Jenna Reneau, la árbitra que sacó de sus casillas a España y que ha hecho historia en el Mundial

Han pasado más de 24 horas desde que España cayese ante Canadá y fuera eliminada del Mundial de baloncesto. Y la derrota sigue escociendo. Sobre todo por dos imágenes que quedan en la retina del equipo español. Por un lado la corbata que sacó el triple de Álex Abrines y que evitó la prórroga. Y por otro, las señalizaciones de Jenna Renneau, la árbitra que desquició por momentos a Scariolo y los suyos.

Precisamente el balear no se mordió la lengua a la hora de hablar del arbitraje que se vivió durante el encuentro. "No sé si me multarán, pero el arbitraje es lamentable. Son demasiado protagonistas y no puede ser. Un partido de este calibre, con dos equipos jugándose todo... Los protagonistas somos nosotros, no ellos", apuntaba Abrines, resumiendo el sentimiento del vestuario nacional.

Especialmente con respecto a la estadounidense Jenna Reneau, la colegiada que terminó sacando de sus casillas a Scariolo y sus jugadores. Especialmente en la segunda mitad con un cambio de criterio a la hora de señalar faltas con respecto a la primera. En los dos primeros cuartos el trío arbitral señaló señalaron el mismo número de faltas (11) al equipo español y al canadiense, al que llegaron a amenazar con una técnica que finalmente no pitaron.

En la segunda mitad el balance fue algo diferente: 17 infracciones del equipo (incluidas 2 técnicas y 3 faltas en ataque) por 11 (2 de ellas en ataque) del conjunto norteamericano. Pero no sólo fueron las faltas. Reneau se convirtió en protagonista con decisiones como la técnica a Rudy por pasarle un balón a un canadiense con el pie o dejar sin sanción una falta de Shai ante la entrada de Alberto Díaz en el tercer cuarto. Pero fue, sobre todo, la disparidad de criterio entre los tres colegiados lo que descolocó al equipo español.

"No sólo en este partido, durante todo el torneo el arbitraje ha sido flojo. No me estoy quejando porque piten a favor o en contra, pero al final un día tiran para un lado y otro para otro y no puede ser", afirmaba Abrines sobre un arbitraje que no dejó contento a nadie.

La colegiada estadounidense se formó en el baloncesto universitario y desde ahí pasó a la WNBA y a la G League, dando el salto a la NBA la pasada temporada. Un curso en el que ha dirigido cinco encuentros con tres victorias locales y dos visitantes, siendo los Houston Rockets el equipo al que más veces ha pitado con dos encuentros en los que los texanos consiguieron la victoria.

Su llegada a la NBA ha permitido a Reneau hacer historia en este Mundial, al ser una de las tres primeras mujeres en dirigir partidos en una Copa del Mundo masculina. "Me siento honrada y bendecida por estar aquí", aseguraba la colegiada tejana antes de empezar el campeonato. "Ser una de las primeras junto a Amy Bonner y Blanca Burns es increíble. Y sé que vienen muchas más por detrás para trabajar con nosotras en el futuro".