Dylan Osetkowski y Yankuba Sima imponen su ley en Murcia y Unicaja ya tiene la primera

Murcia.-Si hubiera que definir con una sola frase lo que ha sido el partido de este sábado en el Palacio de los Deportes de Murcia sería, sin duda, la siguiente: "Bienvenidos a los playoffs de la Liga Endesa". Porque el recital que se ha dado sobre el parqué, la intensidad de juego y el despliegue táctico que han dado UCAM Murcia y Unicaja es el perfecto ejemplo de lo que es la mejor liga de Europa. Esa en la que da igual lo que haya pasado en las dos citas anteriores, que fueron dominadas por los de Sito Alonso, porque la pizarra de Ibon Navarro todavía tenía que hablar. Y lo hizo (66-74).

Unicaja dominó el inicio del partido de forma contundente y ahí estuvo la clave de todo. Porque esa ventaja de 16 puntos que lograron los malagueños en el primer cuarto fue la que les dio la victoria. Y, aunque durante el resto del partido UCAM Murcia hizo la goma hasta el punto de volver una y mil veces, esta vez no fue suficiente. Unicaja ya tiene esa "única victoria" en la que insistía Ibon Navarro tras el segundo duelo. Habrá partido el próximo el lunes en Murcia (20:30 horas), la ciudad cuyo equipo ya ha hecho historia y está a solo una victoria de hacerlo aún más.

El primer cuarto de Unicaja ha sido el claro ejemplo de que, como cantaban los desplazados desde Málaga, "Ibon tiene un plan". Porque si en el Martín Carpena el equipo se vio totalmente superado por la situación (y por la zona que le planteó Sito Alonso), en el Palacio de los Deportes de Murcia la historia ha sido totalmente diferente. "Ahora la presión la tienen ellos", decía Ibon Navarro tras el 2-0 de los murcianos y no se equivocó. Es más, eso fue lo que hizo, precisamente, que los suyos se quitaran ese peso de encima y saltaran al parqué de forma arrolladora. Desde el inicio llevaron el ritmo de la defensa, provocaron errores en el UCAM y lograron romper y evitar la defensa zonal de Sito Alonso. Además, reapareció Dylan Osetkowski (estuvo apagado durante el resto de la serie) y se le sumó Yankuba Sima. Entre ambos formaron una dupla interior letal que castigó con contundencia cerca del aro. Y, si no, basta con ver el resultado del cuarto: 9-25 para los de Ibon Navarro.

Si hay un jugador que ha sabido leer a la perfección lo que estaba haciendo Unicaja en la primera mitad para tratar de evitarlo, ese ha sido Troy Caupain. Al base le ha tocado bailar con el más feo, porque se ha encargado de pelear con Dylan Osetkowski para tratar de cerrarle ese pasillo que parecía encontrar y si las estadísticas del californiano no fueron mayores fue gracias a él. Además, fue de los más lúcidos de cara a aro durante ese segundo cuarto en el que UCAM Murcia logró solventar la sangría del primero y recortar distancia (y mucha) en el marcador.

Al grito de MVP lo ha coreado su afición desplazada hasta Murcia y no es para menos. Osetkowski ha sido el líder de Unicaja esta temporada y en esta serie de los playoffs se había apagado… hasta hoy. Porque el californiano ha vuelto a demostrar por qué su nombre sobrevolaba grandes clubes de Europa para llevárselo este verano. Ha sido el referente en anotación, el faro de guía en ataque y, junto a Sima, el más listo de la clase a la hora de cazar rebotes y dotar a los suyos de segundas oportunidades. Unicaja había echado mucho de menos a Osetkowski, pero el californiano ya ha vuelto.

Esa canasta que le ha valido el 2+1 para poner el 30-39, que ha peleado de forma descomunal cuando tenía encima a toda la defensa del Unicaja y en la que le ha sacado la falta a Kravish… ¿Cómo no ponerse esa acción de fondo de pantalla? Encima ha sido la que ha supuesto los 8 puntos consecutivos del estadounidense que han reactivado al UCAM Murcia tras arrancar el tercer cuarto. Si hay un jugador que ha conseguido dejar encendido el botón de clic de UCAM Murcia para que se reenganchase al partido, tanto en el primer cuarto (ha sido el que rompió ese parcial de 15-0 de Unicaja) como en el tercero, ese ha sido él. Aunque luego Unicaja haya seguido haciendo de las suyas.

Qué partido del gironí... La manera de defender el aro hoy de Yankuba Sima ha sido, precisamente, una de las claves del partido. Porque si Osetkowski era quien se encargaba de los rebotes en el aro rival, en el de Unicaja no había quien le arrebatase un rebote al pívot. La actuación que ha firmado ha sido excelsa, porque, además, también ha aportado y mucho en anotación y clave para que Unicaja logre su primera victoria de la eliminatoria.

Si algo ha dejado claro este UCAM Murcia es que, por más que se le ponga cuesta arriba el partido, no va a bajar los brazos. Y eso es obra y gracia de Sito Alonso y de la filosofía que ha sabido inculcar a los suyos. Por más diferencia que hubiera en el marcador, siempre aparecía alguien para devolver todo el aliento que el Palacio de los Deportes de Murcia -incansable y totalmente metido en el partido- estaba dando al equipo. Primero fue Sleva, luego Caupain con su defensa o Morin, después Radebaugh y Howard Sant-Roos en el último cuarto... El caso es que UCAM Murcia siempre tenía a alguien que tirase del carro.