La doble lotería nigeriana del Zaragoza y el premio del Real Madrid

El Casademont Zaragoza ha sido uno de los grandes protagonistas del verano en la acb. Además del 'caso Mara', los maños sorprendían con un movimiento inesperado en el mercado de fichajes tras la incorporación de Jahlil Okafor. El pívot nacido en Estados Unidos pero de origen nigeriano se convertía de la noche a la mañana en una de las grandes sensaciones de la Liga Endesa. Y ahora tendrá que empezar a justificar todo ese 'flow' en la cancha.

Para empezar le toca una complicada misión, como es el Real Madrid de Edy Tavares, el pívot más dominante de Europa en las últimas temporadas. Okafor no estará al 100% tal y como aclaró Porfirio Fisac en la rueda de prensa previa al choque ante los blancos. Un partido en el que no estará el otro jugador nigeriano del equipo, Obi Emegano, que sigue recuperándose de la rotura de ligamento cruzado de su rodilla que sufrió a finales de la temporada 2021-2022.

"Me siento bien. Tengo mucho tiempo para prepararme. Intento tomarlo día a día. Entre mis objetivos está tener una temporada en la que esté sano. Quiero continuar donde lo dejé", aseguró el escolta a Relevo días antes del estreno liguero frente al RealMadrid. "Tenemos muchos partidos por delante y va a ser una temporada larga".

Emegano y Okafor son dos de los pilares de este nuevo Zaragoza que ha incorporado hasta nueve fichajes este verano. Y ambos no sólo comparten pasaporte (disputaron juntos los Juegos de Tokio) sino que una palabra también es común para ambos: la lotería.

 

En el caso del escolta ésta llegó en forma de 'green card', la tarjeta de residencia permanente en Estados Unidos. Su padre la solicitó para intentar sacar a su familia de la pobreza en Nigeria y dar a sus hijos una nueva oportunidad. Obi tenía tres años cuando su padre fue uno de los 50.000 afortunados que obtuvieron el visado permanente entre los solicitantes de países que tienen poca emigración a Estados Unidos. Ese día todo cambió para los Emegano.

"Nos mudamos a Oklahoma, justo al lado de mi tía. Fueron días muy familiares", recuerda el escolta para este medio. Eran días felices en los que a los Emegano les preocupaba más el fútbol que el baloncesto. "Yo no empecé hasta que tenía 10-11 años. Éramos una familia de fútbol. A mi padre le encantaba el Calcio".

Al otro protagonista de la historia, Jahlil Okafor, la lotería le tocó en 2015 cuando la bolita con la elección número 3 cayó en Philadelphia. Su nombre fue el tercero en salir por boca de Adam Silver tras los de Karl-Anthony Towns y D'Angelo Russell. Los Sixers necesitaban un jugador interior mientras Joel Embiid se recuperaba de sus continuas lesiones y depositaron su confianza en un Okafor que en la NBA no llegó a cuajar y que ahora busca redención en el Viejo Continente.

"Es genial. Es un gran tipo", asegura su compatriota cuando habla sobre el fichaje estrella del equipo maño. "No puedo decir nada malo de él. Está trabajando muy duro. Como yo también está volviendo de una lesión. Estamos encantados de tenerle. Tiene mucha hambre por demostrar. Lo puedes ver en sus ojos. Siempre está trabajando para ello y gracias a él vamos a tener una buena temporada", concluye Emegano sobre uno de los nombres propios de la ACB que arranca con este auténtico duelo de titanes entre Tavares y Okafor. Un enfrentamiento que otra lotería, la del calendario, ha deparado en esta primera jornada.