LIGA ENDESA

Luis Guil, tras su enfado por el arbitraje ante el Barça: "Al final cuesta ganarse el respeto"

El técnico del Zunder Palencia repasa su primer mes y valora las opciones de salvación del equipo palentino.

Luis Guil da instrucciones en un entrenamiento con Palencia./El Norte de Castilla
Luis Guil da instrucciones en un entrenamiento con Palencia. El Norte de Castilla
Guillermo García

Guillermo García

"Pido respeto para Palencia, pido respeto para el Zunder en lo que queda de liga. Creo que hoy, por ciertos errores, no nos han dejado. Ya es difícil llegar a competir un partido así, pero lo hemos hecho". Tres frases que resonaron con fuerza el pasado fin de semana cuando Luis Guil, entrenador del Zunder Palencia, repasaba la derrota de su equipo ante el Barcelona (102-94) y la actuación arbitral. Palabras con las que mostraba su desencanto y que hoy todavía tienen eco.

Pasados los días, ¿se le ha pasado el enfado?

No, si no era un cabreo. Es que te sientes un poco impotente, sinceramente. Vas un poco al límite y al final es un poco… yo qué sé. Antes de ir a la rueda de prensa vi los últimos tres minutos en vídeo, ¿eh? No voy con el calentón solo. Antes de ir veo el vídeo de lo ocurrido. Voy con conocimiento. No me gusta ir en plan calentón. Me gusta ir con conocimiento y viendo las cosas que han pasado para poder hablar.

¿Es el peaje que hay que pagar? ¿Sentís que se os mide con diferente rasero?

Yo creo que al final, sinceramente, es un poco ganarte el respeto, ¿no? Y yo creo que también te lo tienes que ganar tú. He dirigido en varios países y en varias ligas. También he dirigido equipos en los que han venido jugadores nuevos, que no han jugado esa liga. Y al final, como entrenador, como jugador, como equipo, cuando eres debutante en una liga, te tienes que ganar el respeto tú también. Te lo ganas con los resultados, con tu trabajo, etcétera. Pues al final cuesta ganarse el respeto. Me refiero, no es que no te respeten, pero es verdad que otros ya se lo han ganado, ya lo tienen. Y tú tienes que ganártelo. Te falta ese punto para poder estar en igualdad de condiciones en ciertos momentos para mí.

Quitando el tema arbitral, ¿qué balance haces de este primer mes al frente del Palencia?

Yo estoy contento por cómo estamos trabajando, cómo estamos mostrándonos. Creo que se nos identifica ya como equipo con ciertas características y también nos hemos ganado el respeto de los rivales, que ya preparan los partidos contra nosotros con ese respeto. Eso está bien, pero al final, como profesional, me queda ahí el sabor agridulce del tema de ganar.

Creo que hemos tenido varios partidos para poder ganar y nos faltan esos ciertos mecanismos o saber jugar esos momentos importantes del partido. Por ejemplo contra Manresa, 8 arriba y el partido controlado. O el otro día un poco, llegando al momento que queríamos, porque al Barça no le podemos ganar en su casa en el primer cuarto, segundo o tercero. Teníamos claro que tenía que ser en el último cuarto. Y llegamos a ese momento en que vas uno abajo, dos posesiones, dos triples liberados para ganar y no sabes manejar esos tres últimos minutos para forzar personales, para forzar situaciones. Creo que nos falta ese punto. Y eso es lo que me da un poco rabia de no haber conseguido en este mes.

Por lo demás, muy contento con el trabajo, con los jugadores. Y con algo que no he vivido en mi vida, que es cómo esta ciudad y cómo esta afición respalda a este equipo.

"Está claro que cuando coges un equipo con sólo una victoria, prácticamente terminada la primera vuelta y con las limitaciones que tenemos, es difícil"

Luis Guil

¿Puede ser Palencia su aventura más complicada como entrenador? Al menos en lo que ha objetivos deportivos se refiere.

En ese aspecto sí es lo más complicado. Está claro que cuando coges un equipo con sólo una victoria prácticamente terminada la primera vuelta y con las limitaciones que tenemos es difícil. Yo creo que Palencia es ejemplo para otros equipos porque gasta lo que tiene, sabe cuál es el proyecto porque sabe cuál es su límite. Pero también tiene un problema, que tú tampoco puedes pasar ese límite para intentar cambiar presupuestariamente la dinámica.

Entonces está claro que no es un reto fácil, pero para mí era muy atractivo, con una ciudad, una directiva y un club implicado al 500%. Y luego está trabajar con estos jugadores. Está siendo muy gratificante trabajar con ellos cada día. Estoy contentísimo, porque cada día vienen, a pesar de las derrotas y de la situación, al 100% para intentar cambiar la dinámica y creyendo en lo que estamos haciendo, que también es importante.

Guil dando instrucciones a sus jugadores. El Norte de Castilla
Guil dando instrucciones a sus jugadores. El Norte de Castilla

¿Cómo estaba ese vestuario cuando llegaste, con sólo una victoria en su casillero?

Es muy buen vestuario, pero cuando tienes la mochila tan cargada de derrotas es difícil cambiar esa dinámica. Para mí fue importante dejar claros los roles y simplificar las cosas. Irnos a lo sencillo. No ir tanto a la táctica, aunque yo la estoy usando bastante, y primero ir a las cosas fáciles, a mejorar lo simple tanto en defensa como en ataque.

Y luego clarificar los roles de los jugadores, que cada uno sepa lo que tiene que hacer y que el equipo está por encima del proyecto. Yo creo que además los jugadores lo tenían claro y me fue relativamente sencillo, a pesar de la situación, cambiar esos ánimos.

Hablaba antes también de algo que está siendo muy gratificante en esta aventura y es la afición de Palencia.

Es indescriptible. Yo no he visto una cosa así en mi vida. Ver como una afición, a pesar de los resultados, con ese sentimiento por el equipo, ese disfrute con el equipo, ese apoyarlo en cualquier circunstancia, ese terminar un partido como Manresa, que es un partido marcado en rojo en tu calendario, perder y que un pabellón entero sea el que levanta el ánimo de los jugadores, el que te levanta como entrenador es increíble.

A mí, sinceramente, lo que más me joroba de las derrotas, por decirlo fino, es la afición. El no responder ese cariño con victorias cada día.

Antes hablaba de la táctica. De momento lo que sí se ve en el equipo es más ritmo y desde que ha llegado, el equipo juega un mayor número de posesiones por ataque. ¿Qué está intentando implantar?

Antes de coger el equipo y antes de tomar la decisión, sí que hice un análisis del equipo y era el equipo que menos posesiones tenía por partido. Iba un poco en contra, primero de mi filosofía, pero mi filosofía al final se tiene que adaptar al tipo de jugadores de la plantilla, pero también creo iba en contra del tipo de jugadores que tenía.

Nosotros en Palencia no creo que tengamos un equipo para estar jugando 5 contra 5 todo el partido contra nadie. Debemos ir a intentar anotar algunas canastas 'fáciles' y en superioridad o en llegadas en transición en los primeros 7 segundos.

Hice un poco un estudio de las anotaciones que habíamos tenido en los primeros 7 segundos, en los segundos 7 y en los terceros 7. Éramos el equipo que más tiraba en los últimos 7 segundos y el que menos en los primeros 7. Y creo que esa dinámica sí que la hemos cambiado. Eso nos ha hecho aumentar las posesiones y el tanto por ciento en el tiro.

Yo también les dije a los jugadores que cualquier tiro bien tirado en cualquier momento está bien hecho. No hay que esperar al último segundo o a los últimos 7 segundos de la posesión. Eso sí, buenos tiros, no tiros contestados, forzados o malos tiros. Y yo creo que eso también ha dado confianza al jugador para saber que cuando tiene una posibilidad de hacer un buen tiro, lo puede hacer. Y no hay problema en poner error en el tiro.

Lo que no quiero son errores en defensa. Eso sí que intento que estemos muy enfocados en tener claro que no tenemos que cometer errores defensivos. Debemos estar sólidos en eso. Y que adelante sí que dar un poco esa libertad al jugador.

"Nosotros en Palencia no creo que tengamos un equipo para estar jugando 5 contra 5 todo el partido contra nadie"

Luis Guil

¿Qué tiene que mejorar Palencia para soñar con permanecer en Liga Endesa?

El manejar los momentos de verdad. Los del último cuarto, los del final. Hacer lo que hemos hecho durante todo el partido en el final del encuentro. Cuando te pesa la mochila de las derrotas, la situación que tienes… En ese momento tenemos que seguir haciendo las cosas que hemos trabajado durante la semana para poder ganar los partidos. Yo creo que ese es el paso fundamental que tenemos que dar.

Ahí lo hemos visto ante el Zaragoza, Manresa y el Barça. En esos tres partidos hemos llegado con un cierto control del ritmo del partido. Haciendo lo que queríamos hacer durante todo el partido y un poco dejando de hacerlo en el último cuarto. Y yo creo que es lo que tenemos que ir haciendo. Sobre todo para de verdad dar el paso de ganar.

¿A usted cuánto le pesa la mochila de los resultados?

Muchas veces me habla el cuerpo técnico de los resultados de otros equipos, de las victorias que faltan… Y de verdad les digo: "Si es que me da lo mismo". Yo sé que en la Liga ACB mínimo, mínimo tienes que ganar 11 partidos para poder salvarte. Nos quedan 8. Me da lo mismo el rival, me da lo mismo la situación.

Como les dije cuando perdimos en Manresa, "hemos perdido en casa, tendremos que ganar en el Palau". Y lo hemos intentado. Y ahora tenemos que intentar ganar a la Penya. Iremos partido a partido para intentar conseguir esas 8 victorias que nos abran la puerta de soñar con estar un año más en la Liga Endesa.

Vamos a hablar en clave Selección. ¿Cómo ha vivido el anuncio de la vuelta de Ricky Rubio a los entrenamientos?

Pues te lo digo a nivel personal, porque le conozco bien además. Le tengo mucho cariño personal porque le he entrenado, desde que tenía 16 años. Y mi relación con su familia entera, con sus padres, con su madre, que en paz descanse, y con Marc es increíble. Y para mí que él esté bien es lo más importante. Que esté en ese proceso de estar contento, de disfrutar del baloncesto que le encanta, pero sobre todo de él. Y que esté bien consigo mismo. Lo más importante para mí, es que Ricky esté bien de verdad. Te lo digo personalmente. Es una gran alegría.

¿Cuántas horas le quita Sergio Scariolo de pensar en el Zander Palencia? ¿Cuántas llamadas le hace a la semana para ir pensando en la Selección?

[Risas] Bueno, a la semana no, pero la verdad es que ya estamos planificando no solo la ventana. Estamos planificando también el Preolímpico, ya con vistas a prepararnos bien para esa cita tan importante que tenemos en verano. Ojalá podamos disfrutar de otros Juegos Olímpicos. Y yo creo que para eso hay que prever e ir trabajando. Incluso prever cómo van a ir los rivales que vamos a tener en Valencia en este verano.

Sergio siempre tiene un plan de trabajo perfecto, de seguimiento de jugadores, de seguimiento técnico, de seguimiento táctico. Y somos muchos los entrenadores que estamos alrededor de la Selección. Somos muchos los que nos distribuimos el trabajo para poder tener controlados tanto a nuestros jugadores como a los rivales y poder preparar cada cita como la prepara Sergio, anticipándose a todo el mundo para poder competir e intentar volver a llevar a la Selección a la cita olímpica. Y ojalá lo podamos conseguir dentro de un Preolímpico que va a ser durísimo para todos.