¿Cuántos mundiales de baloncesto tiene Estados Unidos?
En todo campeonato de baloncesto por selecciones, EE.UU. es el rival a batir. Aunque en un Mundial suele haber más posibilidades.
![Kevin Durant durante un partido con EE.UU en el Mundial de 2010./EFE](http://s2.sportstatics.com/relevo/www/multimedia/202308/05/media/cortadas/kevin-durant-REpYqYVPbYKaAYYClZnvOvI-1200x648@Relevo.jpg)
Pese a que fue inventado por un canadiense, el Dr. James Naismith, se puede afirmar sin rubor de que el baloncesto es un deporte netamente estadounidense. Primero, porque fue creado en Springfield, Massachussets, desde donde se extendió a lo largo de las barras y estrellas antes de exportarse al mundo. Segundo, porque por su vasta extensión y alta población es en suelo norteamericano donde más se ha desarrollado el juego.
En cada competición internacional Estados Unidos es el rival a batir. El baloncesto es su juego, la NBA es la liga más poderosa del planeta y poseen talento en bruto capaz de completar varios combinados que serían capaces de coronarse en casi cualquier campeonato. Pero también es cierto que, progresivamente, la brecha que un día parecía insalvable se ha ido acortado cada vez más y más. Actualmente, el baloncesto es un deporte global y varios de los mejores jugadores del mundo son nacidos y formados fuera del sistema estadounidense: Nikola Jokic, Giannis Antetokounmpo o Luka Doncic son los ejemplos más claros.
Cuántos mundiales de baloncesto ha ganado EE.UU.
Si existe una competición donde poder derrocar a la todopoderosa selección estadounidense de baloncesto es, sin duda, el Mundial. Desde la óptica del USA Basketball, los Juegos Olímpicos son la gran competición. El campeonato que no se permiten perder. El palmarés no miente: en el torneo masculino han ganado el oro olímpico en 12 ocasiones, por dos de la Unión Soviética y uno de Yugoslavia y Argentina.
La Copa Mundial de la FIBA sin embargo es otra historia. En total, Estados Unidos ha ganado cinco Mundiales de baloncesto. Los mismos que Yugoslavia si unimos el palmarés de la antigua Yugoslavia con el de la llamada República Federal de Yugoslavia, que comprendía los territorios de Serbia y Montenegro. La Unión Soviética consiguió tres, mientras que España o Brasil acumulan dos cada uno. Como decíamos, la brecha no es insalvable.
Esto ocurre por varios motivos. Uno importante es el desprecio por parte de EE.UU. al Mundial como competición. Esto se ve, sobre todo, en los primeros años de historia del campeonato. En un baloncesto todavía en vías de formación, el país norteamericano acudió a las primeras citas con equipos corporativos, compuestos por trabajadores de una determinada empresa. Esta actitud se ha matizado con el paso del tiempo. Al final, los norteamericanos también tienen su orgullo y perder no es algo que agrade a nadie. De manera más reciente, la Copa Mundial de la FIBA ha sido utilizada por EEUU como el campo de pruebas dentro del ciclo olímpico. Un torneo en el que foguear a los jóvenes talentos que luego han de ser clave para el objetivo final: el oro olímpico.
El otro gran motivo por el que el Mundial posee un palmarés mucho más variado es la mejora sustancial dada por el resto de países. En el contexto de la Guerra Fría, tanto Yugoslavia como la Unión Soviética vieron en el juego de la canasta una oportunidad de derrotar al enemigo en su propio campo. Más recientemente, el paso adelante dado por España ha logrado que los ocupantes en lo alto del cajón varíen de un torneo a otro. Aún con todo, como decíamos, Estados Unidos son favoritos siempre que haya una pelota naranja de por medio y los cinco Mundiales que acumulan no son pocos precisamente.
1954: La primera redención de Estados Unidos
El primer Mundial de baloncesto de la historia se disputó en 1950. La sede fue Argentina y los anfitriones se proclamaron campeones al derrotar a Estados Unidos en la final por 64-50. EE.UU. había acudido a la cita con un equipo de la empresa Chevrolet. Los locales, sin embargo, se lo tomaron muy en serio, metiendo 25.000 aficionados en el Luna Park. Para la segunda cita mundialista, el combinado norteamericano fue representado por un equipo de la empresa Caterpillar.
Sin embargo, en él se encontraban seis jugadores de dos metros de altura o más. Esta vez no querían sorpresas, y consiguieron vencer tras ganar los nueve partidos que se disputaron. Es importante tener en cuenta que en aquella cita, celebrada en Brasil, los países de Europa del este no estuvieron presentes por las malas relaciones diplomáticas con los anfitriones. Esto dejó fuera a la Unión Soviética, Checoslovaquia y Hungría, allanando un poco más el camino a los norteamericanos. Kirby Minter, un trabajador de la empresa Caterpillar que había jugado al baloncesto durante su etapa universitaria, fue elegido MVP del torneo al promediar 11,1 puntos por encuentro.
1986: Estados Unidos conquista el Mundial de España
Hubo que esperar 32 años hasta volver a ver a Estados Unidos ganar un Mundial de baloncesto. El detonante ocurrió cuatro años antes, cuando un buen equipo norteamericano formado por jugadores con cierto nombre como Glenn 'Doc' Rivers, Antoine Carr o Jim Thomas perdieron la final contra la URSS de Vladimir Tkatchenko por 95-94. USA Basketball se puso las pilas y llevó a España 86 un equipo muy competitivo, repleto de jóvenes promesas como David Robinson, Tyron Bogues o Steve Kerr entre otros.
EL Mundobasket 86 está considerado el primer Mundial de la era moderna. Fue el primero disputado en suelo europeo. Además, en él participaron 24 equipos. Era un torneo especial y en EE.UU eran consciente de ello. Para el recuerdo queda la final disputada contra la URSS, entonces liderada por Arvydas Sabonis. El choque, muy igualado, todavía se recuerda como un clásico. Finalmente, en esta ocasión la moneda cayó de cara estadounidense, ganando a sus grandes rivales por 87-85.
1994: la irrupción del llamado Dream Team II
El baloncesto internacional tuvo un punto y aparte en 1992, cuando Estados Unidos llevó un equipo de jugadores profesionales para disputar los Juegos Olímpicos de Barcelona. No fue un equipo cualquiera, de hecho. Se trató del Dream Team. Para muchos, la mejor selección jamás ensamblada. Dos años más tarde, el Mundial se disputaba en Canadá y USA Basketball armó lo que se conoció como el Dream Team II. Era la primera vez que un conjunto de jugadores de la NBA fue a un Mundial, aunque sin la trascendencia de sus predecesores. Aún así, aquel equipo tenía integrantes de la talla de Shaquille O'Neal, Dominique Wilkins, Reggie Miller o Joe Dumars.
Como estaba previsto Estados Unidos arrasó, imponiéndose en la final a Rusia por 91-137. Curiosamente, su partido más complicado resultó ante España en primera ronda. Los de Lolo Sainz mantuvieron el tipo durante todo el choque, perdiendo únicamente por 15 puntos de diferencia (115-100). Sin embargo, aquella actuación no sirvió de mucho pues días más tarde fueron incapaces de pasar la fase de grupos al caer contra pronóstico contra China en lo que popularmente se conoció como el chinazo (76-68).
2010: el Mundial de Kevin Durant
En 2002 Yugoslavia ganó el Mundial de baloncesto. En 2004, Argentina fue campeona olímpica mientras que EE.UU tuvo que conformarse con el bronce. En 2006, España ganó su primer Mundial. Decíamos que perder una Copa del Mundo no suele tener consecuencias en Estados Unidos, pero un ciclo internacional tan desastroso no pasó desapercibido. En 2008, USA Basketball armó al equipo redentor con Kobe Bryant, LeBron James o Dwyane Wade. Quizá el único que puede competir con el Dream Team en cantidad de jugadores históricos acumulados. Para 2010 las primeras espadas decidieron descansar, pero la selección norteamericana no quería quitar el pie del acelerador. Habían sido demasiadas humillaciones consecutivas y ansiaban ganar.
Por ello, EE.UU. se presentó en Turquía con un equipo repleto de jugadores jóvenes, pero con un gran cartel todos ellos. Allí estaban Kevin Durant, Stephen Curry, Derrick Rose o Russell Westbrook, todos ellos futuros MVPs de la NBA. Los norteamericanos no dieron opción a sus rivales, ganado los nueve partidos que disputaron a lo largo del torneo. El resultado de la final, 64-81 contra el combinado turco, dice todo de la superioridad mostrada por los de Mike Krzyzewski.
2014: Estados Unidos logra su primer doblete mundial
En 2014 el Mundial de baloncesto volvió a España. Fue una cita rara, en la que todo parecía predispuesto para repetir las finales olímpicas de 2008 y 2012 entre norteamericanos y españoles. Incluso se creó un formato que hacía que ambos conjuntos no pudiesen medirse hasta una hipotética final. España, sin embargo, falló en cuartos de final contra Francia (65-52) en una de las derrotas más dolorosas del ciclo más exitoso de La Familia.
Estados Unidos, por su parte, no erró y caminó cómodamente hacia su segundo título consecutivo, siendo el tercer país en lograr dos Mundiales seguidos tras Brasil (1959 y 1963) y Yugoslavia (1998 y 2002). Nuevamente, los norteamericanos presentaron un equipo joven, repleto de jugadores que ya despuntaban en la NBA y que estaban llamados a convertirse en All-Stars perennes. Así, en la plantilla se encontraban, entre otros, Kyrie Irving (MVP del torneo), Stephen Curry, Anthony Davies o James Harden, por nombrar solo a unos pocos.