofensivo. Un jugador determinante en ataque desde su lanzamiento exterior que pasó problemas durante algunos momentos de la temporada por los problemas en defensa, las faltas personales y una cierta irregularidad. El Baskonia ha buscado rodear a su estrella con piezas notables en el apartado físico y necesitados de poco balón en ataque con las llegadas de jugadores como Chima Moneke, Khalifa Diop o Codi Miller-McIntyre.
Moneke puso rumbo a la NBA tras su brillante temporada en el BAXI Manresa y si bien no terminó de encajar en su regreso con el AS Mónaco es un jugador con capacidad para lanzar desde la larga distancia, asegurar el rebote defensivo y superar físicamente a cualquiera de sus pares. La apuesta en el ala-pívot, sumado a la continuidad de Matt Costello y el tiro exterior de Dani Díez completan un puesto de 4 muy completo. Más físico será si cabe todavía la posición de 5. Si Maik Kotsar ya fue una de las sorpresas más agradables del pasado año para el Baskonia, la llegada de Khalifa Diop asegura un cupo de calidad y un físico dominante para los de Peñarroya las próximas temporadas. Un experto finalizador al que sus compañeros podrán surtir de balones en las continuaciones cuando las defensas presionen a los tiradores.
Tampoco bajará el nivel físico en la posición de alero con todos los jugadores que pueden rotar ahí superando los 2 metros. La incorporación de Nikos Rogkavopoulos es una apuesta de futuro tras su buen desempeño en la liga turca y en esta posición se proyecta Tadas Sedekerskis como uno de los hombres de confianza de Peñarroya. A ellos se sumaría Sander Raieste e incluso Dani Díez dependiendo de cómo quiera alternar las posiciones el entrenador.
Diferente será la apuesta en la rotación de base donde ha llegado la verticalidad y electricidad de Nico Mannion. El italiano regresó de la NBA para tener minutos en la Virtus pero en ninguna de las dos campañas ha gozado de oportunidades por parte de Sergio Scariolo. Debe llegar a Vitoria como una de las referencias ofensivas, aunque dependerá de cómo cierre la plantilla el Baskonia en esta posición. McIntyre es una apuesta a caballo entre la posición de base y escolta, pero siendo un jugador potente en el apartado físico que puede ayudar en ambas situaciones. Si aterriza otro base la plantilla terminaría siendo de 13 jugadores como ya lo fue el pasado año con algún descarte... pudiendo ser ese fichaje incluso Pierria Henry cuya situación sigue estando en el aire y estando sin jugar desde el mes de enero. Henry no solo añadiría talento extra en la rotación, también pondría más físico y defensa al servicio de Peñarroya. Una apuesta clara por ser un equipo rocoso y reconocible tanto en la Euroliga como en la Liga Endesa.