Ajustes, pizarra y entrenamiento 'light' sin el juego interior para recargar gasolina en el Real Madrid

Barcelona.- Los finales de temporada tienen estas cosas. La carga física que se acumula, más en equipos como pueden ser Real Madrid o Barça, empieza a pasar factura y eso se acaba notando sobre el parqué. Y aquí el Real Madrid va en cierta desventaja con el conjunto culé. Por eso no resultó extraño que cuando la mañana de este sábado los de Chus Mateo salieron a ejercitarse, lo hicieran sin Sergio Llull, Edy Tavares ni Gerschon Yabusele. O lo que es lo mismo, prácticamente sin su juego interior titular. Porque que el pívot y el ala-pívot hayan tenido un entrenamiento más light que el resto de sus compañeros no responde a otra cosa que a eso: el cansancio.

Aunque Yabusele no jugó la recta final de la Euroliga por su sanción, fue el que más minutos acabó cosechando en esos partidos simultáneos que se desarrollaban de Liga Endesa. Y, en definitiva, al final el desgaste también era algo mayor que en otros casos. Si ya hablamos de Edy Tavares, pues peor aún. El caboverdiano se ha visto en la casi obligación de rozar los 40 minutos de juego, ante las numerosas jornadas que estaba sin suplente -Poirier tuvo que ser operado de apendicitis, volvió y se rompió en Belgrado durante el playoff de Euroliga-.

Y no, la recuperación de ambos, dadas sus envergaduras y el desgaste físico que arrastran no es la misma que la del resto. Por eso, que se ausentaran -al menos de los primeros minutos que estaban abiertos a la prensa- del entrenamiento matinal del Real Madrid no resultó extraño. Al contrario.

"Estamos ya cortos de gasolina", dijo Chus Mateo antes de que diese comienzo esta final. Y esa es una realidad. Porque aunque el técnico blanco reconoció tras el primer partido que no era este el único motivo por el que el Real Madrid cayó derrotado en el Palau, sí que insistió en que tratarán "que no se note el cansancio que se ha podido notar en el último cuarto".

Por eso, que tanto Yabusele, '4' titular del conjunto blanco, como Tavares, el '5' y gran arma de los de Mateo, no estuvieran durante el inicio del entrenamiento con los demás no es raro. Al contrario. La necesidad de recargar pilas (o gasolina) es un hecho cuando, además, el Real Madrid acusa la falta de Gaby Deck en el juego interior. Un jugador explosivo y muy físico, que es capaz de insuflar ritmo y efectividad en ataque y defensa y descargar, al menos algo, a sus compañeros. Y más aún ante un rival tan duro como el Barça.