FINAL FOUR EUROLIGA | REAL MADRID 80 - PANATHINAIKOS 95

El Real Madrid tiene 72 horas para "llorar y levantarse" porque ya espera el Barça

Este miércoles recibe al conjunto culé en las semifinales de la Liga Endesa.

Chus Mateo durante un tiempo muerto en el banquillo del Real Madrid. /GETTY IMAGES
Chus Mateo durante un tiempo muerto en el banquillo del Real Madrid. GETTY IMAGES
Noelia Gómez Mira

Noelia Gómez Mira

El borrón y cuenta nueva esta vez debe llegar lo antes posible. Porque el Real Madrid apenas tiene tiempo de recrearse en el tropezón que ha supuesto para ellos la final de la Euroliga. El desgaste físico es patente y el varapalo mental, también, pero en sólo 72 horas el equipo blanco tiene que medirse al eterno rival, el Barça, porque todavía hay un título en juego. Y en eso es lo que ahora tiene que pensar y tiene que concienciarse el equipo blanco. La Liga Endesa continúa y las semifinales por el título arrancan este miércoles con el recuerdo de lo que ocurrió hace un año, cuando el camino europeo culminó con otro desenlace, eso sí, pero el desgaste de lo que supone jugar una final continúa.

"No hemos hecho nada todavía" ha sido el mantra que ha mantenido Chus Mateo durante todo el año. Y aunque en la Euroliga ya no haya vuelta atrás, la Liga Endesa es otra historia. Y ahí, esa frase cobra más sentido que nunca. Porque mientras que el Barça viajará al WiZink Center tras casi una semana de descanso y con la mente totalmente centrada en la cita de semifinales -eliminatoria que se disputa al mejor de cinco partidos-, los blancos tienen ahora que deshacerse del chip de la Euroliga y centrarse en lo que les viene por delante: una serie ante el Barça que, de superarla, harán que se enfrenten en la final con el vencedor de la eliminatoria entre Unicaja y UCAM Murcia en la que será la última batalla por el título liguero. Y el Real Madrid no quiere revivir los fantasmas del pasado.

El desgaste que le supuso la pasada Euroliga, con ese quinto partido en los ya míticos playoffs ante el Partizan, la Final Four de Kaunas y el levantar el título, así como ese desgaste que entonces sufrieron después por culpa de quien ha sido en estos playoffs de Liga el azote del Barça, Kyle Guy -entonces con el Joventut Badalona- terminó por dejar al Real Madrid con ese contundente 3-0 que le impuso el Barça en las finales y que hizo al conjunto culé levantar el título de campeón en el WiZink Center.

"¿Mi opinión sobre el calendario? Igual es mejor preguntar a los jugadores. Vamos a terminar con 90 partidos. No es fácil. Todos estamos intentando que los jugadores jueguen al máximo. Son muchos partidos. No es fácil mantener una buena forma desde el principio hasta el final. No es fácil combinar la Euroliga, con este nivel, y las ligas locales como la ACB, que también es increíble

La lección de entonces está aprendida. Lo que faltará ahora es ver cómo se consiguen controlar las fuerzas. Porque esta vez ese cruce ante el eterno rival llega antes, en semis. Y a diferencia de lo que ocurrió hace un año -cuando ambos también se enfrentaron en el partido de semifinales de la Final Four-, esta vez el Barça ni siquiera ha llegado a estar entre los cuatro mejores de Europa. ¿Qué significa? Que el conjunto culé tiene toda la carne puesta en el asador de cara a la Liga Endesa para tratar de revertir esa situación en la que se ha visto sumida este año: perdió la Supercopa, la Copa y quedó eliminado en la competición continental. Y al blanco tras la caída en la final de la Euroliga... no le queda otra que ir a por todas también en la liga doméstica.

Por ello, a Chus Mateo le toca ahora hacer un importante trabajo mental y de concentración de los suyos. Un ejercicio que haga que dejen atrás absolutamente todo lo ocurrido en Berlín, para bien y para mal, con el fin de centrarse en lo que les queda. Que no es poco. Y habrá que ver cómo responde el equipo después del desgaste físico que ha supuesto esta final.

De este modo, al Real Madrid no le da tiempo ni siquiera en pensar lo que pudo ser y no fue. Porque en sólo 72 horas, el balón volverá a echarse al aire ya que sigue habiendo un título en juego. "Tenemos dos opciones. Llorar, y vamos a llorar esta noche. Y la segunda es levantarnos, que lo haremos mañana porque es lo que hacemos siempre. Tenemos que mostrar que el carácter del Madrid es felicitar al oponente y seguir hacia delante", dijo Chus Mateo en rueda de prensa tras la derrota en Euroliga. Y es que al conjunto blanco no le queda otra.

"Sólo puedo entrenar a mi equipo, intentar mantener a mis jugadores lo más frescos posible y listos para jugar partidos y situaciones como ésta", admitía el técnico al que ahora le toca poner el modo Liga Endesa y dejar atrás todo lo demás. Porque como ya ha dicho y repetido mil veces Chus Mateo "la Liga Endesa es muy dura y nada de lo hecho hasta ahora sirve. Hay que pensar sólo en el partido que viene".