El desplome en bolsa de Grifols puede provocar un terremoto en el histórico Joventut de Badalona
La farmacéuica, que salvó a la Penya de su desaparición en 2018, cae en bolsa tras un informe que le acusa de manipular sus cuentas para reducir su deuda.

El mundo de las finanzas amanecía hoy con un auténtico terremoto en el parquet bursátil nacional tras el informe sobre el grupo Grifols publicado por Gotham City Research, el fondo bajista que destapó el fraude de Gowex. Un análisis en el que la firma de análisis bursátil habla de manipulación de cuentas que pueden provocar que el capital del grupo farmaceútico equivalga "a cero".
Este informe afirma que los accionistas de Grifols, debido a participaciones minoritarias, poseen acciones de una entidad deficitaria que está "muy endeudada". "Creemos que Grifols manipula la deuda declarada y el resultado bruto de explotación (Ebitda) para reducir artificialmente el apalancamiento a 6x, cuando creemos que está más cerca de 10x-13x. Si estamos en lo cierto, entonces el capital de Grifols equivale a cero", ha detallado Gotham en un informe que ha provocado que las acciones del grupo farmacéutico se desplomen en un 40% de su valor.
Grifols ha respondido sin paliativos a las acusaciones a través de un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores en el que habla de "informaciones falsas y especulaciones" y se define a sí misma como una "empresa comprometida con la transparencia, integridad y conducta ética". "Negamos y rechazamos categóricamente cualquier acusación de prácticas contables o de información erróneas de nuestros estados financieros consolidados".

Lo cierto es que el informe ha provocado una cascada de reacciones tanto en el mundo de las finanzas y su onda expansiva ha llegado al mundo del deporte. Concretamente al baloncesto, que mira expectante a Badalona para ver la reacción de un histórico como el Joventut de Badalona, club del que la familia Grifols es accionista. De momento la Penya no se ha pronunciado sobre la información que atañe a su máximo accionista y a la empresa que salvó al club de la desaparición en 2018.
Así salvó Grifols al Joventut
La Penya fue una de las miles de víctimas de la crisis económica provocada por la caída del mercado inmobiliario en 2008. El conjunto verdinegro recurrió a este sector para conseguir fondos para seguir compitiendo con equipos más grandes, como había hecho siempre. Sin embargo, la apuesta no salió bien y en 2012 el club tuvo que entrar en concurso de acreedores.
A pesar de que todo parecía solucionarse en marzo de 2017, apenas un año más tarde los acuerdos para financiar su deuda quedaron en papel mojado. El club parecía sentenciado. Necesitaba un millón de euros para poder pagar las deudas y a sus empleados. El equipo se planteó incluso no presentarse al partido ante el Betis del 4 marzo de 2018 por no poder pagar el desplazamiento. Fueron las horas más críticas de un histórico del deporte español, que consiguió capear el temporal para salvar la temporada.

Entonces, el 7 de agosto, apareció la familia farmacéutica Grifols para salvar al Joventut. El club anunció un acuerdo con el grupo inversor Scranton Enterprises para que se convirtiera en el accionista mayoritario de la entidad dando una vida extra al Joventut.
El grupo empresarial se comprometió a cubrir la ampliación de capital del club de 3,7 millones (61.000 nuevas acciones de 60 euros cada una) con la que se resolvieron los acuciantes problemas. La inversión se hizo a través de la holandesa Scranton Enterprises, que tiene el 8,6% de las acciones de la multinacional Grifols.
Desde la entrada de Grifols, la Penya ha recuperado parte del sitio que había perdido durante la década anterior. Acuciado por sus problemas económicos, el club verdinegro no pudo acometer grandes fichajes ni retener a los valores que salían de su prolífica cantera, algo que ahora habían conseguido gracias al sustento financiero de una farmacéutica que ahora se tambalea.